La pequeña Dixon. ~Chandler Riggs.

Capítulo 76: Bob. {Fin de maratón 3/3}

”Si, anteriormente a que pasará lo del Apocalipsis Zombie, yo me encontraba caminando junto a Jesús en la selva. Estábamos haciendo una exploración por todos los lugares que podíamos ver, éramos unos exploradores. Y nos encantaba el trabajo. Un día de esos, mientras más nos adentrábamos. Pudimos ver, mejor dicho. Jesús encontró algo blanco y brillante del otro lado de la selva, así que decidimos ir hacia allá para poder descubrir que era. «Es un tigre blanco, y muy precioso» había dicho Jesús, pero no le preste demasiada atención. Me había quedado fascinado viéndolo. «Vayamos a por él» dije emocionado. Jesús como mi buen amigo, siempre me apoyo así que no dudo ni un momento en acompañarme a poder ir  a buscarlo o quizás domesticarlo. Era un crio en ese entonces, pero con el tiempo fue creciendo. Siempre estuvo junto a mí, y cuando empezó todo esto. Nos logro salvar de unos Walkers, que intentaban atacarnos. Se los devoro. Y ahora, me siento mal por verlo de esta manera.

—Lo sentimos, ya verás que se va a recuperar —le dio ánimos Morgan. Todos asentimos ante lo que dijo y luego comenzamos alejarnos, para darles privacidad.

No sabía por todo lo que paso, y tampoco sabía tanto del tigre. Ellos son muy lindos, mi animal favorito siempre fue el Cheetah. No sé mucho el porqué, pero creo que me agradan. Son bonitos y además me hacen la impresión de que son libres y son los animales más rápidos del mundo. Yo creo que sí tendría que ser un animal, estaría en mis posibilidades.

¡Fuera de tema! Tengo que ir hablar con Bob, esto no se puede quedar así. Necesito saber muy bien qué es lo que le pasa, porque no podemos tener más perdidas dentro del Reino. Si es lo que yo pienso —una mordida— ojala podamos actuar rápido ante eso. Pero si no lo es, sería una gran felicidad.

— Bob, necesitamos hablar —me frene frente de él y luego me cruce de brazos como puedo, ya que me duele el brazo izquierdo—.

— Ya se, queres hablar de lo de antes. Entiéndeme, no quería decírselo a nadie —Solté un leve suspiro y asentí con la cabeza apoyando mi brazo bueno sobre su hombre—.

—Tranquilo, siempre te apoyaremos.

Su cara comenzó a tranquilizarse, y sonrió levemente. Luego hizo una mueca sacando toda la emoción que sentía por dentro. Se arremango la remera y pude ver que había una gran mordida en esta. Mierda. Estaba en lo cierto. A Bob le habían mordido, seguramente fue cuando estaba en medio de todos esos Walkers. Habíamos llegado tarde.

— Sí, estoy infectado. Mi carne está infectada. Todo mi cuerpo está infectado.

Hice una mueca y negué con la cabeza. Ya no había nada que hacer por más que queramos, porque aunque le cortemos el brazo. Bob hablo muy tarde.

— ¡Si nos hubieras dicho! —lo regañé—. Podríamos haber cortado el brazo.

— Fue una opción, pero no quería hacer nada. Si es mi momento, que lo sea. Allá —señaló el cielo—, esta esperándome Sasha y no puedo fallarle otra vez.

Lo abracé fuertemente y luego el me devolvió el abrazo. Estoy harta de perder a las personas que quiero. Cada vez somos pocos los que quedamos vivos. A veces me pregunto ¿Qué pasará en el futuro? Porque no entiendo si habrá una cura —que no creo—, si habrá una bomba atómica y nos mate a todos. Si hay algunos que son inmunes. Si todos vamos a morirnos… ¡No entiendo nada! Y me exaspera demasiado, necesito respuestas rápidamente.

— Creo que es hora.

Yo lo miro sin entender a que se refiere, pero al ver su cara cuando nos separamos, entendí a la perfección.

— Tenemos que ir a decirlo a los demás, es decir, tendrás que ir a decirlo. Y tendremos que hacer una despedida… —susurré adolorida y luego tome su mano—. Vamos, Bob.

Comenzamos a caminar hacia donde se encontraba la mayoría de nuestro grupo. A mí me gustaría que nunca más perdamos a nadie, pero así es la vida y siempre hay alguien que nos quitan. Además ¿A dónde irán? Eso es otra pregunta que nunca nadie podrá responder, porque quizás vayan al cielo, quizás al infierno. O tal vez no haya nada. Nunca nadie sabrá.

Nuestro grupo consistía en los que fueron quedando. Yo me uní a ellos, porque nos encontramos con Michonne y luego se reencontraron —aún recuerdo el primer día que vi a Carl, que recuerdos—… ellos son como mi familia. Especialmente Daryl que bueno, es mi padre. Y Franky sería como mi pequeño hermanito, y así le digo. Pero todos los demás son mi familia. Y a mí me gusta decir que somos como una “manada” porque siempre estamos unidos, y las manadas no se tienen que separar.

Hice sonar mi garganta para que prestaran atención hacia nosotros. Y lo logré.

— Emmm… Bob tiene algo que decirles —susurre haciendo una pequeña mueca de dolor. Aunque no hablara tanto con Bob, me parecía una buena persona. Y no merecía esto—.

— Perdónenme, pero les oculte algo, y no debí hacerlo —bajo la cabeza arrepentido, pero yo le palmee la espalda, y luego muchos se fueron acercando—.

— No creo que sea tan grave… —susurro Michonne. Pero se equivoco—.

— Me mordieron el día de la horda que entro —comenzó a explicar— y como pasaron los días, no se los dije porque pensé que llego mi momento. Sasha debe estar esperándome, o eso espero yo. Pero no quiero que se olviden. Así es la vida, y si tengo que morir para que ustedes puedan seguir sobreviviendo lo haré. Me arriesgaré por ustedes. Siempre serán mi familia. Aunque hayan desconfiado de mi, la primera vez que me vieron. Saben que siempre estaré.

La mayoría puso una cara de horror, otros comenzaron a relajarse mientras hablaba y algunos les caían las lágrimas de sus ojos.  Comenzaron acercarse hacia Bob para abrazarlo y que empiece la despedida y esas cosas.
Le solté la mano y sonreí levemente asintiendo con la cabeza. Lo había hecho bien.

— Bueno, creo que es la hora —dijo Bob sonriendo ampliamente—.

— Suerte —susurre junto a Carl, tomada de la mano y apoyada la cabeza en su hombro—.

— A ustedes también, hasta la nueva vida.

Todos nos miramos cuando llego el momento.  Y luego con la pistola que tenía en su mano, se disparo en la cabeza. Algunos se giraron para no ver —como Franky y Clementine— otros se quedaron viendo —Como yo y mi padre— todos hacíamos cosas diferentes. Habíamos perdido a otro más. ¿Cuántas perdidas vamos a tener que vivir para seguir y poder llegar hasta el final de esto? No lo sé.

 Adiós Bob.

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Bueno, a los que siguen aún.

Les digo que ya ¡LA NOVELA VA A REGRESAR CON TODO! 
No va haber más cortes, no tendrán que esperar más. Solo hasta el día que será dicho.
Porque ahora todos los capítulos, tendrán por último escrito la fecha de cuando será el siguiente, así ya pueden saber y emocionarse en esa fecha(?) ah.
¡LA TAN DESEADA MARATÓN LLEGO! Ojala les guste todavía.
GRACIAS POR TODO COMO SIEMPRE. NO TENGO LAS PALABRAS.
Creo que ya no habra más de estos avisos(?) solo si es necesario. Excepto el día del siguiente capítulo;)
Saludos, y Hasta la proxima, xoxo.

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