Me desperté por los suaves besos que Yugyeom estaba repartiendo por toda mi cara.
-Déjame dormir -murmure adormilada.
-Deberíamos irnos, los chicos están preguntando por nosotros.
-Diles que se vayan al infierno, estoy cansada y adolorida.
Yugyeom se rió y acarició mí cabello.
-Eres agresiva por la mañana. Vamos despierta... son las ocho.
¡¿Que hora?!...
-¿Las ocho?.
Me puse de pie tan rápido que no me di cuenta que mis piernas estaban enganchadas a la sábana. Por lo que fui a dar de lleno contra el suelo.
Yugyeom corrió hacia mí, pero en vez de ayudarme, se echó a reír.
-¡¿Qué haces?, Ayúdame! -grité.
Me ayudó a ponerme de pie y enrollo mi cabello en su dedo.
-¿Por qué te levantaste tan deprisa? -preguntó riendo.
-Mi mamá suele llegar a las siete a la casa... ¿Aún no llegó?.
Yugyeom me observó las palmas de mis manos, que estaban rojas por el golpe anterior. Tomó un frasco de vidrio y lo puso contra ellas. Estaba frío, pero me relajo el ardor que tenía en las manos.
-Si, esta preparando el desayuno.
Deje el frasco en la mesita y rodee a Yugyeom con mis brazos. Él estaba completamente vestido y del cabello caían gotas de agua.
-¿Te diste una ducha?.
-Si, fue una ducha corta pero refrescante.
-Mi mamá te vio... ¿En la cama?.
Se rió y asintió.
-Hm, la escuche llegar y ordene un poco. No se sorprendio cuando me vio en tu habitación.
Tomó mi rostro entre sus manos y me besó dulcemente. Mis manos viajaron a sus hombros y me levantó por las piernas. Su lengua se abrió paso a la mía.
-¡Chicos, el desayuno esta listo!.
El grito de mi madre se escucho por la casa y nos separamos ante su grito. Como Yugyeom ya estaba completamente listo, decidí darme una ducha antes de bajar a tomar desayuno.
Me saque las bragas, la camisa y me metí a la ducha. Me dolían todos los músculos del cuerpo, incluso aquellos que no sabía que existían.
Enrolle mi cuerpo en una toalla y me mire al espejo. Parece que era cierto, eso de que cuando tienes relaciones pareces más brillante.
Aunque también tenía varias marcas por todo mi cuerpo, desde mi cuello hasta las costillas. Parecía como si hubiera sido atacada por miles de bichos.
Examiné el pequeño despacho, Yugyeom y mi madre no estaban en el comedor. Por lo que fui directo a la cocina.
-Miren quien apareció -bromeó mi madre.
-¿Cómo te fue?.
Tomó asiento en una silla y me miró risueña.
-Fue una noche tranquila, a comparación de otras personas.
Yugyeom se rió y tomó un trago de su jugo. Mis mejillas se volvieron calientes.
-Mamá, mantén la compostura.
-¡Es que estoy tan emocionada!... Era como uno de tus deseos prohibidos.
Dio rápidos aplausos y abrazo a Yugyeom. Este se rió mientras apoyaba su codo en la mesa.
Podía ver que detrás de su apariencia relajada, estaba nervioso y un poco avergonzado.
-Ya... Mamá me estas avergonzando.
-Perdón -dijo, pero su sonrisa no demostraba que estaba apenada.
El teléfono de Yugyeom empezó a sonar. Se disculpó y se fue al comedor a contestar.
-Mamá... ¿Puedes controlarte?.
-No seas tan infantil, ambas sabemos lo que paso ayer y créeme que si no fuera tu madre. Me habría interpuesto en tu relación.
-¿Qué? -pregunté confundida.
-Ese Yugyeom esta bien bueno, excelente cuerpo. ¿Ustaste protección?.
-¡Mamá!.
-Kassy, nos tenemos que ir -murmuró Yugyeom, entrando a la cocina.
-¿Tan temprano? -preguntó mi madre.
-Los chicos quieren hacer una comida antes de las citas, lo siento.
Mi madre miró fijamente a Yugyeom y después volvió a centrarse en mí.
-Esta bien, pueden irse.
Fui a tomar algunas cosas de mi habitación y a esconder cualquier evidencia de la noche anterior. A pesar de que mi madre supiera lo que había pasado, no me sentía cómoda con dejar mi ropa interior tirada por cualquier lado.
Cuando estuve lista baje a encontrarme con Yugyeom. Me volví para decirle adiós a mi madre, quien tenía una sonrisa de oreja a oreja.
Ayer un guardia había venido a buscar el coche, ya que al parecer las fans podrían reconocerlo. Por lo tanto tuvimos que llamar a un taxi para que nos llevara de vuelta al hotel.
Una vez dentro del coche, Yugyeom le pidió al conductor que encendiera la calefacción. El clima estaba frío y lamentablemente había entrado en el auto.
-Menudo día.
-¿No te gusta? Me encantan los días así -murmure.
Yugyeom se giró y me acercó a él.
-También me gustan los días así, es sólo que para nuestra cita no es muy bueno.
La curiosidad se hizo presente.
-¿Dónde iremos? -pregunté con una sonrisa ridícula.
-No te lo diré, así que no sigas preguntando.
Me senté recta y me crucé de brazos. Yugyeom me miró reprimiendo una sonrisa.
-¿Estas enojada? -preguntó.
Se acercó y depósito un beso en mi mejilla. Como niña de cinco años, me limpie la mejilla con el dorso de la mano. Sus labios viajaron detrás de mi oreja y tuve que respirar repetidas veces para controlarme.
-¿Sigues enojada? -volvió a preguntar.
-Dime cual es la cita y ya no lo estaré.
Lo miré con las cejas arqueadas, Yugyeom me abrazó y cargó su mentón en mi cabeza.
-¿Me estas chantajeando?.
Apretó los labios contra mi sien.
-Moriré por la curiosidad -susurre.
-No te lo diré, arruinaria nuestra cita.
Él miró por la ventana y yo hice lo mismo. De los árboles caían hojas cada vez que el viento rozaba sus ramas.
El día había llegado, era el último día que pasaríamos juntos, con todos los chicos y con Yugyeom.
Tal vez por eso el clima estaba así, era desalentador y triste... Justamente como me sentía ahora mismo.
😱CAP NUEVO😱
Queda poquito para el final... Bueno la verdad, aún no pienso en el final😂 Pero lo que si es seguro, es eue es el último día awey😢😢 Vamoh a llorar 🐢
Ajsjsj Gracias por sus leídos, comentarios y Votos💕 Las amo beibis😯
Nos vemos en un próximo cap, idolas💪😎.