Fragmentos de una vida feliz
a tu lado no hay tristeza
en tu mirada veo el amor
y un futuro seguro, sé que estoy bien.
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El árcade estaba repleto, los jóvenes golpeaban las máquinas por la frustración de no poder superar los nuevos récords que se ponían semana a semana.
El juego de Mario Cart esa semana estaba abarrotado, un jugador nuevo había superado el récord de Kim Namjoon, moreno, chico de campo, ya no tan nuevo en la ciudad y trabajador del árcade.
Los viernes por la tarde del inicio del ciclo escolar, el árcade se encontraba vacío para beneficio del moreno, pues planeaba superar aquel récord que el joven misterioso había hecho, agarro los controles y comenzó a conducir a Mario carrera tras carrera.
El timbre de la campana de la recepción sonaba con insistencia, pero aquel moreno no quería moverse del lugar, estaba a nada de terminar la partida.
-"Nam, atiende" -dijo Jackson, su compañero de trabajo.
-"Ya voy" -dijo sin mirar para poder concluir con la partida; sin embargo, aquella partida le duro más de lo que tenía previsto y cuando no pudo superar aquel récord se dirigió a la recepción dónde solo había un niño de al rededor de 8 años pidiendo fichas para los juegos.
-"Acá tienes" -dijo Nam dándole las fichas azules.
-"¡PENDEJAMAQUINADELDEMONIO!"-
El moreno salto en su lugar buscando al gritón, fue hacia la zona dónde había máquinas de Espace, y luego a las de baile; sin embargo, no se encontraba nadie en aquellas zonas, otro grito, uno más femenino, lo hizo toser.
Caminó por el lugar buscando aquella persona que parecía que estaba a punto de tener un colapso, llegó al espacio donde se encontraba la garra mecánica.
Camino hasta los peluches y lo vio, tez blanca, labios gruesos y rositas en forma de besito, dedos largos y uñas cortas, hombros anchos y una altura perfecta como para no doblarse el cuello.
Sonrío para sus adentros, fue a la recepción y busco la llave de las máquinas, la tomo y cuando aquel joven estaba a punto de tirarle un puñetazo al vidrio, agarro con delicadeza su mano y con la otra abría el vidrio.
La miro a los ojos con una sonrisa de oyuelos profundos, retiro varios peluches y saco un Osito de color rosa, se recargó sobre la máquina y se lo entregó en la mano que sostenía.
💐💐💐
La llegada de la familia Kim era emocionante, la familia se encontraba en el carro luego de las compras y maratones que hicieron Namjoon y Ji para depositar las compras de la semana en la camioneta de la familia.
El helado de chocomenta se expandía por el rostro de Taehyung, que disfrutaba animosamente del dulce, mientras que Jimin aún sentía pena en comer, dando pequeñas lamidas a su helado de mango y agarrando con cuidado el cono de galleta que tenía.
Yoon era el más feliz, su sonrisa de gomita se extendía de lado a lado abultando sus mejillas sobre sus ojos rasgados, terminando su helado de menta.
Ji y Hoseok estaban platicando del trabajo de la mayor en el servicio secreto.
-"¿Eres un espía?" -preguntó Hoseok viendo a la mayor.
-"Pero nadie debe saberlo Hobi Hobi" -contesto con cariño su tía, acariciando si mejilla.
-"¿Ni papá Nam?" -preguntó Hobi con inocencia.
-"Ni papá Nam" -contesto irguiendo su dedo meñique -"Será nuestro secreto"
¿Acaso toda la familia de Nam era así de cariñosa?
Jungkookie estaba dormido en el asiento de seguridad junto con Yoongi, pues adoraba tomar de la mano de su hermano, adoraba el calor de sus dedos y la tranquilidad que el pálido le brindaba.
-"Regresando, haremos parrilla" -propuso Namjoon.
-"Mejor la próxima semana, a que invitar a la familia a conocer a los niños" -respondió Seokjin apretando la mano de su esposo que manejaba.
Se sentía tranquilo, pensaba que todos los planetas, el universo, el cosmos, la vida, el destino, se estaban alineando a favor de él y de su esposo, a favor de los pequeños y de la nueva etapa de la vida le estaba ofreciendo.
El silencio era extraño, pero se sentía bien, Jin dejo su bolso en sus piernas y llevo su mano a la radio, con delicadeza comenzó a buscar una emisora con música para los niños, frustrado de no poder encontrar algo decente, paro en un noticiero que helo su corazón.
-"El ministerio está tomado, por fin, las medidas necesarias para erradicar de esta sociedad a las parejas del mismo sexo con esta nueva ley" -
Inmediatamente, Namjoon cogió la radio y la apago con brusquedad al punto de romper la pantalla de vidrio.
"Con esta nueva ley" rebotaba en la mente de ambos hombres.
Namjoon aceleró el carro haciendo que las espaldas de todos se pegaran al asiento, Jimin se asustó y Hobi de la impresión iba a saltar a llorar mientras que tae gritaba alegremente.
-"¡COMO UN COCHE DE CALELAS!" - gritaba emocionado, elevando los brazos lo más que pueda.
Jimin se le unió un poco calmado y ambos pegados a los asientos alzaban los brazos y reían fuertemente -"¡Somos los campeones de la carrera!" -cantaban.
"Con esta nueva ley"
-"Yoongi vamo a ganalesh a todos los calos" -dijo tae y empezó a hacer sonidos con la boca y Jimin imagino que tenía un volante a su frente y lo giraba en cada curva que daban.
La adrenalina se podía sentir en los pequeños, menos en Hoseok que seguía asustado por la velocidad.
"Con esta nueva ley"
Namjoon y Jin se miraban constantemente y con la rapidez de sus dedos, el blanquecino tecleo, buscando la nueva ley del gobierno.
Leyó cada nota periodística que aparecía, cada artículo, cada ley que apoyaba la nueva que habían dictado.
Las manos de Namjoon comenzaban a sudar cada vez que estaban más cerca de su casa, quizá pasar una temporada dentro de casa no es mala idea y el pensamiento de hacer un viaje familiar no sonaba tan descabellado como pensaba.
El portero abrió las rejas con normalidad, saludando con respeto y el mismo ánimo, pero esta vez se quedó pálido cuando vio más niños detrás de la camioneta.
Sonrío y estiro la mano.
-"Hola señol" -grito Tae animado.
"Con esta nueva ley"
Las palabras parecían cuchillas, traspasaba sus tejidos y el dolor comenzaba a crecer, trataron de sonreír y no mostrar su preocupación cuando Yoongi preguntó sin no iban a ir a comer.
-"Preparamos algo en la casa, bebé" -contesto Jin con una sonrisa y acariciando sus cabellos dulcemente, sintiéndose con un hueco en el estómago.
Ingresaron con el auto dentro del garaje, bajaron a los niños y cada uno salió gritando y felices.
-"¿Señol Namu puedo ponelme mi shol?" -preguntó haciendo un puchero para convencerlo, tomo el pantalón del moreno y lo sacudió lentamente para llamar su atención.
-"Claro que si Tae Tae" -respondió con igual alegría para no alarmarlo, tomo al pequeño de las costillas para cargarlo y abrir el maletero y sacar todas las cosas con Jin y Ji ayudando.
Yoongi abrió la puerta hacia la sala y corrió hacia un puff de Kumamon para dormir y quedo tieso sobre este, le gustaba el calor de la sala, las mantas, el sofá y la pequeña mesa se sentía muy cómodo.
Jin llevo a Jungkook junto a Yoongi para que quede dormido igual de rápido, él era el centro de paz y calma, tocarlo era viajar al país de los sueños en cuestión de minutos.
Namjoon subía con Tae y Jimin al segundo piso para poder ordenar y cambiarse de ropa a las nuevas prendas que habían comprado para ellos dos, Tae daba saltitos en el pasillo mientras Jimin cargaba un bolso con el logo de la tienda apretándolo a su pecho, no quería hacer enojar a los señores Kim así que pondría de su parte para no ser una carga.
Namjoon trato de quitarle la bolsa al ingresar, pero cada vez, Jimin se apartaba aferrado a aquella bolsa de color azul marino y repetía "Yo" moviendo la cabeza de lado a lado.
En la sala yoongi y jungkook ya estaban en el séptimo sueño, mientras de Hoseok empezaba a buscar a su papá Nam.
Al final todos terminaron subiendo al segundo piso junto con Ji que cargaba a los dos dormilones.
Jin ingreso a su cuarto y abrió aquel ropero donde guardaba prendas que casi nunca utilizaba, las apartó y abrió el cajón donde se veía una seria cantidad de fusibles y botones accionando varios de ellos.
Inmediatamente, las cerraduras del garaje se cerraron y reforzaron, los vidrios del vivero se forraron de negro dejando la parte superior intacta para el ingreso de la luz solar, la puerta de la entrada se cerró y aseguró y los vidrios de toda la casa se forró para que no se pueda ver desde afuera que es lo que se hace adentro.
Kim Seokjin era alguien de temer.
Cerro el ropero y agarro las llaves, activo las cámaras exteriores y así pudo sentir tranquilidad en su ser.
-"Osito" -susurro Namjoon ingresando al cuarto, tomo de la cintura a su esposo y puso su mentón en la curva de su cuello.
-"¿Qué vamos a hacer Namjoon?" -preguntó al borde de las lágrimas.
-"Haremos todo lo que esté en nuestro poder y hasta donde nuestros cuerpos caigan" -dijo, dando masajes en su abdomen.
La tristeza se podía sentir en el lugar, las lágrimas no tardaron en colapsar en los ojos de Jin, evadido por la desesperación y la confusión.
-"Ya asegure la casa, así que tenemos que adecuar la otra ala de la casa para que Ji pueda descansar ahí, la vieron con nosotros, así que tampoco está segura" -dijo Jin hipando.
-"El vivero, me preocupa, no es el lugar más seguro, pero Yoongi ama ese lugar" -
-"Si lo vi escabullirse varias veces" -
-"El garaje a que poner una segunda puerta y obstruir los ingresos a la sala y el vivero desde ahí"-
-"También podemos poner una pintura invisible para ocultarnos" -dijo Nam, tratando de hacerlo reír.
Pero ni una pizca de humor se vio en los ojos hinchados de Jin.
El timbre del celular del moreno comenzó a sonar con insistencia y ni uno de los dos quería separarse y como si fuera costumbre, caminaron como pingüino hasta el taburete.
Namjoon agarro el celular y lo puso en medio de Jin y el para que ambos puedan escuchar.
-"¿Señor Kim?"-
💐💐💐
-"Tae tae, ya duerme" -dijo Yoongi con los ojos cerrados.
-"Pelo quielo hablal con los lectoles" -dijo tae mirando la cámara que tenía en mano.
Cambió su posición y enfoco a su hermano palido riendo por la extraña posición, pero temió cuando su hermano abrio un ojo y lo miro fijamente.
-"Ayos gatitos" -dijo riendo para apagar la cámara y abrazar con ferbor a Hoseok para poder así, por fin, dormir.
💐💐💐
¿Quién será la llamada misteriosa?