1. "Bonito trasero"

56 5 1
                                    


Llevaba exactamente nueve horas (desde que se acabó mi turno) mirando la pantalla, entrando en millones de direcciones y los links que me había recomendado Yugyeom. Aquello era demasiado difícil... Básicamente buscar un alfiler en un pajar ¿Cómo se me había podido ocurrir aceptar aquella misión de mierda?

Bueno, después de todo era un simple policía ¿No? Jefe del departamento de criminología ni más ni menos...
Podría haberle encasquetado esta tarea a él, pero me dió pena, trabajaba demasiado y se merecía un respiro.

Mis párpados comenzaban a cerrarse, me permití unos segundos para respirar hondo.

-Joder...- abrí los ojos de nuevo, una notificación-.

Desbloqueé la pantalla, cinco llamadas perdidas. No pude evitar suspirar. Marqué su número, llamándole de vuelta, en cuanto lo cogió esperé a que hablara.

-He encontrado algo que te puede ayudar- dijo el coreano al otro lado del teléfono-.

Me levanté como un rayo, casi tirando la silla en la que había permanecido sentado por lo que podría considerarse una eternidad.

- Kim, no estoy para bromas...-.

-¡De verdad! Compruébalo tú mismo, te lo acabo de mandar, de momento es todo lo que he podido conseguir....-.

Tomé aire.

-No te preocupes, ya me encargaré yo del resto...-.

-Venga- rió el menor de ellos- déjalo por ahora, ya nos encargaremos del resto mañana-.

Lo medité unos segundos.

-Va, mañana lo hablamos - ambos sabíamos que no dormiría hasta tener algo claro, aún así no volvió a insistir-.

-Hasta mañana...-.

Esperé a que colgara y deposité el teléfono de vuelta a la mesa.

Me volví a sentar ahora abriendo el nuevo correo que tenía adjunto...


-¿Anuncios?- anuncios de matones y asesinos a sueldo para ser exactos-.

En un principio pensé que era una broma de mal gusto, pero después revisé el navegador.

Tails. Uno que protege tu anonimato y privacidad mientras navegas por la web, uno que te deja ver cualquier rincón de internet sin censura alguna.

Ya os podéis hacer una idea de por donde voy...

Frente a mí se encontraban todos los perfiles de todos los que habían sido contratados por el grupo terrorista "ODD".

-Bravo...- murmuré sonriendo-.

Después de esto tendría que invitar al chaval a una cerveza por lo menos ¿No?

♕♕♕

El pelirrojo volvió a examinarme de pies a cabeza por tercera vez en el último minuto.

Se hizo el silencio.

-Pues muy pinta de tío no tienes la verdad... Diana- dijo apoyando sus codos en la mesa releyendo la ficha con mi información-.

-No lo soy- respondí mirándole directamente a los ojos- ¿Supone un problema?-.

Él solo se encogió de hombros, parecía conocer hasta menos que yo sobre su propio trabajo.

-Aún así en tu anuncio dabas a entender que lo eras... -.

-Es muy difícil conseguir trabajos así siendo una mujer-.

No lo negó, sabía igual que yo cómo iban las cosas.


Se inclinó hacia delante y habló.


-Muéstrame lo que sabes hacer-.

♕♕♕

Metí mi dinero en la máquina expendedora, se me habían acabado los cigarrillos.

-¿Otra más? Ya te has fumado un paquete en lo que llevamos de semana Jackson...-.

-Cuántas veces tengo que decirte que no cuestiones a tu jefe- dije girándome solo lo justo para darle un golpe en el hombro, a lo que él respondió con quejas-.

-No sé para qué me preocupo, si al final vas a morir de cáncer de pulmón en vez de por un balazo, impresionante- habló la jirafa mientras me observaba marcar los dígitos en el teclado del artefacto-.

Me agaché a sacar la cajetilla, justo en ese momento entró Jinyoung por la puerta.

-Bonito trasero- comentó café en mano-.

-Lo sé- dije dándome la vuelta quedando a escasos centímetros de sus labios-.

Pasé una mano por su nuca totalmente dispuesto a besarle pero...


-¿Queréis dejar los besos para otro momento? Son las siete de la mañana no quiero vomitar el desayuno...-.

Los dos lo miramos de tal manera que el menor no pudo más que rodar los ojos.

-Luego te veo- dijo el chico con el café despidiéndose no sin antes dejar un beso sobre mi mejilla y susurrar- tenemos muchas cosas de las que hablar...- ambos sabíamos a qué se refería-.

Dicho esto salió de la oficina. Yugyeom me miraba con reproche todavía de brazos cruzados.

-¿Qué? ¿Tan mal te cae?-.

-No es que me caiga mal, es solo que desde que vino no haces más que pensar en cosas que no son tu trabajo-.

-¿Cosas como qué?-.

-Jackson, llevamos un mes sin resolver este caso, a este ritmo la directora te acabará echando, y a mí contigo-.

Suspiré, Yugyeom tenía razón.

-Ok, prometo concentrarme- dije guardando lo que había comprado en el bolsillo trasero- ahora hablemos de esos anuncios-.

♕♕♕

Gracias a Dios atrapé a tiempo la cuchilla del pelirrojo impidiendo que esta me dejara tuerta. Jadeé.

Después de todo aquel tío me estaba dando más guerra de la que me gustaría admitir.

Este volvió a aproximarse daga en mano, aquella escena estaba lejos de ser una pelea callejera cualquiera.

Decidí saltar y golpear su cabeza de una patada. Al parecer no lo vió venir, acabando tumbado boca abajo en el suelo.

Antes de que pudiera moverse pisé el brazo con el que sostenía el arma, e inmovilicé el otro apoyándome sobre su espalda. Ya no le quedaban fuerzas como para resistirse.

Tras unos segundos de forcejeo dejó de insistir.

-Ok... el puesto es tuyo...- habló entre cansado y pesaroso-.

Al instante lo solté, ayudándole a levantarse. Ambos nos tomamos unos segundos para recuperar el aliento.

-Bueno.., ahora que vamos a ser compañeros debería decirte mi nombre- dijo sonriendo de lado- me llamo Mark, Mark Tuan-.

❝ 𝘈 𝘥𝘦𝘮𝘰𝘯'𝘴 𝘩𝘦𝘢𝘳𝘵 » 𝗝𝗶𝗻𝘆𝗼𝘂𝗻𝗴©Where stories live. Discover now