En esa caja estaba un regalo especial.
Ella había logrado salir a Trost en un momento de descuido, había ido a dejar una carta que iba dirijida a su padre.
Donde le contaba todo lo que le había pasado en esos 6 meses.
Le contaba lo bien que había estado en ese piso sola, que era de las mejores cadetes; y que probablemente había encontrado a su hombre ideal...
El sueño del padre de Petra era que su hija le diera un nieto, un pequeño con el cual pudiera jugar y enseñarle muchas cosas que ella debido a que era mujer no pudo aprender.
Petra sabía que ella era lo único que su padre tenía despues de haber perdido a su madre desde muy pequeña, pero tambien debia aceptar que tenía más metas en la vida.
No quería ser la tipica muchacha que se sentaba a esperar que le asignaran un marido, ella estaba ansiosa por salir fuera de las murallas y conocer a muchas personas, como cualquier chica de 17 años; anhelaba conocer a un joven que en verdad la quisiera y pudiera pasar el resto de su vida con él.
Ella sabía que lo había encontrado, ella sabía que el hombre con el cual debia estar el resto de sus días era uno solo... Levi Ackerman.
Mientras caminaba, entró a una tienda de antiguedades, en busca de algún objeto interesante ya que ella es muy dada a recolectar reliquias.
Un destello llamó su atención.
Era un pequelo relicario, algo viejo pero que tenía el simbolo de la legión de exploración.
Estaba compelto y era de plata, cosa que le sorprendió ya que ese metal era sumamente extraño en ese tiempo.
lo tomó y gastó todos sus ahorros en ese pequeño collar.
Era verdad que amaba a su legión y a pesar de rodos los problemas que han tenido ultimamente, ella era inmensamente feliz.
Limpió y guardo ese relicario como un gran tesoro; tenía pensado en poner una foto de ella y de el capitán para poder llevarlo siempre a donde fuera; así que decidio ir a buscar en el archivo fotos del ojigris.
"Veamos si aquí hay alguna foto de él".
Buscó por horas pero no logró encontrar nada.
justo cuando estaba a darse por vencida un folder cayó de un gran libro, dejando ver su interior, donde se encontraba una foto de él capitan, más o menos de dos años atrás y otra más...
Petra tomó ambas fotos y las guardo como si fueran un gran tesoro, salió rapidamente del archivo y se dirijió a su cuarto.
Tomó el relicario y ajusto el tamaño de ambas fotos para que estuvieran bien.
"Ya tengo un perfecto regalo de cumpleaños".
Y ahí estaba, El 25 de diciembre, un poco despues de media noche, Levi sacaba ese bello relicario de plata entre la caja .
-¿Donde conseguiste esto mocosa?- dijo el capitán con gran asombro.
-Salí a Trost hace algunas semanas a dejar unos papeles y lo encontré, he de decir que me costó todos mis ahorros, pero sé que valio cada uno de esos centavos- dijo ella mientras sonreia- ábrelo.
Levi levantó una ceja en señal de asombro, esa cosa se veía extremadamente cara, pero estaba tan reluciente que no se podia negar que era bellisima.
Con mucho cuidado tomo el relicario de las orillas y suspiró.
Al abrirlo, se encontró una imagen de él más o menos reciente, con esa expresión fria natural, pero la foto que estaba a lado lo dejo pasmado.
Se podía ver claramente a una señora de cabello negro largo, de tez blanca con los ojos grises obscuros, con un vestido azul que la hacia ver más palida, sonriendo para la cámara con un pequeño niño de dos años en brazos, el pequeño sonreia ampliamente.
Ahí estaba él y su madre.
Esa foto llevaba mucho tiempo extraviada y por más que él había tratado de buscarla no la había hayado.
-Dón...¿Dónde encontraste esto?- dijo él con la voz entre cortada.
-En el archivo de la legión, estoy practicamente segura de que el bebé que aparece en la foto de la derecha eres tú.
Levi levantó la mirada.
-Llevo 8 años tratando de encontrar esta foto, y tú de la noche a la mañana la consigues, eso es una mierda.
Petra se asombró.
-Pero; atesorare este regalo, lo protegeré con mi vida si es necesario, es un regalo invaluable.
Ella sonrió y tomó su mano.
-Creo que ella te diría que te haz convertido en todo un hombre Levi.