MI IMPERFECTA VIDA AMOROSA

54

Capítulo 54

Escrito por: Alendra Mac
Wattpad: AleMacAmor

Son casi las cuatro de la tarde y estamos de vuelta en Bahia, he viajado en el coche de André para evitar estar cerca de Gabriel, al llegar los chicos se han ido a una pequeña heladería a la orilla del mar pero yo prefiero estar lo más alejada posible de Demon así que me he dirigido directo al campus universitario, mientras arrastro mi equipaje desganada por el pasillo de los dormitorios recibo un mensaje de Alana.

====Zorrita estoy llegando al hotel, te veo en tu dormitorio en quince minutos. Me he traído todos los pañuelos desechables que he encontrado en el autoservicio, espero que sean suficientes====

Sonrío por su mensaje, Alana suele sacar de mí una sonrisa y hasta carcajadas en los peores momentos de mi vida.

====Gracias lunática, te amo====

Entro a mi dormitorio y me tiro sobre la cama, veo hacia un costado, me encuentro con una imagen de Gabriel en el portarretratos que tengo en mi buró, me  pongo de pie y lo tomo para guardarlo en mi gaveta, me tiro de nuevo a la cama. Cuando estoy por quedarme dormida escucho golpes desesperados a mi puerta, es más que obvio que se trata de Alana.

—Eres peor que un puto dolor de cabeza— dice cuando le abro la puerta, yo finjo una sonrisa y ella me abraza, no aguanto las ganas de llorar así que me deshago por completo.

—Bruta— le digo soltándola y camino hasta mi cama, ambas nos dejamos caer de espaldas en ella.

—Soy toda oídos— dice viendo hacia el techo.

—Ya te he dicho todo por teléfono— me limpio las lágrimas —Te he pedido que vengas porque necesito de tu compañía, tú siempre sabes como alegrarme el día y para que me ayudes a mantenerme firme en mi decisión.

—¿Estás tan clavada del idiota baby Aramburuzabala que necesitas que alguien te confirme que has hecho lo correcto?, estas muy jodida zorrita.

—Lo amo como tú lo has dicho, no es una decisión fácil— mantengo mi vista en el techo.

—Sólo fue un puto beso, dime que si con la profesión de tu hombre tiene que besar a otras modelos, ¿también sería traición?— Alana se sienta arriba de la cama cruzando sus piernas en forma de flor de loto para ver directo hacia mi rostro.

—Sabes que no es lo mismo pero igual me dolería que besara a otra modelo aunque fuese de forma profesional, un beso es un beso— un par de lágrimas se escapan de mis ojos.

—Okay, entonces, ¿por qué carajos aceptaste que se fuera a Nueva York?, si sabias a  que se dedicaría, ¿qué no sería más fácil haberle dicho que no estabas de acuerdo y punto?

—¿Y ser la culpable si se frustraba por no ser modelo?, es un narcisista, vanidoso y creo que jamás me hubiese perdonado si yo hubiese actuado de forma egoísta.

—Okay, ahora dime jamás has sentido atracción por otro chico que no sea Gabriel.

Me siento frente a ella ante su cuestionamiento, parece que me conociera poco, sabe que no soy capaz de fijarme en nadie más cuando estoy comprometida con un chico.

—Me ofendes— doy por respuesta.

—Babosa no te estoy ofendiendo, eres tan pinche mustia que ni siquiera te das cuenta que otros chicos te atraen, ¿qué me dices de Yam?

—¿Qué?— mi semblante pasa de molesta a desconcertada —¿Qué con Yam?, es mi amigo.

—¿Ah, si?, ¿crees que estoy ciega?, cuando te encontré con él en la cocina del departamento de Octavio, te veías muy a gusto junto a él y aquella mirada para nada era la de una amiga pero como te crees tan fiel y perfecta no lo aceptarás, y cuando estaba estudiando aquí y conversamos de tu boca salían más "Yam, Yam, Yam, que Gabriel", te prometo que estaba a punto de pedirte que le hiciéramos un altar a tu amigo Yam— hace señal de comillas al decir lo último.