Una Apuesta. Un Ganador©

By DoTCr18

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El capitán de fútbol apuesta con su equipo enamorar a la única chica que lo ha rechazado, lo que él no sabe e... More

Nota de la Autora
Prólogo
Capítulo uno
Capítulo dos
Capítulo tres
Un pequeño aviso
Capítulo cuatro
Capítulo cinco
IMPORTANTE
Capitulo seis.
Capítulo siete
Capítulo ocho
Capítulo nueve
Capítulo Diez
Capítulo once
Capítulo doce
Capítulo trece
Capítulo catorce
Capítulo quince
Capítulo dieciséis
Capítulo diecisiete
Extra
Capítulo dieciocho
Capítulo diecinueve
Capítulo veinte
Capítulo veintiuno
Capítulo veintidós
Extra #2
Capítulo veintitrés
Capítulo veinticuatro
Capítulo veintiséis.
Capítulo veintisiete
Capítulo veintiocho
Capítulo Veintinueve
Capítulo Treinta
Epílogo
Extra 1
Extra 2

Capítulo veinticinco

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By DoTCr18



Desaparecida.

Nunca me sentí tan mal y tan impotente en toda mi vida, esa sensación que te da cuando quieres hacer algo pero no puedes hacer nada.

Llegue al hospital como alma que lleva el diablo. No podía creer que Ana estaba en coma. Me sentía culpable; si tan sólo yo me hubiese enfrentado a mi padre, no debí dejarla sola. Todo es mi culpa.

Entro a urgencia directo al mostrador donde una enfermera levanta la vista de unos papeles y me pregunta:

— ¿En qué puedo ayudarla señorita? —dice mientras teclea en su ordenador.

—Quiero ver a un paciente. Lo trajeron por un accidente y...

La enfermera tomo una hoja de papel y la revisa por unos segundos. Ni siquiera me da el tiempo para decirle el nombre de la persona que busco.

— ¿Usted es familiar? —pregunta

—Soy su novia, su nombre es Nathan... — digo sin rodeos. Diablos sólo quiero ver a Ana.

—Disculpe pero sólo lo pueden ver familiares.

¡A la mierda!

—Necesito verlo ¡Quiero verlo! —ordeno.

—Cálmese señorita, o me veré en la penosa situación de llamar a seguridad.

Si las miradas pudieran matar aquella enfermera estaría enterrada cuatro metros bajo tierra. Estoy desesperado ¿porque tiene que pasar esto precisamente cuando Ana y yo por fin podemos estar juntos?

****

Traté de todo. Esperé por horas, hable con el médico a cargo. Hasta intente colarme, pero no pude verla.

Valeria estuvo llamando pero no respondí, no quiero hablar con nadie en estos momentos. Quise hablar con mamá para que me dijera que había pasado, lo poco que me conto Valeria fue lo poco que le conto Logan, según él Ana tuvo una fuerte discusión con mis padres, y cuando salía de casa fue cuando paso.

Salgo a caminar para despejar mi mente. No me dirijo a ningún lado en particular. Sólo camino hasta que llego a un parque dentro del hospital; tomo asiento en una banca solitaria ¿Qué puedo hacer?

—Ha pasado mucho tiempo desde que te vi —esa voz. Me giro para encararla, es ella, está junto a mí.

En un momento como este no puedo confundirla.

— ¡Todo es su culpa! Usted me regaló ese vino.

La mujer me ve curiosa, parte de sus ojos trasmiten calma y a la vez se me revuelve todo el estómago. Quiero culpar a alguien en este momento, y me parece correcto hacerlo con la anciana. .

—Veo que ya no eres el mismo de antes —lleva una canasta, se inclina y saca una manzana que se lleva a la boca.

— ¿Quién es usted y cómo revierto este embrujo o lo que sea? —me desespera el hecho de que este tan tranquila comiendo. No tiene idea de que está pasando.

—No importa quién soy, pero veo que el vino ha hecho efecto ¿Cierto Nathan? —sugiere con una voz calmada.

ALTO ¿Qué carajos?

Esperen, ella dijo mi nombre, a pesar de que en este momento estoy en el cuerpo de Ana.

— ¿Cómo sabe que soy Nathan?

—Sólo lo sé.

Por más que intente sonsacar información, ella está muy recia a dármela.

— ¿Qué hago para revertirlo? —digo al borde de la súplica.

—Primero tienes que saber y entender porque te di el vino—la mujer se cruza de brazos y prosigue.

<< El día en que te vi con Ana supe que ustedes estaban destinados para estar juntos, pero necesitaban ayuda. El amor no es fácil. Tú eras un chico arrogante y necesitabas sentir que era amar a una persona sin perjuicios. Ana tenía miedo al amor, no quería ser herida, y por ello no confiaba en nadie para entregar su corazón; sin embargo tú ayudaste a que ella amara. Ambos se ayudaron >>

Proceso todo lo que la mujer me cuenta. Pero no dice lo que yo quiero saber.

— ¿Cómo hago para volver a mi cuerpo?

Mis ojos están al borde de las lágrimas, la confesión de la anciana llegan a lo más profundo de mi humanidad, claro que ambos nos ayudamos, amar a Ana fue la mejor sensación que he sentido, tenerla conmigo es tenerlo todo.

—Con un acto de amor.

¿Acto de amor? ¿Qué todo lo que hemos pasado no es suficiente? Estoy a punto de preguntarle qué es exactamente lo que significa eso, pero desaparece. Me levanto a toda prisa y comienzo a buscar, los enfermos que están en el parque tomando el sol me observan con curiosidad.

Busco en cada banca, en cada rincón, entro al hospital, corro por los pasillos y llego a la entrada, pero no hay nadie. Estoy sola.

Veo a mi madre llegar, luce destrozada, por un segundo quiero decirle que estoy aquí, que estoy bien. Pero descarto la idea en segundos. Me acerco a ella por el pasillo.

—Hola señora

Conozco que a mi mamá nunca le cayó bien Ana, así que espero lo peor por mi acercamiento. Sin embargo comienza a llorar y me abraza.

—Gracias por venir a ver a mi hijo, ven conmigo —me toma del brazo —vamos a verlo.

—Muchas gracias —me limito decir.

Cuando entro en la habitación y observo a mi cuerpo conectado a tantos aparatos por poco me desmayo, siento el cuerpo de Ana pesado y comienza a faltarme el aire.

En ese momento comprendo que es lo que tengo que hacer por ella.


Valeria.

2:00 am.

Escucho mi celular sonar ¿Acaso ya es hora de levantarme? Todavía esta oscuro. Enfoco la pantalla.

Llamada entrante

Logan.

— ¿Qué pasa Logan? Porque me llamas a las dos de la madrugada.

—Ana está desaparecida. Sus padres no tienen ningún rastro de ella —me incorporo de golpe sobre la cama —no se lo he dicho a nadie. Pero robaron mi auto, tengo la sospecha que fue ella.

—Estás loco ¿Porque Ana robaría tu auto?—digo molesta —Sólo para decir estupideces.

—Esto es serio Valeria, no se trata de mi auto. Es sobre Ana, lleva desaparecida un día, nadie sabe en dónde está.

—Debe estar escondida o algo así, le afecto mucho lo de Nathan y lo sabes -- digo poniéndome de pie para cambiarme de ropa.

—Eso no es lo peor

— ¿Qué quieres decir con eso? —pregunto.

—Ven al hospital, lo entenderás mejor —Logan cuelga.

***

— ¿Qué ha ocurrido? —les preguntó a los padres de Ana.

No paran de llorar, hay oficiales por todo el hospital, no entiendo nada. Por lo que me han dicho una enfermera fue la última en ver a Ana saliendo de aquí. Logan le dijo a la policía sobre su auto. Ahora sospechan que ella pudo robarlo. Nada de esto tiene sentido.

La madre de Ana me abraza y yo trato de buscar con la mirada a Logan. Los padres de Nathan parecen preocupados mientras hablan con el oficial que parece al mando.

—Han encontrado el auto —grita uno de los policías.

— ¿En dónde? —pregunta el oficial al mando.

—A las afueras de la cuidad. Al parecer hubo una tormenta y encontraron a Ana dentro del auto, esta inconsciente.

¿Porque Ana haría tal cosa?

—La están trasladando a otro hospital en este momento.

Mis padres me acompañaron, así que me hacen una seña para que me acerque a ellos y deje a los padres de Ana solos.

—Es mejor irnos —dice mi mamá. Logan se va con nosotros.

Los padres de Ana son los primeros en subir a su auto y conducir al hospital donde estan llevando a su hija, los seguimos durante todo el camino El transcurso en el auto fue de lo más incómodo, Logan me sujetó la mano y no la soltó hasta que llegamos.

—Al parecer está bien. Pero sigue inconsciente. Los médicos no pueden explicarlo—concluye una enfermera.

—Lo importante es que está bien —dice la madre de Ana

—Lo raro es que la encontraron a la orilla de la carretera, completamente mojada, suponemos que tiene que ver con la lluvia—dijo nuevamente la enfermera.

Después de eso nadie dijo nada. Sólo esperamos por alguna respuesta.


Una hora después

Era tedioso estar tanto tiempo en un hospital sin saber nada. Mathieu no se ha separado ni un momento de sus padres, creo que está molesto conmigo por llegar junto a Logan.

Pero todo paso tan rápido, el fue quien me aviso y las cosas solo sucedieron. Además estoy muy confundida. ¿Por qué me molesta tanto que Mathieu no se acerque a hablar conmigo?

— Iré por un café —dice Logan

—Está bien, aquí espero

— ¿Quieres algo? —pregunta. Sus ojos me recuerdan a viejos momentos, luce cansado y preocupado.

—Un café está bien.

El asiente y se pierde por el pasillo, mis padres se fueron a casa. Yo insistí en quedarme. El corazón se me acelera cuando veo al hermano de Ana salir y llegar al pasillo donde me encuentro. Luce bastante alterado. Me acerco.

— ¿Alguna novedad?

No esperaba mi acercamiento, porque se detiene y me observa con curiosidad, Y lo entiendo, las últimas semanas lo he evitado, porque verlo causa el mismo efecto. Vuelvo a derretirme por él. Pero no estoy segura si pueda entregar nuevamente mi corazón.

—Ana ha despertado. Mis padres están con ella.

— ¿Me dejarán verla?

—Es probable.

Parece que este no es el mejor momento para hablar, sin embargo no creo que tengamos otro.

—Mathieu...

—No digas nada —se aproxima invadiendo mi espacio personal —solo necesito esto.

Me abraza, me siento tan pequeña y protegida con su toque, su barbilla descasa en mi hombro, mis brazos también lo rodean. Esto se siente bien, se siente real.

—Todo estará bien, ella estará bien —le digo.

—Este es el peor momento para decir esto —sus brazos me aprietan con más fuerza —pero quiero que sepas que estoy enamorada de ti Valeria.

Mis latidos van a mil por hora, se aleja y me observa a la cara

—No quería hacer esto, pero las citas que hemos tenido, las llamadas, los mensajes... —toma aire — los besos... todo eso se convirtió en más para mí. Sé que tienes un pasado complicado pero quiero ser el chico que cure tus heridas, comparta tus alegrías, admire tu belleza....

Sus palabras forman un nudo en mi estómago, quiero llorar. Porque parte de mí también está enamorada de él. Solo tengo que soltar el pasado.

—Quiero estar contigo Valeria, ya me canse de tenerte un día y que después desaparezcas... así que cuando estés lista —ve a alguien detrás, me giro y veo a Logan con los ojos llenos de furia —ven a mí. Solo no me hagas esperar demasiado, duele.

Mathieu me da un beso en la frente y sigue su camino, por un momento temo que haya una pelea, pero ambos se comportan. Logan regresa con dos cafés y me lo entrega. Apenas puedo verlo a la cara.

—Valeria, mírame.

Lo hago, porque tengo que verlo y aclarar de una vez y por todas este asunto.

—Por favor —toma mi mano y la aprieta con delicadeza —elígeme.

****

Después de aclarar mis asuntos personales, una enfermera me dice que puedo pasar para ver a Ana. Entro en la habitación y la veo recostada en su cama, lleva la típica pijama de hospital. No para de llorar y trata de alejar a sus padres.

— ¡Ya les dije que me dejen sola!

Esta fuera de sí, no para de llorar. No quiere ver a sus padres y dudo que quiera verme.

— ¿Qué pasa cariño, cuál es el problema? —dice su madre mientras toma su mano.

— ¡Soy yo!, he regresado a mi cuerpo. Ese es el problema.


________________________________________________________________________________

He vuelto!!

Ya se que este capitulo puede ser confuso pero... el próximo capitulo les explicara. Muchas gracias por leer. 

Les gustaría un extra de las citas que han tenido Valeria y Mathieu? Ya pronto sabrán que decisión tomo Val

Voten y comenten ☆☆☆

Ya casi llega el final.

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