MÅNED RUBIUSPLAY

DÍA 13: SOBRENATURAL.

Raúl había llegado a la casa en Noruega que había rentado por dos semanas, había decidido tomar unas pequeñas vacaciones en aquel lugar por los paisajes del mismo, a pesar de que el chico odiaba viajar tanto estaba seguro de que valdría completamente la pena.

. – No se ve tan mal como en las fotos. - Murmuro cuando entra a la casa que sería su hogar temporalmente por más de una noche, el lugar por alguna razón se veía algo triste ante los ojos avellana, pero Auron no sabía cómo expresarlo correctamente de todas formas trataría de arreglarlo un poco más estar más cómodo en su estadía.

Mientras tomaba sus maletas y caminaba hacía las escaleras para dejar las cosas en su habitación y revisar cada aspecto de la casa, no noto que un par de ojos le estaban siguiendo y observando de cerca. Cuando el chico al fin se perdió en el segundo piso, Rubén se materializo flotando por encima de la puerta principal, el chico se veía interesante, mucho más bajo que él y no podía negar que era lindo, las ganas de aparecerse ante él se hicieron presentes en su cuerpo fantasmal, pero rápidamente negó la cabeza, le espantaría un poco antes de hacer aquello como acto para un gran final, de algo estaba seguro todo sería interesante el tiempo que se quedara viviendo en su casa y al menos así ya no estaría tan solo.

Con eso en mente y una sonrisa en su rostro, desapareció de nuevo y empezó a seguirle por las habitaciones para escucharle hablar consigo mismo y quejarse, realmente se estaba muriendo por contestarle, pero sabía que aun no era el momento por lo que en cada instante en el que pudo se resistió.

Auron pensó en limpiar un poco, para poder poner sus cosas personales en un lugar limpio, no es que dudara de las condiciones en que le dieron la casa, pero él prefería asegurarse a que tener que encontrarse algún bicho sobre su ropa o algo parecido, la sola idea le hizo sufrir de escalofríos, negó con la cabeza, era mejor sacarse esa idea de la mente o terminaría como un paranoico los días que estuviera en dicha casa.

Puso manos a la obra y empezó a limpiar desde el primer piso hasta el segundo, hizo una pequeña lista para ir al super después de observar que efectivamente en su refrigerador había un galón de agua y un par de huevos. Cuando termino todo el primer piso, siguió las escaleras y todos los cuartos, encontró repelente para insectos, pero este parecía estar sellado esperaba que fuera porque la casa estaba fumigada y no se necesitaba a tener que pensar a que era usado con frecuencia y es por eso que le dejaron uno nuevo.

Lo ultimo en limpiar fue la habitación donde se estaría quedando, limpio todo hasta el mismo armario donde gracias a una silla encontró una caja en la parte de arriba con curiosidad en él, la bajo para ir hacía la cama y poder observar el contenido. Era un par de documentos al nombre de un tal Rubén Doblas, tal vez alguien que vivió ahí y los olvido, entonces al fondo de dicha caja se encontró una foto. Termino sonrojándose levemente al descubrir que aquel chaval era guapo.

. – Joder, ¿estaría mal que me la quede? – Se pregunto así mismo mientras cerraba la caja, observando la foto con atención. Lo que más le llamaba la atención eran sus ojos, no podía descifrar exactamente el color de estos, el chico parecía ser natal de aquel pueblo, le pareció adorable su gorro de oso y simplemente se rio antes de volver a abrir la caja para querer guardarla.

. – Quédatela. –

Auron frunció el ceño mientras miraba a todos lados, estaba seguro de que había escuchado otra voz en la habitación, pero esto no podía ser cierto después de todo estaba solo. Al final pensó que solo era su subconsciente, pasando sus dedos por encima de la foto suspiro y decidió hacerle caso a aquella voz que claramente había venido de su cabeza. Cerro la caja y la puso en un lugar donde no le molestara y aquella foto la dejo recargada contra la lampara al lado de su cama, era algo extraño, pero había algo en aquel chico aparte de lo guapo que le estaba llamando mucho la atención.