Cap. 6

4.6K 242 13
                                    

Selena´s POV

Al abrir mis ojos pude notar un color esmeralda que se posaba en mí, tan intensamente. Al observar cuidadosamente logré conseguir a su causante. Me encontraba acostada en un banco con mi cabeza posada en sus piernas mientras Harry me miraba preocupado, llevaba ciertos moretones en la cara junto a algunos raspones y ahí recordé el motivo de estar así con él.

Me levanté de sus piernas quedando solo sentada en el banco, sus ojos me miraron impacientes y su ceño se frunció de repente. Me gire a mirar el lugar donde estábamos, era un parque solitario, con una laguna que se podía atravesar por un puente en el centro de esta.

--Hola-- dice con esa ronca voz de siempre --¿Estás bien?

--Si-- digo volviendo mi vista a su rostro, ahora más calmado.

Parece inquieto, su mirada me recorre el cuerpo una y otra vez, hace que esas incómodas mariposas en mi estómago se vuelvan águilas. Se levanta rápidamente y sin dejarme hablar me hala hacia su pecho. Su mirada se posa en mis labios pero por algún motivo después de ceder, comienza a caminar rápido, conmigo detrás de él.

--Vamos-- dice caminando aún más rápido, casi me arrastra por todo el parque. Me sujeta muy fuerte y mi muñeca comienza a arder.

--Auch-- me quejo, pero parece no escuchar. --¿Qué tu madre no te enseñó a tratar a las mujeres?

--¡No! Estaba muy ocupada cortándose-- dice. Su caminata se detiene de inmediato. Y después de él, yo. ¿Qué fue lo que dijo?

Se gira sobre sus pies y se acerca a mi furioso y con sus ojos rojos.

--No vuelvas a mencionar a mi madre-- advierte. Mi corazón se encoje y no tengo palabras.

--Y-Yo-- intento decir, pero fallo y parece molestarle más.

--¡No quiero tu lástima! ¡Ni la de nadie!

Bajo la mirada y una pequeña lágrima se escapa de mis ojos. Harry parece notarlo y me toma de mi mentón y lo levante, haciéndome mirarlo.

Sin decir más se acerca a mí y atrapa mis labios en un salvaje y apasionado beso. Sus labios se movían sobre los míos con tanta necesidad que no necesité otra prueba más para seguirlo. Lo acerqué más a mí rodeando su cuello con mis brazos.

Para él esto fue una señal, no tardó mucho en rodear mi cintura con sus brazos, levándome y haciendo rodear su cintura con mis piernas. Lo acerqué más a mí, si era eso posible.

Harry me correspondió caminando a ciegas hasta hacer chocar mi espalda con un árbol. Sus manos bajaron a mi blusa y las mías a su cabello. El beso se hacía cada vez con más necesidad, suave y con pasión.

Sus manos subieron por dentro de mi blusa, por todo mi abdomen hasta mis senos, causando un extremo escalofrío en todo mi cuerpo. Pero hice lo que debía y me baje de su cintura, como lo empuje un poco de mí. Pero no se movió ni un centímetro, su cuerpo se tensó aún más y aprovechó el momento para introducir su lengua en mi boca.

Por más oxígeno que necesitara, no quería alejarme. Pero lo hice, empuje lo más fuerte que pude y este se movió, dándome algo de espacio.

--Y-Yo—tartamudee.

--Sh…-- susurró y con su dedo índice me calló. Sus labios estaban rojos de tanta interacción. Debo suponer que los míos están iguales o peores.

--Recuerda-- avisa –Tu hermano debe saberlo.

Me toma del brazo y vuelve a caminar hasta el final del parque, donde está un auto deportivo. Harry saca las llaves del auto de su bolsillo y al pulsar un botón, el seguro del auto abre.

Subimos al auto y Harry me dejó afuera de mi apartamento, cuando íbamos a mitad de camino, comenzó a llover. Subí rápido los escalones hasta encontrarme con el portero, lo saludé y sentí que mi teléfono vibró. Número desconocido.

Que extraño.

 Atiendo.

– ¿Hola?

No se escuchaba nada.

– ¿Harry?– pregunté, pero no hubo respuesta. Mire de nuevo la pantalla de mi teléfono y ya la persona, había colgado.

Entré a la recepción del edificio y subí al ascensor. Al entrar por la puerta de mi departamento, noté a Zayn viendo la TV. Este al oír el ruido de las llaves, se giró a verme. Parecía enojado.

– ¿Dónde estabas? –preguntó levantándose del sillón y caminando hasta estar frente a mí.

– Salí a caminar –respondo y elevo mis manos al aire.

–Claro –dice dudoso –Supongo que por caminar te refieres a, ir con Demi a “El Almacén” a ver esas carreras que tanto te he prohibido –dice mirándome fijamente.

Suspiro en manera de derrota. ¿Para qué mentir? De cualquier modo lo sabrá.

–Voy a mi habitación –tomo algo de comer del refrigerador y camino hasta mi habitación. Junto antes de entrar, abro la puerta y me detengo.

– ¡Dile a Liam que te venga a visitar más seguido a ver si se te quita el mal humor! –grito y cierro la puerta antes de escuchar a Zayn golpearla.

–Abre –advierte.

–No –entro en el baño de mi habitación y espero a que Zayn se valla.

– ¡Eres una zorra! –grita.

No puedo creer que haya dicho eso. Salgo de mi habitación y al verlo este se acerca a mí y yo a él, cuando lo está lo suficiente, golpeo con mi mano su mejilla lo más fuerte que puedo. Este se paraliza y se acaricia la mejilla, mientras yo no puedo evitar llorar.

–Selena… –dice acercándose –Lo siento.

Niego y lo empujo  –Si lo dijiste, lo sientes –dije y salí del apartamento. No tenía a donde ir, nadie con quién hablar. Demi estaría ocupada con sus padres, Louis no sé dónde estará. A Liam no lo quiero ver ni en pintura, por su culpa me dijeron zorra.

Bajo la lluvia y con sólo mi teléfono y una sudadera, me coloqué la capucha y camine sin ningún rumbo. Hasta encontrarme en un parque. Todo mojado por la lluvia, los columpios se movían por la fuerte brisa fría, al igual que la rueda. Me senté en un columpio y comencé a mecerme.

El viento golpeaba mi cara y mis zapatos se llenaban de tierra en contacto con el suelo. Sólo había una salida. Tomé mi teléfono, y con cuidado de que no se mojera marqué el número.

– ¿Hola? –pregunto.

–Hola Sel –contesta Demi.

–Oye… ¿Estás ocupada?

–Sí, lo siento Sel.

–Como lo sospeché –pensé por un momento  –Adiós.

Después de despedirse, Demi colgó.

Continué meciéndome en el columpio y ya con ganas de irme, de entrar en calor otra vez, quitarme esta ropa y tomar una ducha caliente, me detengo, pero ciento unas manos calientes que me detiene.

–¿Te ayudo?

Maniac |H. S.|Where stories live. Discover now