Lan Wuxian había hecho otro de sus inventos, lo que conllevó a qué decidiera hacer una reunion familiar improvisada.
Ahora, todos se encontraban sentados en mesas separadas, esperando pacientemente a qué Lan Wuxian apareciera y les explicará de que iba todo esto.
—Voy a romperle las piernas en cuanto lo vea aparecer— escucho gruñir al líder Jiang desde su mesa
Vio a Lan Wangji moverse incómodo en su lugar, sin saber si debía responder a eso o no. Conocía bien la relación que llevaban ambos hombres, no eran cercanos ni por asomo y habían asperezas del pasado que no les permitía siquiera fingir cordialidad.
—Hare que Hada lo muerda— ahora gruño Jin Ling
Su rostro enojado podía competir o igualar al de su tío, y eso, le pareció gracioso.
—¡Lo siento!
Apareció derrepente su cuñado, con una bandeja llena de tazas con algo que no alcanzaba a ver, y no, no era por su altura.
—Padre, ¿vas a contarnos por qué nos reunio hoy aquí?
—El nuevo invento que hice, se trata de eso. Me permite ver cosas del futuro en partes, y vi un Coffee Shop, me pareció interesante y quise intentarlo.
—¿Ver el futuro?— cuestiono el líder Jiang
—Tambien se puede el pasado, pero es solo ver todo en tercera persona y partes incompletas, así que aunque quisiera cambiar algún hecho futuro no sabría cómo. Cómo sea.
Ignoro aquello y con ayuda de Lan Sizhui comenzó a dejar en cada mesa una taza humeante con lo que parecía algo espeso dentro.
—¿Intentas envenenarnos?— pregunto dudoso Jin Ling
—Aiya, se que no soy bueno en la cocina pero Wen Ning me ayudó esta vez. Preparamos lo que en el futuro se llama un cappuccino, también algunos bocadillos.
—Entonces, ¿ahora estamos en una Coffee Shop?— pregunto Lan Xichen con una sonrisa dudosa
—¿Vamos a tener que pagarte?
El líder Jiang se preparaba para sacar a Zidian y azotarlo contra Lan Wuxian.
—Fingiremos que estamos en un Coffee Shop, si.
Sonrió ampliamente a Lan Xichen, ignorando por completo la pregunta de Jiang Cheng que al ver aquello rechino los dientes y se sentó en silencio.
Lan Yao por su parte se había mantenido en silencio todo el tiempo, analizando cada palabra dicha y sintiendo curiosidad por saber de su futuro. Sabía que no había nada que lo apartaría del lado de Lan Xichen, incluso si muriera su alma aún estaría a su lado hasta reencarnar y volver a amarse. Por qué después de todo, ellos eran almas gemelas en este y en todas sus vidas. Aún así, tenía derecho a sentir curiosidad.
—A-yao, si no deseas tomarlo puedo pedir un té para ti.
La dulce voz de su esposo lo trajo a la realidad, no había nesecidad de preocuparse por cosas así. Saber las cosas de antemano lo haría aburrido, además, no había nada que juntos y con su familia no podrían seguir adelante. Lo han hecho hasta ahora.
Nego levemente con la cabeza, obteniendo una sonrisa por respuesta.
Sería descortés de su parte rechazar algo que su cuñado se había esmerado en preparar, además había tenido ayuda de Wen Ning, por lo que no habría peligro de que intentará meterle cosas picantes esta vez.
Tomo entre sus manos la taza, más grande de lo que suelen usarse y que sus manos no podían abarcar del todo, observo de reojo a los demas y solo obtuvo una sensación de molestia al notar que la mayoría podía sostenerlo bastante bien con una sola mano.
Tomo con algo de prisa el "cappuccino", sorprendiendose por el agradable sabor que inundaba sus papilas, era algo nuevo y por mucho considerando que en Cloud recess las comidas no se condimentaban.
Le pediría a su cuñado y Wen Ning luego que le enseñaran a preparar aquel cappuccino, le daría de probar a Lan Qiren y luego con su elocuencia lo convencería de que se permita agregar eso a sus comidas cada fin de semana.
Estaba tan absorto en sus pensamientos que no había sentido las miradas de todos puestas en él, no fue hasta que sintió unos dedos recorrer sus labios que reaccióno.
—Tenias un poco en tus labios.
Sus mejillas sé tiñeron de rojo y se sintió cohibido ante tantos ojos mirándolo. No sabía si sentía vergüenza por haber tenido el descuido de dejar restos en su boca o que Lan Huan haya pasado sus dedos por sus labios sin tapujos.
Estaba seguro que de estar Lan Qiren presente habría dado un grito antes de desmayarse en el suelo con sangre saliendo de sus labios.
—Lan Zhan, también quiero que hagamos eso
Wei Wuxian se apresuró a tomar con prisa de su taza y embarrarse crema en todos los labios, cerro los ojos esperando que su esposo repitiera la acción de su hermano.
Sin embargo lo que recibió fue una taza siendo lanzada a sus pies y un Jiang Cheng enojado.
—¡Me largo!
Salió tan rápido que pareció tropezar con sus propios pies, incluso había olvidado que estaba delante del líder de secta Lan y debía despedirse de manera correcta.
Los menores hicieron una reverencia algo nerviosos y también salieron del lugar, aunque ellos intentaron mostrar calma.
—Hermano, gracias por acompañarnos.
—¡Cuando gusten mi Coffee Shop está abierto!
Grito Lan Wuxian mientras era arrastrado por su esposo lejos.
Ahora sólo quedaban Lan Xichen, Lan Yao y un Wen Ning tímido de la situación.
—¿Tienes algo que hacer después?
Pregunto al más alto que negó con una sonrisa, en respuesta asintió.
—Wen Ning, si no es molestia ¿Podemos tener más de ese cappuccino y los bocadillos?
—No es ningún problema, temía que iban a echarse a perder ya que se fueron todos— lamento con exprésion triste antes de volver a sonreír —Lo traeré en un momento.
Salió dando pasos rápidos, dejando ahora sí solos a la pareja.
A-yao se recostó en el pecho de su pareja y jugando con los mechones de cabello que caian en sus costados cerro los ojos, disfrutando de la calma.