h e a r t b e a t|| 2a Temporada de B L || TERMINADA✓

Parte 2

Hace dos años, en octubre

Esta es la última vez que vendré a ver a Tae, pues la llegada de Yoontae está a solo unas dos semanas, y después de eso, vendrá el invierno y no podré traerlo.

—Te prometo que el primer día de primavera estaremos aquí juntos— me quedé en silencio unos minutos más —Aun tengo miedo, ¿sabes?... Te extraño mucho. Pero, te prometo que todo saldrá bien, seré valiente por los dos, ¿ok?— quité de mis ojos las lágrimas que brotaron antes de que rodaran por mis mejillas. Besé la punta de mis dedos y los coloqué sobre su nombre —Te amo — susurré —Te veo en la primavera— me levanté y caminé hasta la salida.

Esta vez me sentí más triste porque no vendría por varios meses, sentía como si lo estuviera dejando atrás...

.....

—¿De verdad vas a ir a la universidad hoy?— me dijo Minji al verme desayunando temprano.

—Claro que sí, acaba de empezar el semestre y no quiero retrasarme con las tareas, ya sabes que en enero...—

—Comienzas a hacer tus pruebas, lo sé. Pero, Seulmin, mírate, ¡parece que vas a reventar!— miré mi enorme barriga...

—Sólo será medio día, volveré para la comida— Minji me miró, pero no estaba muy convencida —Seré cuidadosa, no te preocupes—

Salí de casa con las carpetas en mano y me dirigí a la universidad.

Al principio, me avergonzaba un poco ir embarazada a la escuela. Todo el mundo comentó cómo una estudiante aplicada había regresado de vacaciones embarazada y sin novio, pero, después de unos meses, todos comenzaron a ser un poco más amables conmigo.

Ese día, todos se despidieron de mí y me desearon suerte; incluso unos cuantos maestros mencionaron que ya deseaban conocer a Yoontae.
Entregué mis trabajos y me marché a la hora del almuerzo.

De regreso a casa, decidí pasar por la cafetería y tomar un último té con un buen libro.
Me dí cuenta de que no volvería a tener una tarde tranquila en mucho tiempo... Eso me asustó un poco.

De todas maneras, busqué entre los libros algo que me distrajera.

"Mil soles espléndidos", fue el título que elegí.

—Disculpe— miré atrás —¿Seulmin?— asentí y tomé mi bebida

—Gracias— le dije y me dirigí hacia una mesita junto a las ventanas. Era un día cálido, pero se veía que se aproximaba la lluvia.

Abrí el libro y leí "Mariam", era el nombre más lindo que había leído, y unas páginas más adelante, "Laila". Ambos nombres me encantaron, sí tuviera una niña, definitivamente la llamaría con alguno de esos nombres...
Estaba inmersa en mis pensamientos, cuando alguien tocó mi hombro.

Alcé la vista y ví una cara familiar.

—¿Señorita... Seulmin?—

—S-si...—

—Perdón que la interrumpa... Yo solo... Es que, escuché su nombre y, no, no pude evitar querer saber c-cómo se encuentra...—