??

670 61 210
                                    

Apenas estaba consciente de lo que sucedió, era como si hubiera despertado de una clase de sueño profundo, sin embargo recordaba perfectamente los acontecimientos, cada detalle, precisamente al escuchar su nombre logró reaccionar.

Sentía todo su cuerpo adormecido, apenas podía caminar, ni siquiera con su experiencia era capaz de equilibrarse, a las justas logró entrar a la habitación de espejos.

Cayó al suelo, todavía sollozando de dolor y horror, solo quería olvidar eso, no quería creer que eso sucedió, ni se percató de que alguien lo estaba observando.

Hasta que simplemente no sintió nada, como si hubiera perdido sus emociones, como si hubiera perdido algo muy importante, algo que lo mantenía cuerdo. Sabia lo que pasaría ahora, demasiado tarde.

De un momento experimentó un subidón de emociones, lo único que buscaba era su propia diversión sin importar cuanto lastime a los demás en el proceso. Estaba extremadamente feliz y emocionado, imaginando todos los posibles juegos que podría probar en su "amigo", eran tantas alternativas que no sabría cual elegir, estuvo pensando durante unos minutos, uno llamó su atención era bastante sencillo y satisfactorio para ambos.

Se acercó a la misma caja fuerte de antes, ahí tenia la costumbre de guardar algunos objetos añadirle más diversión a sus juegos, ya sean objetos filosos, clavos, etc. Ya había hecho esto miles de veces, por eso tenia lo necesario para evitar que su amigo muera justo en los momentos interesantes.

De ahí saco una licuadora que funcionaba con baterías, sabia que el zorro no seria capaz de probarse a si mismo así que iba a darle un pequeño empujón para que se entere de lo que estaba perdiéndose.

Agarró cuidadosamente una de las patas del animal y la coloco dentro del mecanismo del objeto mientras lo encendía con la otra mano, si el menor pudiera gritar se habría escuchado en todo el lugar hasta llegar al bosque pero se aseguraron de que nunca volviera a hacer algún ruido.

Solo pasó un minuto y medio, tuvo que forcejear con el zorro para que se quedara quieto durante el proceso, finalmente se detuvo lo único que quedó de la pata fue un desorden sangriento de huesos rotos y algunos trozos de músculo.

Se enterneció al ver como Foxy lloraba y le rogaba piedad con la mirada, ahí él aprovechó la oportunidad para humillarlo aún más.

Agarró la jarra de la licuadora que contenía la pata del pequeño animal, con una gran sonrisa le entregó la jarra.

"Si no quieres morir desangrado, tendrás que beber todo eso o me asegurare de darte una mejor experiencia con esa herida"

El zorro dudó, pero el dolor y el sangrado eran una horrible agonía, no soportaría más dolor, tomó la jarra y trató de tragarse el contenido de un solo bocado, mala idea, tuvo que luchar contra el impulso de vomitar, ni siquiera podía cubrirse la boca. Comenzaba a marearse realmente, finalmente bebió el resto dejando algunos pedazos de hueso, esta vez no pudo evitarlo y vomitó sobre sí mismo, no pudo detenerlo,  el vómito carmesí siguió fluyendo. Estaba horrorizado, aun quedaban unos huesos, los tragó, sentía como raspaban su garganta, comenzó a ahogarse con una de las piezas, trataba de recuperar aire pero no funcionaba, luego de unos segundos logró pasar junto con los demás. 

El payaso miraba al animal con expresión de satisfacción, simplemente agarra una botella de alcohol medicinal, se acercó al animal y derramó el contenido directamente sobre la herida sin algodón ni nada, comenzó a reírse a carcajadas,  se secó una lagrima y miró al menor con una amplia sonrisa.

"¿Ves? No fue tan complicado" 

















Tears  of  happiness【Finalizada】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora