Clímax [ROMANCE 1] [COMPLETA✔️]

𝐂-𝐄𝐗𝐓𝐑𝐀 1

"ɴᴏ ᴇꜱ ᴄᴜʟᴘᴀ ᴅᴇ ɴᴜᴇꜱᴛʀᴏꜱ ʜɪᴊᴏꜱ, ᴊᴀʏ"

  — No sabíamos que regalarle, pero espero le guste.

Le tendí a Adrián el obsequio que Liam y yo compramos para Sally, consistía en crayolas y un libro para colorear de animales. Supuse que era lo mejor, puesto que a Akxel le ayudo bastante para ir expandiendo su conocimiento.

— ¿Qué es?

Pregunto mientras metía su mano en la bolsa amarilla de princesas, sacando así el obsequio.

Le di una mirada confusa por como rebuscaba.

— Perdonen, pero estoy inspeccionado todos los obsequios, ya que a Max se le ocurrió regalarle fotografías de ese chico Bieber. — Alce las cejas, levante la mirada hacia Liam, quien solo torció sus labios, como si no le sorprendiera. — Solo me aseguro de que sea el único idiota con media neurona funcional.

Le di una palmadita en la espalda.

— Pero no te enojes, Adri, tarde o temprano se fijará en los chicos, y no podrás impedirlo.

Dentro de un ataúd, con flores y siete metros bajo tierra, ahí me encontraba luego de la mirada que me dio, no hice más que reírme por aquella expresión.

— Solo tiene dos años, Blair.

— Solo estoy bromeando, relájate, ya sabes que Max no razona de la manera correcta; Liam y yo iremos a felicitar a Sally y a saludar a los demás.

Asintió aun con esa expresión disgustada en el rostro.

Tomada de la mano de Liam nos acercamos más al centro de la fiesta de cumpleaños de la pequeña. Adri y Vanessa optaron por hacerla en el parque, así los niños podrían jugar libremente, Akxel hace un rato que había salido corriendo hacia los juegos.

Había personas que desconocía, según tenía entendido familiares de Vanessa, y algunos familiares de Adri, los cuales conocía, aunque no a todos.

Pude ver a la hermosa niña de cabello castaño largo y ondulado, con esos hermosos ojos cafés. Su expresión de sorpresa al verme fue muy notable y emprendió camino hacia nuestra dirección, venia corriendo con sus piecitos casi enredándose, aunque esteba feliz de verla también me puse nerviosa de que se cayera.

Me agaché y abrí mis brazos para recibirla con un abrazo, pero fue todo lo contrario, alegre se pegó a Liam como un pedacito de chicle, dejándome colgada y un poco sorprendida. Levante la mirada aun sin poder creerlo, Liam tan solo esbozo una sonrisa satisfactoria y levanto a la niña cargándola en brazos.

— Sally...

Ella con sus mejillas sonrojadas abrazo a Liam y tan solo me sonrió a mí.

— Feliz cumple años princesa. — Le dijo Li besando su mejilla.

— Son... ¡Tengo dos ahora! — busco la forma del número con sus pequeños dedos, pero solo formo un tres.

— Así es, ya eres una niña grande.

— ¡Sí!

— ¿No quieres saludar a tía Blair?

Ella asintió poniendo su atención en mí.

— Hola tía — agito su manita en mi dirección.

Su dulce voz me llego al corazón.

— Mi cielo, quería darte un abrazo.

Le tendí los brazos y esta vez sí accedió a mí, Liam me la paso aun con una mirada victoriosa, la acurruque y bese su mejilla.

— No puedo creer que ya tengas dos años.

— ¡Dos! — Repitió el tres con los dedos, sacándome una sonrisa.

La baje al suelo y antes de poder decir algo más salió corriendo hacia los juegos; suspire sin quitarle la mirada de encima.

— No puede ser que ella te quiere más a ti que a mí.

— Es una niña, los niños se compartan así.

Bufe sus palabras.

— ¡Hola, chicos! Qué bueno verlos.

Salude a Vanessa con un abrazo, al igual que Liam.

— Veo que todo salió bien. — Elogio Liam.

— Sí, gracias por la sugerencia, Sally esta maravillada. Bueno, pónganse cómodos, los vere al rato.

Se marcho tan rápido como había llegado.

Liam fue a supervisar a Akxel, quien no cabía en sí mismo de la emoción junto a Sally, y otros niños más. Yo por otro lado aproveche para saludar a la madre y al padre de Adrián al igual que a los padres de Vanessa, entre otras personas más que estaban presente.

Sentía una extraña sensación al estar rodeada de tantas personas desconocidas, que en el momento en que logre ver a Jay, Janett y a Max me escape hacia donde ellos sin dudarlo.

— Oh... Examiga. — Murmuro Jay con indiferencia.

Ha tenido un drama últimamente que nadie lo entendía.

Le di un abrazo a Janett y a Max, ya que él se quedó de brazos cruzados como un niño de dos años.

Janett se disculpó y se alejó, Adri no tardo en unirse.

— Mira quien llego también, otro examigo.

Adrián rodo los ojos.

— ¿Cuál es tu problema?

— Mi problema es que por sus hijos — nos señaló. — Ustedes ya no tienen tiempo para mí, y el otro pendejo ese ahora prefiere vivir lejos, estoy solo.

Su expresión fue triste.

Ahora ya no teníamos la misma disponibilidad de antes, de hecho, hacia dos meses que no lo veía, pero es que entre Akxel y el consultorio me consumían, y más ahora que ha entrado a recepción.

— No es culpa de nuestros hijos, Jay. — Le explico Adri.

— No, es cierto, es culpa de ustedes.

Tome su mano, sentándome a su lado, sin decir nada, ya que sabía que había sido yo la que ha puesto esa barrera. Jay podría hacer todo el berrinche que quisiera, pero por lo general solía tener razón.

Nadie dijo nada, todos teníamos la vista fija en donde los niños estaban jugando, podía ver a Liam charlando animadamente con un grupo de hombres; se le daba mejor socializar que a mí.

— ¿Quedad tiene Akxel? — Escuche a Max a mi lado.

— Tres.

Otro profundo silencio, el cual luego fue interrumpido por Adri y un suspiro de su parte.

— ¿Cuándo nos convertimos en esto?

— Solo nos faltan las cervezas.

Esboce una pequeña risa al imaginarme la escena.

No podía creer como ha pasado el tiempo.

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ᴍɪʟ ɢʀᴀᴄɪᴀꜱ ᴘᴏʀ ʟᴇᴇʀ