¡¿Soy Hermione Granger?!

yuiCervantes7 tarafından

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Jade Baker es una chica fan de Harry Potter, ella muere en un accidente y reencarna en uno de los personajes... Daha Fazla

Capítulo 1: Recuerdos
Capítulo 2: Trabajo
Capítulo 3: Hogwarts
Capítulo 4: Clases
Capítulo 5: Troll
Capítulo 6: Quidditch y Navidad
Capítulo 7: Adiós Norberto y Hola Castigo
Capítulo 8: ¡Memoria no me falles!
Capítulo 9: Acechada
Capítulo 10: la historia debe continuar
Capítulo 11: La prodigio
Capítulo 12: Sangre sucia
Capítulo 13: Ayudando a un camarada
Capítulo 14: Una duelista con talento
Capítulo 15: Sinceridad
Capítulo 16: El diario de Tom
Capítulo 17: Una batalla contra el destino
Capítulo 18: Esperanza
Capítulo 19:Venganza/Revancha
Capítulo 20: Otro final feliz
Capítulo 21: Maldición
Capítulo 22: Crookshanks
Capítulo 23: Dementores
Capítulo 24: La loca y Buckbeak
Capítulo 25: Culpa
Capítulo 27: ¿Descubierta?
Capítulo 28: Siguiendo el curso
Capítulo 29: Quidditch, Dementores y problemas
Capítulo 30: El mapa del merodeador
Capítulo 31: Nuevo problema
Capítulo 32: Regalos
Capítulo 33: Feliz navidad
Capítulo 34: Feliz cumpleaños
Capítulo 35: Patronus y ¿Qué somos?
Capítulo 36: Perro sarnoso
Capítulo 37: Escarmiento
Capítulo 38: La final de quidditch
Capítulo 39: Sentencia
Capítulo 40: Comienza al juego
Capítulo 41: Traidor
Capítulo 42: Giratiempo y Dementores
Capítulo 43: Diluvio de corazones
Capítulo 44: paso a paso
Capítulo 45: Madriguera
Capítulo 46: Reencuentro
Capitulo 47: Rumbo al Mundial
Capítulo 48: Mundial de Quidditch
Capítulo 49: ¡No eres mi madre!
Capítulo 50: ¿Explicaciones?
Capitulo 51: Slytherins
Capítulo 52: ¿Amigos?
Capítulo 53: Hurón albino
Capítulo 54: Maldiciones e imperdonables
Capítulo 55: Colegios
Capítulo 56: Cáliz de fuego
Capítulo 57: ¿Quién fue?
Capítulo 58: Búlgaro sensual
Capítulo 59: Apuestas
Capítulo 60: Confusión
Capítulo 61: ¡No es una cita!
Capítulo 62: Te creo
Capítulo 63: ¿quieres ir conmigo?
Capitulo 64: Baile de navidad
Capítulo 65: ¿Qué paso ayer?
Capitulo 66: Segunda Prueba
Capítulo 67: ¿Tregua?
Capítulo 68: Irremplazables
Capítulo 69: ¿Qué perdí?
Capítulo 70: Te perdí
Capítulo 71: Persuasión
Capítulo 72: Cerrando ciclos
Capítulo 73: Caminemos juntos
Capítulo 74: ¿Pitufisuerte?
Capitulo 75: Todo es confuso
Capítulo 76: Percy
Capítulo 77: Ministerio
Capítulo 78: Juicio
Capitulo 79: Tristan
Capítulo 80: Nostalgia
Capítulo 81: La Orden
Capítulo 82: Regreso
Capítulo 83: Unidos
Capítulo 84: Intenta callarme
Capítulo 85: Venganza
Capítulo 86: Castigo con el Sapo
Capítulo 87: La suma Inquisición
Capítulo 88: Reunión
Capítulo 89: Drecreto Número 24
Capítulo 90: Ejercito de Dumbledore
Capítulo 91: Hermanos
Capítulo 92: Partido
Capítulo 93: El regreso de Hagrid
Capítulo 94: Thestrals
Capítulo 95: Relicario
Capítulo 96: a salvo
Capítulo 97: Nuevas oportunidades
Capitulo 98: Fin de vacaciones

Capítulo 26: Boggart

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yuiCervantes7 tarafından

POV Jade/Hermione
Me miraba con obvias intenciones de no dejarme ir hasta que contestara todas sus dudas, lo pensé mejor, el estaba atascado conmigo, yo no podía deshacerme de él, y tampoco es que quisiera, era divertido, además de que discutiendo con él perdía el estrés… el sería capaz de salir por respuestas, después de todo, es él.

— Así que ¿es tu culpa? Estaba seguro de que habías dicho que había sido un accidente… — dijo y su mirada se oscureció.

— Bien, es que fue un accidente, pero no tan accidentado — después de todo, sabía lo que iba a pasar y mis impulsos hicieron que me entrometiera. Aunque gracias a eso logré acercarme de forma distinta a Draco.

— ¿Qué te hicieron? — dijo y yo me sorprendí.

— ¿No vas a preguntar qué hice yo? Eso es sorprendente — y por lo menos era así para mí.

— Eres lo suficientemente inteligente como para no provocar a un hipogrifo en medio de una clase, tienes moral y cabeza, había muchos alumnos que saldrían heridos por ese descuido, es evidente que no fuiste tu — dijo y una vez lo dijo en voz alta todo cobró sentido — así que es eso… alguien cometió ese error y tu te metiste para protegerlo ¿no es así? — dijo y su forma de deducción tan familiar a la mía me hizo sentir escalofrío, ahora entendía a Ronald.

— Bueno, tal vez algo así sucedió… — dije rendida lanzándome a la cama más próxima — entonces me quejaré con libertad acerca de mis instintos rebeldes que me impulsan a saltar en los momentos menos adecuados.

— Mas bien peligrosos — dijo mientras se sentaba a mi lado.

— Si, tal vez… — dije y entonces sentí como se acostaba a un costado — ¿Riddle?

— ¿Jade? — dijo cómodamente mientras sacaba uno de mis libro, estaba segura de que los había terminado.

— Mi nombre no es Jade — dije fingiendo molestia, era cierto, nunca me había presentado formalmente, solo nos habíamos hablado de tu, pero me gustaba que dijera alguien me dijera por ese nombre.

— Lo sé — dijo con simpleza — sino tus padres ya sabrían que escribiste estos libros, tu nombre es Hermione Jean Granger — dijo como si fuera lo más normal — solo quería llamarte así.

— ¿cómo-? — después recordé que vio mi carta de Hogwarts, seguramente ahí se había enterado de mi nombre. — olvídalo… — dije cansada y caí en un sueño profundo.

(…)

Me desperté muy cómoda, una mano de forma gentil me acariciaba el cabello, era una sensación tan agradable que no quería abrir lo ojos, abracé mi almohada mejor y entonces oí una leve risa seguida de un pequeño beso en mi nuca.

Alcé mi vista al instante y parecía sorprendido de lo que había hecho, un leve rojo invadió sus mejillas, mientras desviaba la mirada como si haciendo eso no me percatara de lo que había hecho, vi la hora y se me hacía tarde para ir a clases, por lo que yendo contra mi flojera y rescatando toda mi voluntad, me levanté, pero me impulse para darle un beso en la mejilla y salir huyendo de ahí lo más rápido posible.

(…)

Salí como alma que lleva el diablo a la clase que me correspondía, tenía clases con Snape, y lo que menos quería eran problemas, por lo que terminé saltándome el desayuno, tomando unas galletas comiéndolas mientras corría y me ahogaba de camino en los pasillos casi vacíos, camino a las mazmorras.

Llegué a tiempo, Snape solo me vio con el ceño fruncido, como si estuviese analizándome, lo cual me molestó, pasamos y fue hora de hacer la poción para encoger, Harry y Ron parecían preocupados por mí, pero solo me concentré en realizarla correctamente.

Todavía sentía un leve ardor en la espalda, cuando escuché como Snape alzaba la voz molesto en contra de Neville, humillándolo porque la poción era naranja, en vez de verde amarillo brillante, para después decirle que la pócima la tomaría Trevor. Cuando lo vi prudente, pasaba por el caldero de Neville lanzando ingredientes para componer la pócima, Neville me veía nervioso, pero al ver que su brebaje poco a poco tomaba el color correspondiente se tranquilizó, solo le dije que lo moviera como correspondía y todo estaría bien.

Salió todo bien, pero Snape me miró mal y bajo cinco puntos a Gryffindor por haber sido ayudado, no me expuso porque no tenía pruebas, pero por lo menos Trevor seguía con nosotros, Neville me agradeció, pero yo lo que hice aparte de abrazarlo, fue darle un amuleto para que se tranquilizara, después de todo, el confiaba en todo lo que viniera de mí, dando por sentado que funcionaba.

(…)

Pronto llegó la clase que más esperaban Defensa contra las artes oscuras, también traía los regalos que le daría a Remus, aunque seguía investigando con los chicos una forma de hacer que Remus controlara su estado, tal vez íbamos por buen camino, quería ayudarlo a tener una trasformación completa y que lograra cambiar a voluntad, como los metamorfo normal, en este caso, como si fuese un animago.

Una vez en clase, dijo que guardáramos nuestros libros, salimos del salón y nos encontramos con Peeves, quien comenzó a intentar molestar a Remus y no quería sacar la goma de mascar, pero cuando me vio salir del montón de alumnos y vio que lo miraba molesta, suspiró y la terminó quitando.

Nos llevó a la sala de profesores, donde Snape, de mala gana y burlándose de Neville, terminó por salir, yo estaba tranquila mientras él decía que lo que había dentro del armario era un boggart, haciendo la primera pregunta de la clase.

— ¿qué es un boggart? — preguntó, a lo que esperé un momento antes de alzar la mano, pues al parecer nadie lo sabía.

— Es un ser que cambia de forma — dije y el me sonrió — puede tomar la forma de aquello que más miedo nos da. — terminé de explicar.

— Yo no lo podría haber explicado mejor — admitió, y me puse radiante de felicidad, uno de mis personajes favoritos me había elogiado — El boggart que está ahí dentro, sumido en la oscuridad, aún no ha adoptado una forma. Todavía no sabe qué es lo que más miedo le da a la persona del otro lado. Nadie sabe qué forma tiene un boggart cuando está solo, pero cuando lo dejemos salir, se convertirá de inmediato en lo que más temamos. Esto significa — prosiguió, optando por no hacer caso de los balbuceos de terror de Neville — que ya antes de empezar tenemos una enorme ventaja sobre el boggart. ¿Sabes por qué, Harry?

— ¿Porque somos muchos y no sabe por qué forma decidirse? — dijo dudando.

— Exacto — felicitó Remus, a lo que sonreí para Harry — Siempre es mejor estar acompañado cuando uno se enfrenta a un boggart, porque se despista. ¿En qué se debería convertir, en un cadáver decapitado o en una babosa carnívora? En cierta ocasión vi que un boggart cometía el error de querer asustar a dos personas a la vez y el muy imbécil se convirtió en media babosa. No daba ni gota de miedo. El hechizo para vencer a un boggart es sencillo, pero requiere fuerza mental. Lo que sirve para vencer a un boggart es la risa. Lo que tienen que hacer es obligarlo a adoptar una forma que ustedes encuentren cómica. Practicaremos el hechizo primero sin la varita. Repitan conmigo: ¡Riddíkulus!

— ¡Riddíkulus! — dijeron todos a la vez.

— Bien —dijo Remus — Muy bien. Pero me temo que esto es lo más fácil. Como ven, la palabra sola no basta. Y aquí es donde entras tú, Neville.

El armario volvió a temblar. Aunque no tanto como Neville, que avanzaba como si se dirigiera a la horca. Volteo para verme en busca de apoyo, yo sonreí y susurré “confía”.

— Bien, Neville — prosiguió Remus. — Empecemos por el principio: ¿qué es lo que más te asusta en el mundo? 

— El profesor Snape. — dijo dudoso. Casi todos se rieron. Incluso Neville se sonrió a modo de disculpa. Remus, sin embargo, parecía pensativo. Yo estaba emocionada con lo que pasaría.

— El profesor Snape… humm… Neville, creo que vives con tu abuela, ¿es verdad?

— Sí — respondió Neville, nervioso — Pero no quisiera tampoco que el boggart se convirtiera en ella. 

— No, no. No me has comprendido — dijo Remus, sonriendo — Lo que quiero saber es si podrías explicarnos cómo va vestida tu abuela normalmente. 

— Bueno, lleva siempre el mismo sombrero: alto, con un buitre disecado encima; y un vestido largo… normalmente verde; y a veces, una bufanda de piel de zorro.

— ¿Y bolso? — le ayudó Remus.

— Sí, un bolso grande y rojo — confirmó Neville. 

— Bueno, entonces ¿puedes recordar claramente ese atuendo, Neville? ¿Eres capaz de verlo mentalmente?

— Sí — dijo Neville, con inseguridad, preguntándose qué pasaría a continuación.

— Cuando el boggart salga de repente de este armario y te vea, Neville, adoptará la forma del profesor Snape — dijo Lupin — Entonces alzarás la varita, así, y dirás en voz alta: ¡Riddíkulus! concentrándote en el atuendo de tu abuela. Si todo va bien, el boggart-profesor Snape tendrá que ponerse el sombrero, el vestido verde y el bolso grande y rojo.

Hubo una carcajada general. El armario tembló más violentamente. Yo disfrutaría mucho el ver a Quejicus en traje de la abuela de Neville, no odiaba al personaje, pero si era muy amargado.

— Si a Neville le sale bien — añadió — es probable que el boggart vuelva su atención hacia cada uno de nosotros, por turno. Quiero que ahora todos dediquen un momento a pensar en lo que más miedo les da y en cómo podrían convertirlo en algo cómico…

La sala se quedó en silencio. Pronto todos pensaban en sus mayores miedos, fue entonces que vi a Harry estremecerse, yo intenté pensar una y otra vez cual era mi peor miedo, lo único que venía a mi cabeza era mi otra vida, una sensación de tristeza me embargaba porque ese miedo ya era real, no los volvería a ver…

— Arrancarle las patas. — murmuró Ron sacándome de mis pensamientos. 

— ¿Todos preparados? —preguntó el Remus. Harry se horrorizó al igual que yo. No estábamos preparados. Pero no quiso pedir más tiempo, y yo tampoco. Todos los demás asentían con la cabeza y se arremangaban.

— Nos vamos a echar todos hacia atrás, Neville — dijo Remus — para dejarte el campo despejado. ¿De acuerdo? Después de ti llamaré al siguiente, para que pase hacia delante… Ahora todos hacia atrás, así Neville podrá tener sitio para enfrentarse a él.

Todos se retiraron, arrimándose a las paredes, y dejaron a Neville solo, frente al armario. Estaba pálido y asustado, pero se había remangado la túnica y tenía la varita preparada.

— A la de tres, Neville — dijo Remus, que apuntaba con la varita al pomo de la puerta del armario — A la una… a las dos… a las tres… ¡ya!

Un haz de chispas salió de la varita de Remus y dio en el pomo de la puerta. El armario se abrió de golpe y el profesor Snape salió de él, con su nariz ganchuda y gesto amenazador. Fulminó a Neville con la mirada. Neville se echó hacia atrás, con la varita en alto, moviendo la boca sin pronunciar palabra. Snape se le acercaba, ya estaba a punto de cogerlo por la túnica…

— ¡Ri… Riddíkulus! — dijo Neville.

Se oyó un chasquido como de látigo. Snape tropezó: llevaba un vestido largo ribeteado de encaje y un sombrero alto rematado por un buitre apolillado. De su mano pendía un enorme bolso rojo. Hubo una carcajada general. El boggart se detuvo, confuso ante las risas de los demás.

— ¡Parvati! ¡Adelante!

Parvati avanzó, con el rostro tenso. Snape se volvió hacia ella. Se oyó otro chasquido y en el lugar en que había estado Snape apareció una momia cubierta de vendas y con manchas de sangre; había vuelto hacia Parvati su rostro sin ojos, y comenzó a caminar hacia ella, muy despacio, arrastrando los pies y alzando sus brazos rígidos…

— ¡Riddíkulus! — gritó Parvati. Se soltó una de las vendas y la momia se enredó en ella, cayó de bruces y la cabeza salió rodando.

— ¡Seamus! — gritó Remus.

Seamus pasó junto a Parvati como una flecha. ¡Crac! Donde había estado la momia se encontraba ahora una mujer de pelo negro tan largo que le llegaba al suelo, con un rostro huesudo de color verde: una banshee. Abrió la boca completamente y un sonido sobrenatural llenó la sala.

— ¡Riddíkulus! —gritó Seamus. La banshee emitió un sonido ronco y se llevó la mano al cuello. Se había quedado afónica.

¡Crac! La banshee se convirtió en una rata que intentaba morderse la cola, dando vueltas en círculo; a continuación… ¡crac!, se convirtió en una serpiente de cascabel que se deslizaba retorciéndose, y luego… ¡crac!, en un ojo inyectado en sangre.

— ¡Está despistado! — gritó Remus nuevamente — ¡Lo estamos logrando! ¡Dean!

Dean se adelantó. ¡Crac! El ojo se convirtió en una mano amputada que se dio la vuelta y comenzó a arrastrarse por el suelo como un cangrejo.

— ¡Riddíkulus! — gritó Dean. Se oyó un chasquido y la mano quedó atrapada en una ratonera.

— ¡Excelente! ¡Ron, te toca!

Ron se dirigió hacia delante. ¡Crac! Algunos gritaron. Una araña gigante, de dos metros de altura y cubierta de pelo, se dirigía hacia Ron chascando las pinzas amenazadoramente. Por un momento Ron parecía petrificado, haciéndome considerar el entrometerme, pero me abstuve, sabía que lo lograría.

— ¡Riddíkulus! — gritó Ron. Las patas de la araña desaparecieron y el cuerpo empezó a rodar. Lavender Brown dio un grito y se apartó de su camino a toda prisa.

El cuerpo de la araña fue a detenerse frente a mí. Ante mi aparecieron los cuerpos de mi familia, la de mi vida pasada, sorprendiendo a todos, más que sentir miedo por esa escena ante mí, un coraje en contra del boggart se instaló en mi pecho en ese instante, por lo que el boggart pareció descontrolarse y comenzó a temblar mientras cambiaba de forma al azar frente a todos. 

— ¡Aquí! — gritó el Remus de pronto, avanzando rápido hacia el boggart. Salí de mis pensamientos en ese instante.

¡Crac! La cosa deforme y sin patas había desaparecido. Durante un segundo todos miraron a su alrededor con los ojos bien abiertos, buscándola, mientras que yo sabía perfectamente donde se encontraba. Entonces vieron una esfera de un blanco plateado que flotaba en el aire, delante de Remus.

— ¡Riddíkulus! — dijo casi con desgana. ¡Crac!

— ¡Adelante, Neville, y termina con él! — dijo cuando el boggart cayó al suelo en forma de cucaracha. ¡Crac! Allí estaba de nuevo Snape. Esta vez, Neville avanzó con decisión.

— ¡Riddíkulus! — gritó, y durante una fracción de segundo vislumbraron a Snape vestido de abuela, antes de que Neville emitiera una sonora carcajada y el boggart estallara en mil volutas de humo y desapareciera.

— ¡Muy bien! — gritó Remus mientras la clase prorrumpía en aplausos — Muy bien, Neville. Todos lo han hecho muy bien. Veamos… cinco puntos para Gryffindor por cada uno de los que se han enfrentado al boggart… Diez por Neville, porque lo hizo dos veces. Y cinco por Hermione y otros cinco por Harry.

— Pero yo no he intervenido — dijo Harry.

— Tú y Hermione contestaron correctamente a mis preguntas al comienzo de la clase — dijo sin darle importancia — Muy bien todo el mundo. Ha sido una clase estupenda. Como deberes, van a tener que leer la lección sobre los boggart y hacerme un resumen. Me lo entregarán el lunes. Eso es todo.

Los alumnos abandonaron entusiasmados la sala de profesores. Harry y Ron, por el contrario, me miraron buscando una explicación de los que había pasado, pero al desviar la mirada y no decir nada, ellos optaron por cambiar el rumbo del tema.

— Parece que siempre terminas teniendo razón — dijo Ron acercándose — sin duda él es el mejor profesor que hemos tenido — dijo contento. — recuérdame nunca dudar de ti.

— Aunque te lo recuerde lo seguirás haciendo — dije con burla haciendo de lado mi estado de ánimo y él se sonrojó de la vergüenza — si me permiten, tengo algo importante que hacer — dije dándome vuelta yendo en busca de Remus. Al cual encontré rápidamente.

— Profesor… — dije y el volteo a verme con curiosidad.

— Hermione ¿no? — dijo y pude ver que realmente parecía tener dudas acerca de mí, pues también parecía tener precaución, supongo que nunca había visto a un boggart comportarse así con una sola persona enfrente — ¿qué sucede? ¿tienes alguna duda acerca de algo?

— Solo le venía a entregar esto — dije sacando una maleta en perfecto estado, hecha por los chicos, adentro tenía ropa para Remus, pero el me miró extraño. — es un obsequio de bienvenida — dije intentando quitarle peso al asunto — no tiene que pensar en el precio o en retribuir, realmente lo hice porque se lo quería dar… por lo menos, oficialmente de mi parte… bienvenido a Hogwarts — dije y pareció relajarse — me tengo que apresurar, llego tarde ¡adiós, profesor!  

Salí de ahí lo más pronto posible, había de entregar las escobas y asistir a las audiciones para nuevos integrantes del equipo de quidditch, aprovechando que ellos también se iban a reunir para las audiciones un poco antes, parecía que estaban igualmente preocupados por el equipo de quidditch.

Ambos equipos hablaban acerca de quien haría las audiciones primero. Cuando me vieron llegar, sus miradas estaban llenas de desconfianza de parte de los alumnos de Ravenclaw, parece que pensaban que los iba a espiar, pero no me importó, divisé a Cedric y me sentí feliz de verlo vivo… 

— ¿qué haces aquí? — dijo el capitán del equipo de Ravenclaw lo más imparcial que pudo.

— Hola, buenas tardes, gusto en verlos — dije sonriendo sin ser afectada por las miradas que me dirigían — sobre el asunto por el que vengo… solo diré que he venido a poner las cosas parejas — dije y me miraron raro.

— Sé que salvaste a Penélope el año pasado, pero tenemos que separar ese asunto del quidditch. — dijo serio.

— ¿a qué te refieres con poner las cosas parejas? — dijo Cedric amablemente interviniendo, mi sonrisa se hizo aún más grande.

— Tranquilos, no vengo a espiarlos, pero era el único momento en el que podría ver a ambos equipos — dije tomando mi bolso — el año pasado me encargué de conseguir a alguien que apoyara a Gryffindor para comprarles las nimbus 2001 — ante mis palabras me miraron con intriga — este verano no fue la excepción, pero en vez de conseguir escobas para Gryffindor, conseguí para Hufflepuff y Ravenclaw.

Comencé a sacar las escobas de mi bolsa de cuentas, los chicos se sorprendieron, comencé a repartir poco a poco las escobas, ambos equipos no sabían qué decir, desviaron la mirada avergonzados.

— Lo siento… — dijo el capitán de Ravenclaw. — no quería… — intentó explicar, pero lo interrumpí.

— Está bien, es algo normal, el año pasado no logre conseguírselas, pero este año quería traérselas costase lo que costase, me gusta que las cosas sean justas… — sonreí y ellos agacharon la cabeza — suerte en sus prácticas chicos — dije y salí corriendo de ahí.

Fue muy incómodo...

(…)

Usaba el giratiempo un poco más tarde de lo común, así también aprovechaba el tiempo para crear los teléfonos de los chicos, procurando que fuesen lo suficientemente sencillo de utilizar para ellos, y con las aplicaciones básicas, mensajes, notas de voz, llamadas alarmas (que en mi opinión necesitaban con urgencia), grabadora y cámara de fotos y videos. No le agregaría más.

Ymir y los chicos se sorprendieron cuando lo recibí, pero más fue su impresión cuando lo usé por primera vez, aun así, decían que debía ser realmente agotador el que tuviera que correr de un lado a otro, era verdad, Tom había accedido a ayudarme con algunas tareas, mi magia me había ayudado con las demás, además de los viajes astrales que permitían a mi cuerpo descansar mientras avanzaba por mi cuenta.

Logré entrar al equipo de quidditch, estaba como cazadora, ya que Katie Bell pasó a ser suplente, no pareció molesta, lo cual me tranquilizó, los entrenamientos eran intensivos, para acostumbrarme a jugar con ellos, pero aunque era agotador, vaya que era divertido, aunque cada vez que podía, descansaba mi cuerpo entrando en forma astral, hasta ahora nadie había sospechado eso, mis portales me ahorraban mucho tiempo en mis desplazamientos de clases, complementado con el giratiempo, ara agotador mi horario, pero más llevadero.

Draco y sus amigos dejaron de molestarme, simplemente pasaban de mí, todo a partir del momento en que “salvé a Draco”, los chicos notaron el claro cambio, aunque algo me decía que Draco tenía que ver en ese cambió. Ahora mismo me encontraba frente a Pansy, que espero a que estuviese sola en un pasillo.

— ¡Hey! ¡Granger! — llamó, a lo que voltee para encararla, parecía renuente a decir algo, pero también había un brillo de decisión en sus ojos.

— ¿sí? — dije tranquila, pues, aunque su actitud era tosca como de costumbre, por primera vez no me había insultado.

— Tu… fuiste muy tonta al lanzarte contra el basilisco — dijo ¿enojada? — pero… por primera vez haces algo mediamente bien — dijo dudosa — sí, creo que no estuvo mal… los demás ya no pueden molestarte… — dijo frunciendo el ceño.

— De nada — dije y sonreí en su dirección.

— ¡en ningún momento dije que estaba agradecida! — vociferó.

— Tampoco lo acabas de negar — ante eso se puso roja — te importa mucho Malfoy, es divertido discutir con ustedes, me agradan — dijo y me miró tan sorprendida como Draco en su momento — supongo que una parte de mí, aun con su temperamento, realmente puede considerarlos mis amigos… por eso lo hice… protejo a mis amigos y doy todo por ellos. — dije y no supo que decir, al final volvió a fruncir el ceño.

— ¡es lo más ridículo e irresponsable que te he escuchado decir! ¡realmente eres una Gryffindor idiota! — dijo mientras se daba la vuelta y desaparecía por el pasillo más próximo a paso acelerado, no pude evitar sonreír. Realmente algunos Slytherins eran adorables, unos tsundere adorables.

Pero tenía que tener cuidado con mis movimientos, Remus parecía tomar precauciones conmigo desde lo ocurrido por el boggart, antes de recurrir a los chicos, decidí investigar por mi cuenta, pero nada parecía estar registrado, al final, mis dudas tendrían que ser consultadas con los únicos que podían tener las respuestas.

* .:。✧*゚ ゚・ ✧.。. * * .:。✧*゚ ゚・ ✧.。. *

Gracias por leer y apoyar tanto mi historia, son los mejores ♥️

Espero que esté capítulo haya sido de su agrado

Nos leemos pronto 🥰💜💜💜

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