REMUS NO ES UNA BESTIA

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James:

¡Sí! ¡Por fin Lily había aceptado salir conmigo!
Después de todo este tiempo, ella había dicho sí.
Estoy flotando de alegría.
Después de nuestra cita en el lago (si le puedo decir cita) vimos el atardecer juntos; ella ya era mi novia, pero no nos besamos.
Sí, sé que es triste, pero he aguantado siete años para salir con ella, puedo aguantar unos días o incluso semanas para que Lily y yo nos besáramos. Sé que muchas chicas no besan en la primera cita, y bueno, yo no iba a obligarla a hacer algo que ella no quería. Me esforzaría por que nuestra relación durara.
Cuando regresamos a la sala común, ella se fue a su dormitorio y yo al mio. Y en eso me acordé de Sirius y Peter y Remus.
Sí, esta noche había Luna Llena.
Y Remus era un hombre lobo.
Así que salí bajo la capa, ya que Sirius había dejado una nota donde decía: "enamorado, ya sabes donde encontrarnos ;)"
La tarde se había evaporado, y el aire fresco de noviembre traía un augurio según mi profesora de adivinación. Pero eso era algo secundario, ya que en la noche no iba a pasar nada que no hubiese visto antes.

Pero me equivocaba.

Cuando llegué a la Casa de los Gritos (bueno, cuando llegue al claro del bosque, donde se encontraba el sauce) me encontré a una figura; y no, no era ningún profesor auxiliando a Remus, era un estudiante.

Era Snape.

Y se veía decidido a entrar. ¿Qué podía hacer yo? ¿Esperar a que saliera gritando o que le impidiera pasar?
Opté por la primera opción.

Esperé a ver como intentaba persuadir al árbol, y con la facilidad que lo hizo llegue a la conclusión de que alguien le había dicho como hacerlo.
¿Quién era aquel? Era (fue) Sirius.
Él era el único lo suficientemente listo para decirle que hacer en este árbol. Y digo "listo" por que en realidad no lo era.
Si Snape descubría lo que había abajo y abría su boca, pues, los cinco estaríamos en problemas. Y graves.
Y no era justo por que yo había comenzado a salir con Lily y si tenía problemas y ella se enteraba me iba a ir mal.
Nunca hay que dudar de Quejicus. Si pudo persuadir al árbol, puede hacer cualquier cosa.
Snape entro al túnel que llevaba a la Casa de los Gritos, y adivinen ¿qué? Sí, gritó.
Pero esto es un asunto serio y mi sangre estaba congelada del susto ya que el irresponsable de mi amigo estaba durmiendo y no oyó cuando éste pisó a Peter (él estaba en el suelo) y eso hizo que Lunático se alterará.
Y claro,  intento hechizar al lobo pero Remus no se dejó. Yo no podía quedarme de brazos cruzados, así que me quite la capa, y el me vio, por lógica me dijo:

—¡Potter!

Pero no respondí, le empuje hacia la salida, pero éste seguía pasmado en mi amigo. Sirius se convirtió, y guió a Quejicus al claro, mientras yo intentaba calmar a Lunático, y Peter se recuperaba.
Cuando Remus se calmo de nuevo salí hacia Sirius y lo encontré "tranquilizando" a Snape.

—¡Son unos maniáticos, ¿como se atreven a tener una bestia encerrada cerca de la escuela?!

—REMUS NO ES UNA BESTIA-le aclaré- y para tu información nadie te pidió que vinieras, y ya que me acuerdo, deberías agradecerle el haberte sacado de allí, si no estarías muerto.

—¿Agradecerte a ti? JAJAJA, prefiero ser expulsado de Hogwarts antes que agradecerte a ti.

—¿Asi? Bueno, tienes suerte de que hoy este de buen humor, si estuviese de malas te haría comer tierra.

Al decirle eso se quedo sin palabras.

—Sera mejor que regreses al castillo, si uno de los profesor te ve, estarás en problemas.

—Ustedes son los que están en problemas, ¿que creen que dirá Dumbledore cuando se entere de que ocultan una bestia en el castillo? Preparence para su expulsión.

Y dando media vuelta se fue, si el pobre idiota supiera que el director ya estaba enterado pero no sabia sobre nosotrosbueno, ahí si había problema y del grande.
Después de este incidente con Sirius ya que el fue quien tuvo la culpa, se regreso al castillo y yo cuide de Remus.
Eso me dio para pensar lo que paso.

En lo que paso con Lily.

Lily.

Suspire.

Ella están hermosa,  tan linda, inteligente, no se que hubiese hecho sin ella en estos años.
El pensar que se entere de esto, que serían una estupidez, ya que Quejicus no iría de chismoso con el director.

****

Y pensar que la maestra de adivinación me lo dijo.

****

Era la ultima clase que tenía en el día, y no había visto a Lily en esta hora, ¿donde se había metido? No lo se, pero Remus igual estaba ausente; sospecho que los llamaron a un junta de prefectos y todo eso, o bien, Snape había ido de bocón con Dumbledore.
Pero el caso era que Lily estaba ausente.

Al concluir la clase nos dirigimos a nuestro dormitorio y allí se encontraba Lupin, parecía cansado ya que no voltio a vernos en cuanto llegamos.

—¿Porque desaparecieron? -pregunto Sirius, refiriéndose a Lily y él.

—El director quería hablar con nosotros -repuso; al oír esto se me heló la sangre.

—¿De qué les habló Dumbledore? -pregunté.

—Bueno... -quiso decir Remus.

Y hablo de que "quiso decir" porque fue interrumpido por alguien.

¿Quién era ese alguien?

Sí.

Era Lily.





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