Capítulo 65

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        POV ANASTASIA

Al bajar a la cocina por un vaso con agua veo que ya casi está lista la comida, y aunque se ve delicioso, creo que Elena se merece un muy necesario escarmiento por querer ponerme celosa y pretender competir conmigo...

Maldita, presentándole mujeres a Christian para que sean sus sumisa. Pero esto no se quedará así. Elena debe pagar por lo que ha hecho.

Voy por mi móvil y le llamo a Taylor, le envío una foto de la comida que está haciendo la empleada de Elena y le pido que me envíe eso para cenar. Sé que Taylor ignora que Elena es alérgica al gluten y por eso es que no notará que la comida tiene algo de especial. Me promete que la hará llegar en unos minutos y que espere por la puerta trasera de la casa.

Tras diez minutos llega un mensaje de Taylor diciéndome que está uno de sus hombres con un servicio para un solo comenzal. Corro por el paquete y me encuentro al abrir la puerta con un enorme gorila de ojos verdes que me tiende una pequeña caja del Fairmont Olympic y al recibirle el encargo sin más desaparece en la oscuridad.

Eso fue raro y divertido.

Veo que la empleada está sirviendo y noto que a Elena siempre le sirve en platos negros. Sale de la cocina y la escucho hablar. También escucho a la bruja. Ya regresó, seguramente se siente triunfante por qué Christian aceptó la chica. Ya verás lo que vas a cenar conmigo. Cambio la comida y pongo lo que me envió Taylor.

Corro por la escalera de servicio y subo a mi habitación. Tras cerrar la puerta escondo el paquete vacío para tirarlo de camino a la escuela y me siento frente a la Mac para fingir que hago la tarea.

Me sorprende que se abra la puerta y al levantar la mirada de la pantalla veo a Elena de pie frente a mi.

—Niña, te mereces una educación especial. Y yo te la voy a dar.

—¿Perdón?

Gira la Mac para mirar lo que hacía y ve que hay un ensayo sobre un libro que me ha ayudado a leer Christian y que ya casi está terminado. Lo lee y parece asqueada.

—Odio a los escritores románticos— gruñe y vuelve a girar la Mac frente a mi.

—¿Sabe leer?— le pregunto burlona.

—Si.

—¡Mire! Si me lo hubieran dicho no lo creería...

—¿Conoces a Marqués de Sade?— me pregunta de pronto.

—No.

—Eso es mejor que la basura cursi que estás leyendo para la escuela. De hecho, lo leerás para entender a que me refiero con "educación especial" para ti, niña— me responde pensativa.

—Eh... ¿Ok?— admito confundida. No entiendo a qué se refiere con eso, pero dejaré que las cosas sigan su curso para saber que pretende.

— Supongo que te mueres por saber cómo me fue Christian ¿Verdad?

— No me interesa— finjo indiferencia.

— Claro que te interesa. Es hora de cenar. Vamos. — No me dirá nada, pero durante la cena empezarás a burlarte y jactarte que Christian tiene una nueva sumisa.

Maldita.

Me pongo de pie y salgo de la habitación. Noto que se queda de pie en la puerta y escudriña mi habitación esperando encontrar algo para reclamar o molestarme, pero al ver que todo lo tengo en orden, cierra la puerta.

—Camina recta, y levanta la cara. Debes mostrarte segura al caminar. Siempre— me dice de pronto Elena encajando una de sus largas uñas sobre mi espalda.

Anastasia; Mi Dulce DesafíoWhere stories live. Discover now