JJK
¿De qué mierda estaba hablando?.
Mí cuerpo yacía en el suelo, mirando hacia la nada; recapitulando cada momento del día en busca de una pista.
Taehyung siempre estuvo con nosotros.
Taehyung le dijo a Seokjin que lo soltara, y yo fui a su lado a pedirle que solo nos acompañará un rato a dar un tour por el castillo a los nuevos invitados.
«¿De qué hablaba?».
Taehyung era mí pareja, mí llama gemela y futuro esposo, no podía dejarle irse de la nada y no explicarme.Pero tampoco podía ir a buscarle, eso podría ponerlo mal.
¿Qué carajos debería hacer?.
— Mierda. — fue lo único que fui capaz de decir antes de pasar horas y horas mirando a la nada.
Pensando en todas las posibilidades o errores.
🥀🦇ﾉ*.✧
— ¡Jeon Jungkook!. —
Me despertaron unos gritos de una voz aguda. El suelo no era tan malo si dormías con preocupación.
— ¿Lya? ¡Ya voy!. — me levanté rápidamente para dirigirme hacía la puerta, que desde mí vista se veía distorsionada.
Me estoy sintiendo mareado.
— ¡Jungkookie!. — gritó la mujer al verme tras la puerta.
Sentí cómo sus manos y piernas subían hacia mí, me tomo por sorpresa y yo aún no terminaba de despertar del todo.
Tuve que sostenerla para no caerme. Fue la sensación más incómoda que jamás sentí.
Cuando sentí sus muslos en mis manos, pegue un susto, automáticamente la solté mandando mis manos hacía arriba.
Podría jurar que volteó a ver al lado con una sonrisa, sin embargo, miraba todo borroso.
— Lya, creo que sería mejor si paras de abrazarme tan seguido — fruncí el ceño tallando mis ojos —. Te recuerdo que tengo novio y no quiero problemas, ya tengo suficientes. Por favor, mantén distancia conmigo. — me alejé un paso, marcando distancia entre los dos.
— Oh, nada Jungkookie. Simplemente eres un gran amigo. — y salió de la entrada de la habitación tarareando.
Todo se miraba tan extraño.
🥀Hora del desayuno.
Castillo de Vlad🦇
Cuando estaba por el pasillo, frente a mí se encontraba Tae.
Pero no era el Taehyung que yo conozco; se miraba desgastado, su piel era amarillenta, sus ojos hinchados y rojos, y su cara se miraba tan cansada.
Por supuesto que sentí un dolor en el pecho y una preocupación que me consumió por completo.
— Cariño, por favor. Por favor, tenemos que hablar. — Me acerque a paso rápido a él.
No me importaba si no me aclaraba sus actos en la noche anterior, no podría mirar esa parte de la historia si lo miraba así. Mis manos fueron a sus decoloradas y frias mejillas.
No me miró. Ni me sonrió, su miraba se fue al suelo y fue como si simplemente fuera un fantasma.
Sin expresión, mirando mis zapatos.
— Tae, hablame. Solo está vez, por favor. — dije en un suspiro.
Apartó su cara de mis manos — Vamos a desayunar. No me toques. — respondió fríamente.
Y sentí cómo mí mundo se derrumbaba lentamente.
«¿Y mí beso de buenos días?. Necesito respuestas ».
Sentí que todo lo que construimos se había desmoronado como una pared fragil. Cuando nos levantabamos entre risas y pequeños besos; entre platicas y miradas. Cuando hacíamos el desayuno juntos y hablábamos de como sería el castillo cuando nos casaramos.
¿A dónde se fue todo eso?. Por qué todo se ve tan gris de repente.
Seokjin salió de la habitación, no me dijo ni una palabra; simplemente me escaneó con una fría mirada y pasó de largo.
— Una sola palabra que dirijas a Taehyung y juro que te cortaré la cabeza en ese momento — susurró —. ¿Dónde pone sus cosas?. —
— ¿Por qué quieres sus cosas? — susurré de vuelta —. ¿Podrían explicarme qué pasó?. —
— Las explicaciones las debes tú, no yo ni él — escaneó mí cuerpo con una mirada de odio —. Lo llevaremos a la ciudad mañana. Ya hiciste suficiente, ya fue suficiente. Encontrarás a alguien más a quién desposar y llevarlo a la locura si quieres, pero a Taehyung jamás lo volverás a ver. —
— ¿Por qué...? — me sentí mareado, casi a vomitar. Asustado, no podía describir la horrible emoción qué se me desbordó. Seokjin no me volvió a mirar, solo encontró al comedor sin más — ¡¿Por qué se lo van a llevar?!. — exclamé, pero aquello se lo llevó el viento.
«¿Qué hice mal? ».
Si no me lo dice, no puedo cambiarlo.
🥀🦇ﾉ*.✧
Lya llevaba todo el desayuno abrazando mi brazo, por más que golpeaba suavemente para que se apartara seguía pegada hacia mí.
Era incómodo.
Seokjin lo notó, afortunadamente.
— ¿No deberíamos respetar el espacio de los demás?, ese tema es importante. — y se formó un silencio en el comedor.
Me digne a hablar.
— Si, es importante mantener distancia. Lya... ¿Podrías soltar mí brazo, por favor?. — sonreí hacía los demás y hacia Lya.
Namjoon y Hoseok soltaron sus cubiertos abruptamente.
Jimin me dió una mirada rápida, para después mirar a Yoongi y a Taehyung.
— ¿Podrías tener algo de respeto? ¿O estás loco?. — habló Namjoon levantándose de la mesa.
— ¿Qué carajos, hermano? ¿Qué te pasa?. Primero intentas ahorcar a alguien, ¿y ahora esto?. Se acabó, te vas a arrepentir toda tú jodida vida de lo qué estás haciendo. Tantos años jodiendo con amar a Taehyung, para qué termines diciendo esas cosas — Hoseok lanzó su pañuelo a la mesa y se levantó de la misma —. Si no fuera ilegal, yo mismo te asesino en estos momentos. —
Taehyung se separó de su asiento y se fue sin decir nada.
Quise levantarme, pero algo me detuvo, más bien, alguien.
— Ni siquiera dijiste nada malo, Jungkook. Están locos. — dijo Lya, apretando mí brazo entre el suyo
Seokjin se vio igual de confundido qué yo cuando todos empezaron a retirarse de la mesa.
« ¿Pues yo qué dije? ».
— ¡Taehyung!. — gritó Seokjin siguiéndole el paso a Tae.
«Algo anda mal, me estoy sintiendo muy cansado. Algo anda muy mal».
Lya me jaló con fuerza para volverme a sentar.
Solo ella, Wono y yo.
Wono empezó a hablar de un método de gobierno que mí mareada cabeza no pudo escuchar del todo.
Habitación de los Kim
Un pesado suspiro salió de la boca del pelinegro. Habían pasado horas desde el desayuno.
Lya dejó ir a Jeon de repente con una sonrisa. Ahora podría tener un momento de paz sin la chica pegada a él.
Aprovechó para darle tiempo a Taehyung de volver a pensar las cosas.
Todo el día empezaron a decirle cosas hirientes.
Cosas como: "¿ No te dio vergüenza decir eso?", "Estás comprometido", "¿Cómo crees que se sintió Taehyung?".
¿De qué mierda hablaban?.
Nunca dijo nada malo, nunca dijo algo que dañara a Taehyung. Sentía que me volvía loco frente al espejo de su gran baño.
— Algo estoy haciendo mal, ¿Que estoy diciendo mal? ¿Qué estoy haciendo? — se preguntó a sí mismo —. Debía cortarme la boca, las orejas o lo que fuera, todo. Todo, para no volver a decir ni una sola palabra. Tal vez mí sentir estaba dañando a Taehyung. —
Definitivamente era eso, si me volvía otra persona jamás volvería a dañar a Taehyung. Si ya no era yo.
Si quitaba todo lo que amaba y lo cambiaba para él, seguramente volvería a amarme. Y yo no volvería a joder la situación.
« Tal vez, estoy haciendo algo mal. Sí, seguramente es eso, si yo intento ver dentro... O tal vez es la forma en qué me veo. ¿Y sí es porque me arreglo mucho?, seguramente piensa qué le estoy coqueteando a Lya por cómo actuó ». Pensamiento tras pensamiento me inundaba la cabeza en busca de respuestas.