El tour por la casa Kim seguía en todo su punto máximo, Hoseok tocaba todo y de todo, amaba los colores que poseía la sala de Namjoon y Seokjin, pero le daba miedo la estancia de trabajo de su papas, que tenía tonalidades oscuras y neutras sin hablar del candelabro colgante que estaba en el techo que parecía un cocodrilo que lo iba a comer.
Detestaba la mesa negra con vidrio templado y las sillas negras del mismo modelo, desabrido y demasiadas grades para el pequeño tamaño que poseían ambos niños.
Hobi, asustado tomo los pantalones de su papa Namjoon y apretó con sus puñitos la tela de drill beige que tenía, Yoongi por su parte estaba asombrado por la diferencia entre el ambiente de la sala y la casa por completo con la estancia de trabajo donde se encontraban.
—"Señor Namjoon, ¿Para qué es este lugar?" -cuestiono Yoongi curioso, temeroso de tocar algo y sin soltarle la mano.
"Pues, mira, Seokjin y yo" no así no "Tú papa Jin" no así tampoco "Es para nuestros..." no así menos. -pensaba Namjoon, queriendo saber en como iba a explicar cada una de las cosas que poseían o cómo decirles que era una estancia de trabajo donde de vez en cuando venían personas famosas a cerrar contratos. No quería complicar a ambos niños.
—"Esto, es una estancia dónde cerramos contratos" -dijo sereno tratando de pensar en cómo explicar todo bien.
—"¿Qué es un contrato?" -hablo Hobi.
—"Es un acuerdo que se escriben en hojas para"
—"¡Cómo los hombres de negocio!" -grito Hobi emocionado.
Namjoon y Seokjin rieron bajo por la emoción de Hoseok. —"Si campeón, como ellos" -afirmo frotando su cabello largo, —"A veces se realiza entre dos personas" -siguió para calmar la duda del mayor, regalándole una sonrisa.
—"Es cómo un acuerdo, por ejemplo, tú le puedes prestar a Hobi tu peluche de Kumamon" -dijo tranquilo
—"No" - hablo desafiante, apretando su mochila donde yacía escondido dicho peluche.
—"Lo voy a cuidar bien, lo prometo hyung" -respondió Hobi juntando ambas palmas.
—"Dile para hacer un contrato" -susurro Namjoon al oído de Yoongi.
—"Pero hacemos un contrato" -respondió obediente.
—"Siiiiiii"
Namjoon alzo a cada niño a una silla de las negras dentro de la estancia de trabajo donde estaban, a pesar de que Yoongi aun no entendiera que es un contrato, estaba a punto de recibir y además de aprender como se hacía.
Namjoon saco de los cajones un papel y lápiz, escribió como título "Contrato Kumamon"
—"Pero con Kumi no se hace contratos" -dijo apretando su mochila.
—"Lo voy a cuidar muy bien" -dijo Hobi haciendo sus ojitos los más tiernos posible.
—"Kumi le gusta estar dormido y que lo abraces por mucho tiempo" -respondió temeroso.
—"Me comprometo a cuidarlo hyung" -
Yoongi miro con ojos dudosos a su padre que estaba escribiendo en la hoja blanca.
—"Acá esta, buenos señores de negocios" -hablo
Namjoon comenzó a leer el pequeño trato que estaba escribiendo a sus dos hijos.
—"Y que no lo suelte por ningún momento" -añadió.
—"Ni cuando este en el baño, a Kumi no le gusta estar solo" -completó.
—"Qué no se lo preste a nadie, los extraños le asustan" -
—"Esta bien Shoooga" -respondió Hobi feliz.
Contrato Kumamon
Yo, Hoseok me comprometo a cuidar y jugar en todo momento con Kumamon, limpiarlo y darle de comer sin que se ensucie.
Abrasarlo por todo momento y no soltarlo por nada del mundo, aunque este en el baño, Kumi va a ir conmigo a todo lados.
A no prestar a nadie devolverle sano y salvo, sin cortes ni manchas.
Siendo devuelto mañana en la mañana.
Yoongi con sus pocos conocimientos en la lectura comenzó a leer aquel contrato moviendo su cabeza de arriba hacia abajo.
—"Acepto" -dijo decidido, confiando en que su hermanito lo cuide y lo devuelva a su kumi sano y salvo.
Namjoon se paro e hizo firmar a cada uno de los niños que por su parte hicieron garabatos con su nombres debajo, le dio a Yoongi el contrato para que lo guarde y comenzó a sacar su peluche, lo abraso y le entrego feliz a su hermano que sabía que lo iban a pasar bien, doblo el contrato y lo guardo dentro de su mochila.
Los tres hombrecitos salieron de la estancia de trabajo sin antes ver por el ventanal hacia el patio de a fuera.
El flash de la captura de una foto asusto a los salientes, la risa de Jin resonó en la sala que volvía a tomarse fotos a él con el pequeño Jungkook que estaba en sus brazos quien sonreía feliz, contagiado de la emoción del mayor de la pareja.
—"Debieron ver sus caras" -canturreo.
—"¿Tienen hambre?"
Seokjin los llevo a la pequeña mesita donde había pequeños pastelitos de chocolate con menta, donde los tres tomaron feliz y continuaron con el tour por su nueva casa de los niños.
Pasaron a la cocina donde encontraron un gran mesón y una mesa de desayuno que estaba pegado junto a la cocina al frente de ella, había una gran repisa larga de color rojo, equipado con grandes electrodomésticos y puertas donde había todo lo necesario para cocinar, una gran refri llena y al lado derecho un ventanal que daba vista a un patio grande.
—"Te amo" -susurro Seokjin cerca de sus esposo.
—"Te amo" -respondió sonriendo de igual forma.
Todos comiendo sus pastelitos salieron de la cocina y Seokjin con Namjoon limpiaron las bocas de los niños con una servilleta para ir hacia las escaleras.
Encontraron un pasadizo con las paredes color blanco y bacías.
—"¿Quieren ver sus habitaciones?" -Pregunto Seokjin emocionado por el gran paso que estaban dando, alzo su cámara y comenzó a grabar.
—"Siiii" -gritaron ambos niños felices.
Caminaron hasta llegar al final del pasillo y a la mano derecha se encontraba una puerta de madera con un placa de oro en medio de esta que decía "Hobi" en el medio rodeado de pequeñas estrellas talladas en la placa.
Namjoon abrió la puerta lentamente haciendo entrar a los dos pequeños a la habitación, dejando a ambos niños con los ojos abiertos, las paredes eran verdes y había una pequeña mesa en el centro con muchos stickers.
Ambos niños corrieron hacia la mesa Hoseok tocaba todo y se había puesto a despegar varios de ellos siguiendo las indicaciones de su padre que le decía para pegarlos en los muebles que tenían un color blanco.
Yoongi seguía temeroso, y se quedó quieto viendo toda la habitación con sus manos juntas en su pecho, quizá intentando procesar la información, o tratar de no ponerse a llorar.
Seokjin estaba tomando fotos de los que hacía su esposo y sus dos niños, grabando así el transe que sufría su pequeño pedazo de azúcar.
Sin dudar fue a abrazarlo cuidando de que no aplastaran al pequeño Jungkook.
—"¿Te gusta?" -preguntó.
—"Mucho señor Jin" -respondio con lo ojos perdidos por toda la habitación.
—"Ahora falta que conozcas tu habitación" -dijo acariciando su mejilla y frotando su nariz con la del pequeño, en un gesto sutil y cariñoso —"Te quiero" -.
Hoseok dejo su mochila en la cama feliz de tener un cuarto propio y poder tener muchos juguetes con los cuales jugar con su hermano, feliz de tener una familia que lo aman y que le dan todo lo que necesitan.
Los cinco salieron de la habitación de hoseok y caminaron hacia la puerta de el frente era su habitación y la del lado izquierdo pertenecia al mayor.
Igual que el de Hoseok, la puerta de Yoongi tenía un placa, pero esta vez con el apelativo de "Suga" que tanto le gustaba, y pequeños corazones tallado junto s su nombre en aquella placa.
Yoongi tomo la perilla de la puerta y lentamente la abrió, el color blanco denotaba en las paredes y el orden se podía ver, una cama grande para él y encima de esta un pequeño librero.
Y el llanto estalló.
Las emociones acumuladas y la rapidez en que le estaban sucediendo las cosas, no las podía procesar.
Hace unas semanas era tratado como un objeto sin valor y que era fácil de devolver cuando las personas se aburrían de él o cuando ya no soportaban sus preguntas.
Hace unas semanas pensaba en que nadie lo iba a amar y que no era alguien digno de un amor tan grande como los señores bonitos que había conocido, no se sentía a la "altura de poder resivir ese amor.
No se sentía capaz ni merecedor de la aceptación de una familia.
Y ahora, se encontraba frente a su abitación, con su color favorito y un librero lleno, un guarda ropas y muchos peluches de Kumamon por toda la habitación.
Sentía el amor que habían puesto en cada una de las cosas que había en su cuarto, hasta el foco le pareció tierno.
Las lágrimas comenzaron a salir y se quedó quieto bajando la cabeza poco a poco sintiéndose tan regocijado que no sabía como canalizar ese sentimiento tan puro.
Imaginaba los nuevos juegos que haría y la cantidad de conocimiento que adquiriría con los libros, pensaba en los desayunos o comidas con ambos señores que lo habían adoptado y que por fin iba a ser feliz.
Namjoon y Seokjin se quedaron paralizados, atontados, estupefactos ante la reacción de su pequeño ¿No le gustó? ¿Y si no le agrado? ¿No debimos adelantarnos con los Kumamon? O ¿Es el color de la pared? ¿Seguro la lámpara de Ryan en la mesita de noche no estaba bien?
Las preguntas iban y venían buscando algún defecto en la habitación, sin saber la explosión de emociones.
—"Gracias" -susurro Yoongi.
—"Muchas gracias" -continuo hablando feliz, se dio la vuelta y abrazo las largas piernas de Nam y Jin.
Los corazones de los cinco estaban calurosos, llenos de amor y sintiéndose como una familia.
Juntos reflejaban un refugio de amor.
...
Aquí su escritora llorona, es mi nuevo capítulo favorito, espero les guste y comenten y voten, los amo mucho michis ♡♡
Yoongi a pesar de haber entendido muchas cosas hoy, aun tiene miedo así que no me lo jusguen.
Adiós!! Los amo!!