Anna Collins Pov .
Nos dijimos hacia el baño, yo me quito la chaqueta y la ato a mi cintura, Finn le quita la tapa al escusado y con eso empieza a golpear la pared.
-Cuando sientas que ya estás cansado, damela -digo- para turnarnos -me cruzo de brazos.
-Lo que digas jefa -dice y yo niego con la cabeza mientras se me escapa una sonrisa de labios cerrados.
-¿Puedo hacerte una pregunta?
-Lo acabas de hacer -dice.
-Bien, te puedo hacer tres preguntas?
-Claro -dice y sigue golpeando la pared.
-¿A qué te referías cuando le dijiste a Vance ese "Pues..." y luego me miraste? -deja de golpear la pared y voltea a verme.
-Mmm nada en realidad -dice- solo quiero salir de aquí, tú no? -voltea y vuelve a golpear la pared.
-Claro que si -digo obvia- aunque... a diferencia de ti, no tengo a nadie allá afuera esperandome.
-El perro de Billy te espera -dice.
-No me recuerdes eso -me recuesto por la pared opuesta a la que Finn está tratando de romper- me pone mal lo que le pasó, Billy merecía algo mejor...
-¿Algo como qué? -pregunta- y todos merecían algo mejor.
-No lo sé -digo- no lo conocía.
-Parece que él a ti si -dice.
-Nos vimos solo una vez -digo un tanto divertida.
-¿Y que te pareció? -pregunta- era... no lo sé... lindo?
-¿Quieres saber si me gustó? -pregunto.
-Claro que no -le da unos golpes a la pared- y si quiero saber, que, es malo?
-Creo que no -digo y me encojo de hombros- no sabría decirte si era lindo -pauso- ¿Y Donna se te hace linda? -pregunto de pronto.
-¿Qué tenía que ver Donna?
-No sé, solo tenía curiosidad.
-Pues si -dice- Donna se me hace bastante linda.
-Ah ya veo... -asiento con la cabeza.
Cálmate Anna, es decir, claro que diría eso... se supone que es la chica que le gusta, no? Aparte él tiene razón. Donna es una linda chica sin mencionar que es amable, tú no eres nada de eso.
-¿Por qué no la invitabas a salir? -pregunto- escuché por ahí que ella te gusta.
-Gustaba -corrije- no niego que antes ella me llamaba la atención.
¡Joder si! Espera, que?
-¿Y que cambio? -pregunto- si Donna es tan linda.
Finn me voltea a ver por un momento mientras levanta una ceja.
-Si lo es -vuelve a lo suyo con la pared- pero creo que me di cuenta de que... quizá me gustan otro tipo de chicas.
-¿Ah si, cuales? -pregunto por mera curiosidad.
-¿Es una broma? -dice y se levanta quedando parado frente a mi.
Se queda ahí sin hacer ningún movimiento, solo me mira a los ojos y no dice nada ¿Y a este que bicho le picó Ahora? Da un paso hacia mi, no rompe el contacto visual en ningún momento y parece calcular cada movimiento y es como si se cuestionara a sí mismo lo que vaya a hacer a continuación.
Cuando ya me preparo mentalmente para lo que sea... él se hecha para atrás ¿Por qué hace esto? Y se pasa la mano por el pelo.
-¿Qué sucede? -pregunto..
-Nada solo... -me tiende la tapa del escusado- si logramos salir de este lugar, prometo decirte.
-Bueno, si tú lo dices -digo y tomo la tapa- apartate, voy a usar esto para deshagarme.
Me dirijo hacia la pared y empiezo a golpearla con la fuerza que me queda, para nuestra suerte aún no me he mareado ni nada por el estilo pero no dudo de que en algún momento vaya a pasar.
-Woah -dice Finn- si que tienes muchas cosas guardadas -dice ya que estoy golpeando la pared como si me estuviera desquitando.
-Imagino que lo estoy golpeando a él -digo y golpeo la pared con fuerza- eso lo hace divertido.
-Vaya forma de divertirse -dice- y em... después que haremos?
-¿Qué haremos? Yo, la verdad no lo sé -digo- tengo que pensar una forma de llegar a la estación de policía sin que se dé cuenta... si lo hace, ya no me queda nada, te aseguro que me matará.
-Deja de decirlo... esa idea me asusta.
-¿Cuál?
-La idea de perderte -dice y yo dejo de golpear la pared- quiero decir, ya sabes... la idea de que te lastime o algo peor.
-Te preocupas por mi eh -lo miro, tiene un ligero color rojo en sus mejillas... sé que en este momento debería concentrarme en la pared pero...
Finn Blake sonrojado es la cosa más tierna que he visto.
Bueno, quizá no sea así y yo me estoy haciendo falsas ideas, pero mi corazón quiere creer que si lo está.
-También me preocupo por ti, Blake -vuelvo a golpear la pared.
Seguimos así como por media hora, cinco minutos cada uno con la maldita pared mientras hablábamos de tonterías. Finn me habló sobre béisbol y yo le hablé sobre Stephen King... me gusta escuchar a Finn hablar sobre algo que le hace feliz, se ve muy lindo... bueno, más de lo que ya es.
-Y es por eso que te recomiendo leer sus libros y también...
-Espera -dice- juro que por ti leeré toda la colección de libros de Stephen King existentes pero aguarda.
¿En serio haría eso por mi, o solo lo está diciendo para que cierre la boca de una vez?
-¿Qué sucede? -me acerco.
-Mira -con sus manos empieza a sacar algo de escombro- creo que ya lo logramos, pero no puedo sacar esto.
-Tengo una idea -del bolsillo de mi chaqueta saco aquella linterna que él me había dejado y se la enseño- podría servir.
-Excelente -la toma mientras sonríe, trata de probar con ella, pero tampoco funciona- carajo... -me voltea a ver y después dirige su vista en dirección al escusado.
Yo también lo volteo a ver, ambos nos levantamos y vamos hacia el escusado, Finn revisa esa caja que tiene ahí buscando algún objeto que nos sirva. Encuentro una cosa no muy pequeña con forma casi circular y se la enseño.
-Podría servir -dice y ambos vamos de regreso al congelador.
-Si -digo al ver que esta vez si funcionó, Finn me pasa la rejilla y yo la lanzo hacia algún lado.
Vuelvo donde él y me arrodillo a su lado, pongo mi mano en su hombro y el voltea a verme... para darle un poco más de animo le regalo una sonrisa de labios cerrados.
-Deberías sonreír más seguido -dice- eres más bonita cuando lo haces.
-Oh dios -bajo la mirada por un momento al darme cuenta de que la sangre se me está subiendo a las mejillas- estoy llena de tierra, despeinada y toda golpeada.
-De cualquier forma para mi igual te ves genial -dice- Donna es linda... pero ella no es tú.
Solo me quedo viéndolo sorprendida y más sonrojada que un tomate ¿Él en serio cree que yo soy bonita? Quiero decir, no soy como las demás chicas que conoce, aveces no niego que me gustaría ser como ellas... además de que todos siempre dicen que sería bonita si cambiara el color de mi cabello... ¡Ahah ese no es el punto, joder!
Finn Blake... mi Blake cree que soy bonita.
Dios Anna, deja de ser una niña.
-B-bien... sigamos con esto -digo y trato de evitar su linda mirada... quiero decir, su mirada sobre mi y empezamos a quitar la carne que aquí se encuentra.
-Me voy a meter para tratar de abrirla -dice- sostén la linterna -dice dándome la linterna.
-Suerte.
-Claro, tengo a mi amuleto de la buena suerte.
-La linterna.
-No, tú -se adentra al congelador y empieza a empujar.
Okay, tiene que dejar de decirme esas cosas y de tratarme así o ya voy a empezar a imaginar que estoy en una de esas películas románticas que me gustan tanto.