Te amaré por 1000 años mas. (GAY)

Capítulo 13

Poco a poco me iba acostumbrando a sentir dolor, me estaba convirtiendo en un masoquista, No dejaba de visitar a Adrian por lo tanto tenía que verlo a el y a Laura juntos. La noche de fin de año había llegado, sólo quería que todo acabara, En el momento de decirle a todas las personas cercanas a ti "Feliz año" yo solo quería que una persona llegara me abrazara y me dijera que todo iba a estar bien, necesitaba su olor y su presencia cerca de mi, si, quería que Adrian me abrazara y empezar un nuevo año feliz pero sólo pude verlo abrazando a Laura para desearle el feliz año nuevo, luego se dirigió hacia mi, sólo me dio su mano y dijo "Feliz año".

Ya no lo soportaba ¿porque yo tengo que hacer que mi vida sea tan miserable?

-Esa misma noche en casa de los gemelos habían colocado mesas con comidas y cócteles en el patio, luego de emborracharme me acerque a Adrian y le dije: Eres mi gran amor secreto, el solo me sonrió y me abrazo, Cuando creía que ya nada me podría hacer más daño se acercó Adrian y dijo;- "Josh necesito un gran favor, entrare a mi habitación con Laura, puedes quedarte en la puerta, y si llega alguien sólo toca, puedes?.

Aún así con el alma rota pude contestar;-"Lo que quieras"

No soportaba saber o imaginar lo que hacían, ¿en realidad Adrian perderá su virginidad con mi sobrina? No lo resistía, y ¿Laura? perderá su virginidad a los 13 años? No es justo para ella, pero yo, yo soy un simple idiota llorando en la puerta de una habitación donde dentro de esa habitación se encuentra el amor de mi vida besándose o que se yo que más hace con mi sobrina, Mis ojos lloraban como nunca antes, mi corazón latía muy fuerte, sentía unas ganas de salir corriendo y desaparecer. Luego de una hora salió Laura, al verla le dije;-Creo que es hora de irnos a casa. seguido de tomarla por la mano, En ese instante salió Adrian despidiéndose de mi, no fui capaz de darle la cara, sólo me marche.

Al llegar me acosté en la cama a llorar, no podía sentir tanto dolor, creo que enamorarse sólo apesta, pensaba en algún día, ese día el me va extrañar, en ese día que yo le haga falta y muy dentro de el sienta amor por mi. Laura entro en la habitación y me vio hecho pedazos, al verla sólo la abrace, le dije que la amaba, que ella tenía derecho a ser feliz con la persona que yo más amaba en el mundo. Ella solo dijo;- "Me siento la peor persona en todo el mundo, pregunte si ya no sentías nada por el, aún así pensando que lo que decías era real jamás debí hacer lo que hice Josh, su encanto me consumió e hice cosas que no debí hacer, tranquilo que en su habitación no sucedió nada, el quería tener relaciones pero no quise, Josh, no se como hacer que me perdones, te amo y no quiero que me odies."Dijo Laura con Lágrimas en los ojos.

-"No te preocupes Laura, todo esta bien, sólo fue el cóctel que hizo que me sintiera sensible, ve y duerme que es tarde." -Le dije mientras ella me limpiaba las lágrimas. Habían pasado semanas y Laura y Adrian no seguían saliendo, me calmaba un poco pero recordar todo me volvía a empujar a un agujero de dolor y llantos.

-Luego de un mes Adrian y José seguían yendo a la reunión de jóvenes cristianos, un día me decidí a acompañarlos, quería acercarme a Dios, ya que no podía contarle lo que sentía a nadie quería desahogarme con el, al llegar habían 2 chicas nuevas, la última vez que fui no estaban, Una de ellas anteriormente había salido con José, Lo supe porque los había visto anteriormente juntos en fotografías, la otra chica no la conocía, pero si notaba las miradas que ella y Adrian tenían, Esa día solo me concentre en estar conectado con Dios y tratar de limpiar todos mis dolores. Al llegar a casa solo me acosté en mi cama a pensar, estaba triste, veía que todas mis amistades que la mayoría tenía mi edad se veían bastante felices, ¿porque yo no puedo ser feliz como ellos? ¿Porque mi felicidad tenía que depender de un imbécil que lo único que hace es hacerme daño?.

Luego de un rato entró mi madre a mi habitación, se sentó a mi lado y acarició mi cabello diciéndome;-"Mi niño, cuanto no quisiera verte feliz, cuando llegas puedo ver tu cara y notar que te sucede algo, es difícil ver a un hijo triste y no saber porque, se que nuestra comunicación es mala, siento que cada vez me abandonas más, se que estas creciendo hijo pero te extraño, extraño ver tu sonrisa, tus ocurrencias, extraño verte feliz, todo esto es por uno de los gemelos verdad?"

No sabía que responder, estaba helado, ¿mi madre sabía todo? ¿Cómo? No puedo creerlo, entre tanta confusión dije;-"No mamá, porque dices eso?"

-"¿Crees que no veo tu cara de felicidad cada vez que estas por salir de aquí para irte para allá? Y se que esa felicidad no es por ver a tu papá, tu nunca te habías comportado así, y además, ¿Crees que la madre de esos niños es tan buena como crees? Pues no hijo, esa señora de un tiempo para acá le dice a todos los que viven por allí que tu convertiste a sus hijos en "maricones" que tu y uno de sus hijos están saliendo, Crees que ella siendo una buena madre va a especular así de su propio hijo? Todos esos cuentos que ella dice yo me entero porque hay muchas personas allá que me cuentan todo, Josh, yo solo quiero que te alejes de todas esas personas que sólo quieren hacerte daño Porfavor"-Dijo mi mamá angustiada. -"Te lo prometo mamá, disculpa por alejarme tanto, te prometo que todo cambiara, te amo con toda mi vida mamá".

-Habían pasado semanas sin ver a Adrian, un día no pude resistir mis ganas de verlo y me dirigí a su casa, al llegar estaba saliendo la chica que intercambiaba miradas con él el día que fui a la reunión de jóvenes cristianos.

-"Andrea, te presento a mi mejor amigo."

Al darle la mano y sonreír hipócritamente Ella dijo;- "Mucho gusto Josh, me llamo Andrea soy la novia de Adrian" -"El gusto es mío Andrea, que tengas una bonita tarde";- Dije mientras ella se marchaba dejándonos solos a Adrian y a mi.

-"Josh, no vas a creer que paso, ven entra a la casa que muero por contarte"-Dijo Adrian muy animado.

-Al llegar dijo;-"Acabo de tener relaciones sexuales con Andrea, Ya no soy virgen, y lo mejor es que a ella le gusto y no supo que era mi primera vez, Josh es lo mejor que pude haber sentido en mi vida-Dijo Adrián seguido de darme un abrazo bastante fuerte.

Justo en ese momento cuando Adrian y yo estábamos abrazados llegó la madre de Adrian.

-"¿Que mierdas es esto Adrian? Te dije que con este niño no te quería ver más, te quedas en tu habitación y le dices a tu amigo que se largue de aquí"-Dijo la madre de Adrian gritando con un tono de voz que todas las casas a los alrededores podrían escuchar con claridad lo que ella decía. Salí corriendo como jamás había corrido, llegue a casa de mi papá y por suerte no estaba, estaba tan asustado y tan molesto porque Adrian había tenido sexo con Andrea, en realidad cuando un problema se iba, llegaba otro, esa era mi vida. Pasó una hora después de aquel mal momento que ocurrió cuando escuche el auto de mi padre llegar, note que había tardado mucho al entrar a la casa, habían pasado más de 35 minutos desde que mi papá había llegado pero no había entrado a la casa y no sabía que había ocurrido.

Al entrar sólo me vio y dijo;- "Recoge toda la ropa que tengas aquí, voy a llevarte a tu casa."

Mi corazón estaba a punto de estallar de tantos nervios que sentía, en ese momento pensé que algún vecino le había comentado algo y que estaba enojado por eso, mi papá era bastante homofóbico como para aceptar mi condición sexual. Al recoger todo lo que tenía en la habitación de mi papá me subí a su auto, en seguida el dijo;- "La mamá de los gemelos ha hablado conmigo Josh, me ha contado que tu y su hijo Adrian están teniendo una relación, según ella muchas personas al rededor de la urbanización los han visto a ti y a el besándose en la calle a altas horas de la noche, ella está muy preocupada por ti y por su hijo y me pidió que te llevara a un Psicólogo porque es gracias a ti que su hijo había tenido esos comportamientos"

No podía creer lo que estaba escuchando, mi cara se tornó pálida, mis labios estaban blancos, tenía miedo de sentirme tan frágil e indefenso como cuando me sentía en aquellos tiempos de mi niñez que cuando me caía gritaba igual que una niña, o cuando colocaba mis manos en mi cintura el me golpeaba diciéndome que yo tenía que ser un "varón".