Lan Wuxian se quejo y golpeó sus pies en el suelo con molestia, Lan Yao estaba pensando seriamente en usar su espada para volar lejos de este y encontrar algo de paz. Aunque tampoco podía juzgarlo por encontrarse así de molesto, él mismo lo estaba ahora, he ahí por qué había dejado caer su falsa cortesía y sonrisa para mostrar aburrimiento y sus labios presionando en línea recta.
Aunque también el prinicipal culpable era Lan Wuxian y su mente alborotadora.
Ambos habían salido de caza, sin discípulos o sirvientes que los acompañaran, era su momento de convivencia como cuñados; algo especial y que tenían como costumbre al año después de que Lan Wuxian se casara con Lan Wangji...¿10 o 9 años?
Cómo sea, todo iba relativamente bien, habían logrado cazar a varios y probablemente con la inteligencia y elegancia de ambos combinados habrían regresado a Gusu con la ropa tan pulcra y brillante y una sonrisa triunfante.
¿En cambio? Lan Wuxian había querido jugar un poco y probar nuevas técnicas con la espada, fue arrastrado a eso ante la mirada de cachorro abandonado que le había puesto su cuñado. No lo admitiría nunca pero apreciaba a la familia que tenía en Gusu, Lan Wuxian era como un hermano pequeño ante sus ojos.
Y ese pensamiento le había costado haber terminado bañado en sangre, tierra, hojas y ramas, no se encontraba peor que Lan Wuxian quien había sido el principal líder para guiar su caza y experimentos. Tambien responsable de llevarlos a un lugar lleno de energía resentida que al parecer habían sido el lecho de varias mujeres solteras.
—Aiya, quisiera poder tomar un baño relajante entre los brazos de Lan Zhan— comento soñador
—Espero que le pegues el olor a muerto, seguro que a Lan Qiren le encanta.
—¿Acaso tú no deseas tomar un baño con tu esposo?— lo apunto con acusación
—No...al menos no oliendo así.
Sentenció y siguieron caminando ahora en silencio, ciertamente deseaba llegar donde su esposo y hundirse en un abrazo, pero de ningún modo parecía romántico hacerlo mientras olía de esa forma.
💛💙
Pronto llegaron a Cloud Recess y ambos hombres se apresuraron a sus habitaciones para darse un baño.
Lan Yao se quitó su prenda superior y luego la interior, dejándolo acomodado en una esquina para cuando alguien viniera a llevárselo, preferiblemente a quemar.
Primero comenzó a frotar la barra de jabón sobre cada rincón de su cuerpo, asegurandose de que ningún rastro quedará, en cuanto sintió que había sido suficiente prosiguió con su cabello.
Escucho la puerta ser abierta y sonrió.
—A-huan, ¿Puedes ayudarme con mi cabello?
Escucho sus pasos acercarse hasta donde él estaba sentado de espaldas, con los ojos cerrados para que no entrara la espuma dentro.
—Oi que saliste con Wuxian ¿que tal fue su cacería?
Sintió sus manos posarse sobre la base de su cabeza y sus dedos deslizarse dentro de su cabello con suavidad, ronroneo ante el toque tan relajante y cómodo e inclinó la cabeza hacia atrás; permitiéndole a su esposo hacerse cargo de él.
—Uhm, insistió en practicar nuevas técnicas de espada y nos guió hasta una cueva llena de energía resentida.
Los dedos contrarios se deslizaron con habilidad dentro de su cabello, masajeando con cuidado su cuero cabelludo y peinando las hebras que caían sobre sus hombros.
—Wangji me comentó algo sobre unos libros que Wen Ning había traído hace unos días.
—¿Wen Ning? Hubiera querido conversar un poco con él.
—Parecen estar ocupados en el clan Wen, pero él había insistido en compartir dichos libros con Wuxian. Se fue tan rápido como vino.
Hizo un sonido de afirmación e inclinó más su cabeza hacia atrás, quería recostarse en el pecho de Lan Huan, pero estaba mojado así que eso no sería prudente. Hizo un mohin ante el pensamiento.
De inmediato sintió un suave beso ser presionado en su sien.
—¿Deberíamos ir mañana a los manantiales fríos con mi hermano y el maestro Wei?
La idea se formó en su cabeza y amplio la sonrisa en sus labios, acentuando más sus hoyuelos.
—¡Me encantaría!
No lo pensó mucho antes de presionar sus manos aún mojadas sobre el cuello de su esposo y atraerlo en un abrazo. Escucho la risa ahogada de su esposo y no pudo evitar contagiarse de esta también.