Abordaje

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La sacudida recorrió toda la nave, varios droides se tambalearon y algunos más se caían —Reporte ¿qué fue lo que pasó?— exigió el cazarecompensas enfadado mientras se equilibraba para no caer —los cruceros clones consiguieron un tiro limpio contra nuestros propulsores, no podemos dar el salto— informo uno de los B1 en la celda, y no tomo mucho para que se diera una nueva sacudida, pero de menor intensidad —tres transportadores de la República fueron liberados sobre nosotros señor, iniciaron un abordaje— volvió a informar el droide de batalla, entonces Bane abrió una comunicación al puente de mando donde exigió —droide, quiero que transfieras los controles de la nave a mi control de la muñeca, quiero acceso completo. En cuanto a ti chico, necesito que me acompañes— repuso sujetando al muchacho de rodillas por el cuello de sus ropas jalándolo sin la menor resistencia.

Sidarth estaba absorto en sus pensamientos, sabía bien lo que eran las pérdidas pero nunca fue responsable de la muerte de alguien, y mucho menos había presenciado una —Señor, dos jedi y un destacamento de clones avanzan sobre el corredor 4-7-3— eso logro sacar al humano de su trance, no permitiría que Bane asesinara a otro Jedi, pero debía ser paciente y aguardar la mejor oportunidad para actuar.

En el camino más droides de batalla se nos unieron, bastantes droides B1 y B2, finalmente atravesamos unas compuertas que nos llevaron a uno de los bordes laterales de la nave, pues estaba repleto de cañones y había cientos de cartuchos de munición; pero antes de cruzar a la siguiente sección de la nave, Bane paro en seco y ordenó a los droides asumir posiciones de defensa, y un par de B2 tras de él, para que en sus palabras "no fuera a hacer ninguna tontería que pusiera en riesgo su pago" entonces vió que oprimía un par de botones en su muñeca por lo que asumió que esperaba a que los Jedi llegarán y no les facilitaría las cosas.

En un instante el Duros desenfundó uno de sus blasters y posó su mirada en la compuerta al frente a la espera de los Jedi que venían por el holocron, y espero, también a rescatarlo; entonces por las puertas de metal ingresaron rostros conocidos que le alegraba muchísimo ver en esos momentos: Anakin Skywalker y Ahsoka junto con otros 6 o 7 clones —bienvenidos, los esperábamos— dijo esbozando una sonrisa maliciosa, después movió el dedo de su mano libre indicando a los B2 que se aproximaran —escuchen, sí todos mantenemos la calma, nadie tiene porque salir herido— entonces los seres metálicos soltaron al rehén para que el cazarecompensas rodeára el cuello del padawan con su brazo libre —solo quiero que abran el holocron, y les entregaré al joven— iba a replicar que era mentira, cuando sintió el cañón del arma en su espalda —y que vas a hacer Bane, dispararme, sabes que tú empleador no le agradará que su presea se dañe o si— le respondió de forma retadora —maestro Skywalker, Ahsoka, olvidense de mi, váyanse de aquí y vuelen la nave en pedazos; es mejor si el holocron está hecho chatarra en lugar de sus manos— exclamó sabiendo que la seguridad de los futuros Jedis se sobreponía a la de un solo padawan.

—¡¡No, debe haber alguna otra forma pero...!!— decía Ahsoka con señas de preocupación cuando de repente el agarre sobre su cuello se desvaneció y le siguió un golpe que impacto contra la zona trasera del cuello, que consecuentemente a lo llevo al suelo —¡¡¡Matenlos!!!— exclamó abriendo fuego contra las tropas de la República, iniciando una peligrosa ráfaga de plasma; cosa que no iba bien con un gran deposito de cargas explosivas a mitad del espacio.

El Sith'ari- Una Historia De Star Wars Kde žijí příběhy. Začni objevovat