Pov Daniel.
Luego de sus palabras no dije nada seguí perdido en mis pensamientos, tratando de entender la actitud de Sebastián hacia mí, porque era el así conmigo, no entendía el motivo por el cual me seguía con tanta insistencia recalcando una y otra vez que yo era suyo.
- David- susurro emocionado Drake lo que me hizo volver a la realidad, mire a mi hermanastro apoyado en la puerta, su cabello estaba despeinado y se notaba que había perdido peso, se veía tan frágil que me sorprendía que aun podía mantenerse en pie.
- Daniel- murmuro en voz baja al sentir el fuerte abrazo que le di, mis lágrimas comenzaron a salir mientras me aferraba a su pecho, lo extrañe tanto que desee estar en ese momento con él a su lado para apoyarlo.
- Por favor, prométeme que no te volverás a ir y me dejaras- susurre sabiendo que desde un principio él no me hubiera dejado, y mucho menos con Sebastián, este suspiro y me acaricio los cabellos, en sus ojos se denotaba cansancio por lo tanto no lo retrase más, lo llevamos a una habitación y lo recostamos en la cama necesitaba descansar.
Pov David.
Me acosté en la cama, estaba cansado y sentía que en cualquier momento perdería el conocimiento, mire borroso a Daniel que sonreía feliz de verme luego entro corriendo Samuel, no pude evitar sorprenderme, que hacia aquí, quise preguntar pero me sentía tan casado que no podía ni siquiera hablar, este me abrazo y empezó a decir muchas cosas que no entendía, otra vez comencé a cerrar los ojos pero un sentimiento de inquietud se apodero de mi al ver, a esa persona tan familiar que se colocó al lado de mi hermano.
- Quieres jugar- escuche una voz infantil, mientras sentía como una mano tomaba la mía, lo mire sus ojos eran rojizos y su sonrisa era burlesca.
- ¿Quién eres?- pregunte mirándolo curioso, era el mismo niño aquel que me había advertido de la herida.
- Aun no me recuerdas- dijo separándose y elevando una ceja, sonrió y me llevo a un largo pasillo todo era muy bonito y estaba muy bien arreglado.
- Eres un príncipe- susurre ya que nunca me imaginé estar en un lugar tan amplio y elegante.
- Samuel le gusta venir aquí, antes le gustaba jugar conmigo- murmuro con un deje de tristeza, sus ojos brillaron ante las lágrimas que amenazaban con salir.
- Y ¿Por qué no quiere jugar?- pregunte con inocencia mientras veía como él se detenía, me miro y luego negó.
- Por qué cree que yo lo mate- susurro mientras me miraba con enojo- pero tú sabes la verdad, tú estuviste ahí, tú vistes cuando lo apuña- me tape los oídos mientras comenzaba a gritar.
- CALLATE- grite hasta no poder más, comencé a correr mientras lagrimas salían de mi rostro no era cierto.
- Sabes que no puedes escapar de la verdad- grito mientras me seguía, sentí mis piernas doler por el esfuerzo que estaba haciendo, no quería tenia miedo.
- Lo sabes verdad, y si lo sabes porque no quieres recordar- me alcanzo y me acorralo contra la pared.
- Detente por favor- rogué sintiéndome impotente ante sus palabras, mire mis manos estaban sucias, si estaban sucias de sangre la que el escupió.
- ¿Sabes quien fue?- me pregunto y yo negué, que clase de pesadilla era esta, porque no podía despertar.
- Responde- grito y no pude dejar de temblar, caí a sus pies viendo como Samuel se acercaba sorprendido ante el hecho de que él se encontrara a mi lado.
- Si- fue la única respuesta que di.
Abrí mis ojos sudando frio que clase de pesadilla fue esa sentí que nunca podría despertar tenía miedo, más que eso había sentido la muerte tan cerca que me daba terror volver a acostarme, con algo de nervios me senté tratando de controlar mi agitado corazón pero que diantres había pasado.
- Al fin despiertas- susurro me gire molesto, pensando que Drake no podía ser más molesto, pero a mi lado no estaba Drake tampoco Daniel ni Samuel ni mucho menos Sebastián.
- ¿Quién eres?- susurre temblando sin saber por qué, este suspiro y sonrió con tristeza aun así su mirada transmitía tantos sentimientos que no lo supe comprender.
- Aun no piensas recordar- respondió y mis parpados se abrieron con terror, una oleada de recuerdos paso por mi mente, y con la voz temblorosa de mi boca se escapó- Ren...
hasta aqui el capi... no me maten..x.x***