La graduación

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James:

El tiempo había pasado demasiado deprisa. Las cosas con Lily se me hacían más fáciles de llevar, tal vez era por la confianza que me había ganado con ella, a fin de cuentas, nuestra relación se había formalizado cuando ambos nos presentamos en navidad.

Mi madre estaba muy satisfecha con la chica que me había vuelto loco en el colegio. Según ella, la profecía de los Potter se había cumplido de nuevo.

Me encontraba mirando mi álbum escolar que había empezado en primer año, cuando Sirius me interrumpió.

-¿Es lo que creo qué es? -pregunto inclinándose a mi lado. Sus rizos cubrieron mi vista en cuanto me arrebató mi cuadernillo.

-No puedo creer que aún las conserves -exclamó sorprendido -en mi casa creo quemaron todo lo relacionado a mi casa -concluyó riendo.

La familia Black había sido muy dura con él cuando fue seleccionado para Gryffindor, pero siempre había contado conmigo y los demás para seguir adelante, y lo estaba haciendo muy bien. 

-¿Estas listo para lo que viene, amigo? -me preguntó un poco divertido.

-La verdad es que no -dije sincero -no me imaginé que este día llegará. 

El tener que decirle adiós a la escuela que cuidó de mi desde los 11 años me pegó muy duro.

Y es aún faltaban unas semanas para que eso sucediera.

Después de las vacaciones y el retorno a la escuela, nos dedicamos en cuerpo y alma al estudio, pasar los exámenes era una de mis metas sí quería alcanzar la nota para poder convertirme en Auror, aunque Lily no debía de esforzarse mucho, pues ella ya estaba muy recomendada con sus notas, se negaba a confiarse y pasaba todo el tiempo metida en los libros de defensa. Y a mí me usaba de experimento para comprobar que estuviese en un nivel promedio y aceptable para la prueba.

Los resultados se entregaban antes de la graduación de Hogwarts, aunque mi padre recordaba que en sus tiempos se hacían después, me aterraba que no me aceptarán.

Lily, Sirius y yo teníamos el mismo propósito para nuestros trabajos en el mundo mágico: convertirnos en los mejores aurores. Sin embargo, la familia de Canuto no lo apoyaba, pues tenían unas tradiciones muy arraigadas (eran Slytherin's a fin de cuentas) y con las acciones de mi amigo, resultaba obvio que una vez concluido el colegio sería desterrado de su 'Hogar'. Por otro lado, la familia de Lily estaba a la mar de contenta respecto a su graduación y su trabajo como futura aurora, excepto su hermana, claro, ella siempre estaba despotricando a la adorable Lily.

Pero fuera de eso, todo iba demasiado bien a nuestro gusto.

Teniendo en cuenta la suerte que me cargaba, estaba seguro que, de una u otra manera, mis amigos y yo nos volveríamos a reunir.

Cada uno tomaría caminos diferentes: Remus quería especializarse como profesor, aunque su condición no siempre le favorecería, él sabía cómo arreglárselas. Colagusano según nos había dicho, se iría de viaje con su familia por un año, y pues en ese tiempo buscaría la manera de ganarse la vida, y la verdad le extrañaría. Tenía muy pocas habilidades para sobresalir en el arte de las transformaciones y pociones, pero era muy diestro en otras cosas. Esperaba recibir noticias de él en el futuro.

Las amigas de Lily, por otro lado, se desempeñarían como empresarias por un tiempo, tengo entendido que desde hace mucho tenían la idea fundar un negocio como 'Las tres escobas', pero a su manera, claro.

Al parecer, todo estaba listo para que nos despidiéramos del hogar que habíamos tenido desde hace unos años, a excepción de nosotros.

Los días previos a la clausura nos reuníamos todos los de nuestra generación en la sala común para relatar anécdotas en estos años, y era curioso cómo la mayoría decía algo positivo sobre los Merodeadores o sobre mi relación con Lily.

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