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Cuando finalmente se despertó, estaba completamente curado, y envuelto en una manta, notó que su brazo estaba vendado, pudo ver la luz de la luna escabullirse dentro de la habitación a través de los barrotes de la jaula, iluminando la cara de la persona que le causó todo ese dolor, el cual dormía pacíficamente afuera, pudo notar que habían rastros de lagrimas secas en el rostro de su extraño acompañante, también su respiración era tan débil que podría desaparecer en cualquier momento mientras su boca estaba ligeramente abierta, realmente estaba cansado.

Quizás nunca logre comprenderlo, cuando pensaba que entendía algo siempre le mostraban a la fuerza un dato que rompía en mil pedazos sus teorías en tan solo unos segundos.

"Gracias..."

Sabia que sus palabras no serian escuchadas por lo que no sé preocupo por ello, estaba equivocado de nuevo.

Sintió un par de brazos envolverse alrededor de él y tirar con fuerza hasta que volvió a chocar con las barras de metal, juraba que seguía sufriendo estos golpes cada dos horas su cuerpo estaría lleno de moretones.

Ahí se dio cuenta que estaba envuelto en una especie de abrazo amoroso, había olvidado como se sentía, reconfortante, cálido y agradable.  

Una vez que sintió la humedad en su espalda, su mirada se dirigió al payaso que ahora lloraba, esto no era lo que quería, en el fondo tenia intención de darle un golpe o una bofetada, ¡No hacerlo llorar!

No sabia que decirle ahora, mucho menos que hacer, a las justas logró mover su cuerpo para que quedar cara a cara con su acompañante, aprecio como sus ojos estaban llenos de lagrimas, el maquillaje estaba corriéndose por su rostro, no quería imaginar como estaba su espalda ahora mismo.

Tenia una idea para calmarlo pero había una probabilidad que perdiera su brazo esta vez, ojala no le pasara nada.

Puso una mano en la cabeza del payaso y comenzó a acariciarla suavemente, sus dedos jugueteaban con su cabello que era extrañamente suave, notó que estaba funcionando ya que finalmente logró relajarse por completo hasta que volvió a quedarse dormido.

No tardó en hacer lo mismo a los pocos minutos, solo que esta vez ya no sentía tanto miedo como las otras veces.

Tears  of  happiness【Finalizada】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora