—Solo fue un estúpido beso..—Argumentó. —Y de hecho, es una muy buena compañía, Sirius y Peter también lo son.

—Lo siento.—Habló la peliazul.—Se que he estado más tiempo con Lily y...

—No te disculpes.— La cortó.— Lo entiendo.

—Okay, vamos a transformaciones o Minnie nos asesinará.

Ambas salieron con los brazos entrecruzados y con pequeñas sonrisas en sus rostros, disfrutando mutuamente de su compañía.

•••

—¡Oh! ¡Ven aquí bella dama!—El grito de Sirius hizo que la mitad del comedor volteara a verlo, algunas chicas suspirando ante la belleza del chico.

Rose se encogió de hombros y caminó con la cabeza gacha hasta sentarse a un lado de Peter, que la recibió risueño.

La pelirroja aún no se acostumbraba a lo extravagante que era Sirius.

—Sirius debes dejar de gritar cada vez que me ves.—Murmuró cohibida, pasó su vista por el grupo y notó que alguien faltaba.— ¿Y James?

—Ha vuelto a estar detrás de Lily, de seguro ahora está esperándola fuera de su clase.

Rose asintió y formó una pequeña sonrisa en su rostro, puesto a que si James volvía a estar detrás de su hermana, quizá y con mucha suerte, ella la perdonaría.
Comió un poco del plato de Peter mientras los escuchaba hablar sobre la clase de defensa, y se atragantó cuando vio a Remus sentarse frente a ella. Sirius la miró divertido y Peter se encargó de palmearle la espalda mientras le pasaba un vaso de jugo de calabaza.

—¿Estas bien?—Preguntó Peter preocupado.

—S-si..—Tosió.—Si, estoy bien.

Remus no la miró ni por un segundo y aquello le pareció extraño a la chica. Él se había sentado allí, comiendo un poco de una tostada con queso, y leyendo un libro de astronomía el cual Rose pudo reconocer fácilmente.
Aquel libro era el que ella tomaba siempre de la biblioteca común, y que a veces, sin darse cuenta, se lo quedaba por días.

—¡Remus! —Una voz chillona se escuchó tras el chico.—¿Hoy me ayudarás en pociones?

Una chica rubia de ojos saltones miraba al chico, expectante a su respuesta. Remus se aclaró la garganta y de reojo miró a Rosalind, Sirius parecía disfrutar de aquel incómodo momento.

—Claro que si Kim, ¿Nos vemos más tarde?

Rose se levantó de su asiento rápidamente, tratando de no voltear a ver la escena, y Peter que aun no entendía el porqué de la actitud de la pelirroja, salió detrás de ella.

—¡Ey! ¡Espérame Rosie!— La pelirroja salió por las grandes puertas del comedor, aún con la voz de Peter tras ella. —¡Por Merlin mujer!

Cuando Peter llegó a su lado ambos se dirigieron al lago negro, donde usualmente se encontraban siempre. Y aquello era algo que Rosalind había aprendido en poco tiempo: Peter disfrutaba de pocas cosas pero a él verdaderamente le encantaba pasar su tiempo frente al lago y comiendo caramelos de limón y menta.

—¿Por huiste así de la mesa? Agradece que he tomado unas tostadas antes de seguirte.—Masticó mientras hablaba y extendió una frente la cara de la chica.

—Gracias.—Sonrió diminutamente.—Es solo que las cosas entre Remus y yo no son las más optimas, ¿sabes? No quiero incomodarlo.

Parte de aquello era cierto, pero Rosalind no iba a admitir que estaba celosa.

—Oh, ¡pero si a Remus no le importa!—Exclamó.

—Gracias por acompañarme Pet.

—Claro que si, somos amigos Rosie.

•••

Las estrellas el día de hoy se veían un tanto más apagadas de lo usual, a Rose no le parecía extraño, ya que desde un par de días atrás una tormenta descomunal se avecinaba.

—Rose, ¿Crees que podríamos hablar?— Una voz conocida la sacó de su ensimismamiento y se giró para ver a Severus detrás de ella.—En verdad necesito hablar contigo.

—¿Que quieres Severus?— Preguntó con fastidio.

—Uh y-yo, necesito hablar con alguien sobre Lily y tú sabes que no confío en nadie más...

—¿No confías en nadie mas? ¿Y te humillas hablándole a una sangre sucia?— La voz de Rosalind se quebró por un instante y la cara de Snape se transformó.—Oh, ¿acaso creíste que no oía como te burlas de los asquerosos sangre sucia por los pasillos?

—¿Que? ¿Como...?

—Esa es la razón por la que deje de responder tus cartas.—Informó. —Pero tranquilo, Lily aún no sabe nada, aunque supongo que no tardará en saberlo..

—No, Rosalind.—Negó.—¿Quien te dijo que..?

—Lestrange se encargó de hacérmelo saber, el curso pasado.—La pelirroja soltó una risa seca.—Supongo que quería comenzar a alejarte de nosotras porqué, ya sabes, manchamos tu apellido.

Rose aceleró su paso hacia la sala de Gryffindor y Snape no se detuvo en su trabajo de perseguirla. Unos cuantos gritos después y atrayendo varias miradas, la pelirroja frenó frente al cuadro de la señora gorda.

—¡Pero Rosalind déjame explicarte!—Severus volvió a gritar y esta vez, tomó fuertemente del brazo de la chica.

—Suéltame.

—No hasta que me escuches.—Negó el Slytherin.— Debes de saber que yo nunca diría algo...

—¿No la escuchaste?—La voz dura de James Potter sobresaltó a ambos chicos, detrás de él, el resto de los merodeadores miraban la escena con ceños fruncidos.—Suéltala Quejicus.

—No te metas Potter.—Contestó Snape.

—Suéltala, Snape.—Habló Remus acercándose a ellos.— Solo suéltala.

Severus Snape alzó una ceja y con una mueca de disgusto soltó a Rosalind, que se tambaleó hacia Peter. El Slytherin sospechaba fuertemente que Lupin era un hombre lobo, y aunque le faltaban pruebas corpóreas, estaba muy seguro de aquello.

Antes de que James o Sirius hablasen, Rose se paró recta y se acercó a Snape, tanto que el chico juró ver un resplandor celeste en los ojos verdes de la chica.

—No te atrevas a tocarme otra vez, de hecho, no te atrevas a dirigirme la palabra otra vez.— La chica golpeó su pecho con los libros que cargaba.— Tienes una semana para decirle a Lily, o yo lo haré.— Susurró.—Quejicus.

James soltó una carcajada cuando escuchó a Rosalind llamar a Snape por el sobrenombre que él había creado. Sirius se encargó de empujarlo fuera del pasillo y Remus y Peter se acercaron a ella.

—¿Estas bien Rosalind?—Preguntó Remus.

—Si.—Suspiró.—Si, estoy bien.

—¿Porque te perseguía ese idiota Rosie?—Preguntó James.

—Nada, luego se enterarán, supongo.—Esbozó una sonrisa precaria.—Iré a ducharme, disculpen.

𝐋 𝐎 𝐕 𝐄 𝐑  « Remus Lupin »Where stories live. Discover now