8 - Slow Dancing

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—¿Estás seguro de esto?— volvió a preguntar Lan Yao

Era alguien extremadamente perfeccionista, procurando siempre que sus planes salieran como lo deseaba, y aún a las malas aprendió que su mente no estaba en la misma sintonía que los demás y por ello siempre había algo que saldría mal.

Así que no evitó sentirse ansioso ahora, planeando todo con su cuñado. ¡Lan Wuxian!

—Vamos, haz preguntando ya varias veces lo mismo y te he respondido en todas que si. ¿Que podría salir mal?

—No digas eso, siempre que alguien dice esa palabra significa que todo va a ir mal.

Hiperventilo temiendo por qué todo cayera encima suyo en cualquier momento.

—Prometo que estoy siendo cuidadoso, tampoco quiero que el viejo barba de chivo me imponga otro castigo a solo horas de salir de uno— suspiro con resignación y melancolía

Asintió levemente, disfrutaba de sacar de sus casillas aveces al su tío y en esas pocas ocasiones se confabulaba con su cuñado, porque, entonces todo el castigo y culpa recaería en Lan Wuxian.

El maestro Lan tenía cierto favoritismo entre sus cuñados, y él había sabido mantenerlo de su lado mostrándose dócil y obediente.

—Listo, ya le pedí a A-yuan que le avisará a mi cuñado y Lan Zhan.

Puso sus brazos en su cintura y sonrió con suficiencia, admirando su trabajo recién acabado.

Ambos hombres se permitieron observar cada detalle de lo hecho, habían estado horas en ello después de todo.

El plan había sido pensado desde la vez que revisaban sus cosas del pasado, y solo hasta ahora habían podido ejecutarlo. Lan Wuxian investigo con su invento para ver el futuro sobre cosas que hacían ahí para hacer celebraciones en pareja, descubriendo que realizan reuniones o encuentros entre grupos de personas.

Reuniendose en lugares amplios y oscuros o con mucha iluminación de distintos colores, con botellas llenas de licor, música extraña comparada con la que solían escuchar y haciendo muchos tipos de baile.

Entonces habían estado trabajando en buscar el cuarto más amplio en Gusu y decorarlo con un par de faroles y cubriendo entradas de luz, era más romántico si no había luces que reflejeran sus rostros, el licor fue intercambiado por otras bebidas -aunque Lan Wuxian igual termino metiendo varias vinos- la música sería reproducida por el invento de Wei Wuxian.

Al parecer podía trasladarse a varios lugares y tiempos, justo ahora podía ver como una versión de Lan Wangji y Lan Huan se encontraban en una de esas reuniones llena de gente y música alta que impedía oír las voces. Desvió su mirada con incomodidad, no quería saber a quienes esperaban ambos jades, ni saber si había una versión suya ahí.

Las puertas fueron abiertas, mostrando a un curioso Lan Huan examinando todo el lugar y Lan Wangji solo sostuvo su mirada sobre el invento que había hecho su esposo.

—¡No estoy viendo!

Dejo a un lado el objeto que parecía una bola de cristal y se acercó a su esposo para contarle sobre lo que había hecho, Lan Yao por su parte se acercó a Lan Huan y tomo sus manos para entrelazarlas.

—¿Baile?— pregunto Lan Wangji

—Si, mira— señaló a la bola de cristal que ahora mismo mostraba a una pareja bailar

Observaron un buen rato la bola de cristal para memorizar el baile, tuvieron que parar en cuanto se dieron cuenta que la perspectiva cambiaba a un joven de ropa negra de espaldas riendo. No necesitaron hablar para entender de quién se trataba.

Después de un rato hablando y practicando en grupo escucharon venir de la bola de cristal una música lenta y suave, esa era una señal para empezar.

Lan Wuxian chasqueo los dedos y todo quedó a oscuras excepto por los pequeños faroles proporcionando una tenue luz roja que dejaba ver lo suficiente un poco más allá de sus narices y a la vez darle espacio a cada pareja.

—Esposo, ¿me permites está baile?

Lan Huan pareció avergonzarse por la proposición, y con una sonrisa vacilante tomo la mano extendida  que ofrecía su esposo y entrelazo sus dedos, con la mano libre que le quedaba rodeó su cintura y el menor puso su mano en su hombro.

Se acercaron lo suficiente para sentir el calor del contrario, sus respiraciones y corazones latiendo. Lan Yao miro hacia abajo haciendo una mueca de disgusto.

—Eres demasiado alto, solo puedo ver tu cuello desde aquí.

Lan Xichen contuvo una risa y agachándose hasta la altura de su prometido juntó sus frentes y luego se alejo con una dulce sonrisa.

—Puedes recostarte en mi pecho y oír a mi corazón bailando por ti.

—Eso suena ridículo.

Sin embargo lo hizo, recostó su mejilla en el pecho de su esposo y cerró los ojos, dejándose llevar por la melodía envolviendo cada músculo de su cuerpo.

Con cada paso que daba se sentía volar, como caminar sobre nubes de la mano con la persona que más amaba, con flores cayendo a su alrededor, observando la sonrisa soñadora de su esposo, de su A-huan, sus ojos llenos de adoración y pasión por él.

Un estrepitoso sonido se hizo presente y todo quedó en silencio de pronto.

—¡Lan Wuxian!— grito enojado Lan Yao

—¡Fue culpa de ustedes!— contrataco el mencionado

Dado que todo estaba oscuro y ambas parejas apenas si recordaban que no estaban solos se había encaminado sin querer los unos a los otros chocando de esa manera y cayendo al suelo.

Los faroles se habían apagado y ahora sí que no podían ver nada, sintiendo solo estar presionando a tientas los cuerpos de los otros e intentando pararse en vano.

—Ven aquí, voy a matarte con mis propias manos— busco a tientas Lan Yao, pero había algo encima suyo que lo presionaba hacia abajo

Drabbles XiyaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora