sparks fly [h.s]

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You > chapel
Wildest dreams (tv) > Taylor Swift
Kiss me > Ed Sheeran
Adore You > Harry Styles

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No había visto a Harry en tres días desde que me quedé a dormir en su casa. Él estaba ocupado con su trabajo y me había llamado el día anterior diciéndome que se sentía mejor gracias a el cuidado que le había brindado. Y no quería admitirlo pero deseaba verlo, lo extrañaba y solo habían pasado pocos días. Me estaba acostumbrando a su constante compañía y no podía permitirme eso.

La mañana que desperté en casa de Harry él no se encontraba en la cama, pero supe que estaba en el apartamento porque escuché ruidos en la cocina. Harry había amanecido como nuevo, seguía teniendo algo de gripe pero la fiebre y dolor de cabeza había desaparecido. Él me recibió con una sonrisa y una taza de café cuando me vio entrar a la pequeña cocina. Estaba preparando huevos revueltos con tocino y rebanadas de pan con mantequilla de maní y banana en rodajas. Fue una maravilla verlo moverse en la cocina con la espátula en manos mientras me hablaba sobre cualquier cosa y me impedía levantarme para a ayudarle. Y como al parecer quedamos con hambre, nos comimos los pedazos de pizza que habían sobrado de la noche anterior.

No me quedé mucho tiempo en su apartamento porque él debía ir a trabajar, aunque le insistí en que guardara reposo al menos un día más él me dijo que no podía permitirse faltar, ya había faltado el día anterior porque se sentía muy mal y me aseguró que se encontraba mucho mejor, que no me preocupara. Me llevó a mi casa montando mi bici en la parte trasera de su auto y luego pasé toda la mañana y parte de la tarde cuando fui a la plaza a dibujar pensando en Harry y lo que pasó (y no pasó).

Y lo que juré haber escuchado en mi estado inconsiste pero llegué a la conclusión de que estaba soñando. "Te deseo tanto..."

Mi cabeza era un lío y mi nonna notaba lo distraída que estaba.

—¿Estás bien? —preguntó ella sirviéndome café.

—Sí, nonna. Gracias —mentí y le di un sorbo al capuccino, ella no se movió de su lugar y me miraba sin créerme.

—¿Y Harry?

—Ocupado con su trabajo pero está bien —respondí con una leve sonrisa.

—Se gustan.

—¿Qué? —lancé una risa nerviosa y mi abuela alzó una ceja con picardía— Somos amigos.

—¿Y qué? Lo son pero se gustan —ella respondió como si fuese la respuesta más obvia del mundo y se sentó en la silla mirándome atenta. Bueno, tal vez sí lo era de mi parte, ¿Pero Harry? Al principio pensé que le atraía pero ya no estoy muy segura.

—Nonna, no empieces —evité su mirada y me crucé de brazos.— Además, así nos gustemos no se puede. Se va a mitad de Septiembre.

—¿Entonces si te gusta?

—¡Nonna! —mascullé exasperada y ella sonrió cómplice. Solté un suspiro y me froté el rostro— Sí, sí me gusta.

—Lo sabía amor, conozco esos ojitos y brillan cada vez que ves a Harry —dijo ella y yo gemí avergonzada ¿Harry también lo había notado?— Y aunque se vaya, aún queda tiempo y eres joven, está bien que de vez en cuando tengas un amorío y te diviertas viviendo el momento, ya sabes a lo que me refiero.

Mi abuela movió las cejas sugestivamente y yo solté una carcajada sonrojándome. Lo bueno es que podía hablar de casi cualquier cosa con mi nonna, era muy mente abierta. Ella tenía razón y yo obviamente ya lo había pensando, pero era una persona que se ataba fácil a la gente y tenía algo de miedo que Harry me llegara a gustar mucho más de lo que ya lo hacía y después me tocara verlo partir. Lo iba a extrañar bastante.