—¿Qué te parece?— inquirió Jungkook cuando terminaron el recorrido por la casa y entraron con tranquilidad en la cocina.
—Es preciosa, realmente bonita. Me encantan los detalles exteriores, y el dormitorio principal, una maravilla.
—Me alegra, porque dormiremos en la habitación de huéspedes.— Jimin golpeó suavemente el estómago de Jungkook antes de que ambos rieran.
—Mmm... una remodelación en nuestro pequeño apartamento no vendría mal, ¿eh?
Jungkook suspiró.
—Lo que ordene su majestad.— Ambos volvieron a reír.
El mayor sugirió que Jimin tomara un baño mientras el terminaba de bajar las cosas del auto y comenzaba a preparar la cena, el tiempo había pasado como arena entre dedos, la luz del sol apenas les había alcanzado para llegar a la casa.
Jimin accedió, viajar siempre lo agotaba aunque lo único que hiciera fuera estar sentado disfrutando la vista, generalmente le pedía a Jungkook dejarlo conducir, pero el mayor se negaba, Jimin aun estaba aprendiendo, y decía que la carretera era algo peligrosa para principiantes.
La casa de Jin era bastante bonita, por fuera lucía bastante tradicional, paredes altas con refuerzos de madera, techo en punta, grandes ventanales que, sí no fuera por las cortinas, dejaría ver todo lo qué hay en el interior.
El jardín frontal era grande y precioso, tenía un par de grandes árboles frutales y algunas bonitas flores de varios colores. A Jimin le gustó. También había un pequeño estanque con flores acuáticas y algunos peces. Una imagen suya junto a Jungkook tirados en el cuidado césped mientras tenían un pequeño picnic revoloteó en su mente.
Fresco como lechuga Jimin entró en la cocina, dejándose guiar por el delicioso aroma de algo cocinándose, se sentó en uno de los bancos altos que estaban en la pequeña isla al centro de la cocina y apoyó los codos en la superficie, observando con atención a Jungkook cocinar, la carita de concentración que su novio ponía era encantadora, su boquita se abultaba ligeramente.
—Huele delicioso, ¿Qué estás preparando?— con curiosidad, Jimin dejó que su mirada revoloteara por todo lo que Jungkook tenía en la barra.
—Bibimbap.— respondió únicamente.
El rubio sonrió con la saliva haciéndose agua, también su estómago rugió un poco. Vaya que tenía hambre.
—¿Necesitas un poco de ayuda?
Entre los dos terminaron de cocinar, y mientras la carne terminaba de cocerse Jungkook se fue a duchar.
Rápidamente Jimin sacó algunas fresas, las lavó y puso a desinfectar mientras preparaba un poco de chocolate para cubrirlas.
Jungkook llegó en el momento en que Jimin terminaba de meter las frutillas con chocolate en la nevera. Sirvieron los platos, destaparon una botella de soju y cenaron tranquilamente, bebiendo también mientras conversaban y hacían algunos planes para celebrar su aniversario.
Cuatro años de estar juntos. Cuatro años que se decían fácil, pero no había sido todo así, claro que habían tenido momentos muy buenos, pero también algunos malos, habían tenido dificultades, pero en esos cuatro años estaba la prueba de su amor.
Decidieron llevarse las fresas y una botella más de soju a la habitación, dejaron las cosas en la mesita de noche y se recostaron. Jimin debajo de Jungkook, quien con algunos tragos encima no pudo evitar la tentación.
Besó lentamente a su novio, moviendo su boca con calma, deslizándose hacia su cuello, mordió y lamió la piel antes de succionar, dejando algunas rojizas marcas, marcas que Jimin adoraba ver en su piel.
Jungkook tomó una fresa y la llevó a la boca de Jimin, no obstante, no dejó que el menor la comiera, rozó los labios de su chico con la fruta cubierta de chocolate y Jimin gimoteó, no sabía si el calor que sentía era provocado por el alcohol, o la excitación del momento.
Jungkook permitió que Jimin mordiera el fruto, un poco de dulce jugo frutal se escurrió por la comisura de su boca, jugo que Jungkook lamió y saboreó, suspirando con satisfacción.
Mientras Jimin masticaba tranquilamente, Jungkook dejaba pequeños besos y mordiscos por su cuello y su clavícula, asegurándose de encontrar las zonas erógenas de Jimin y trabajarlas bien con su boca. Entonces, y después de que Jimin hubo tragado el bocado, se dirigió a sus labios, donde besó y continuó mordisqueando con esmero y ahínco.
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• CAPTIVE • 「yoonminkook」
FanfictionEn una bonita casa lejos de la ciudad, Park Jimin y Jeon Jungkook pensaron que pasarían un agradable fin de semana disfrutando su intimidad. Ni en sus peores pesadillas imaginaron lo que ocurriría cuando por casualidad se encuentran con un peculiar...
