※ Para Jeon JungKook no es difícil conseguir novio.
Solo que el quiere un novio rico, no importa si es excesivamente mayor que él.
Pero... en el barrio donde vive, solo hay pobres como él. ※
✧ Pareja principal Vkook
✧ Alto contenido sexual
✧ No...
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Abro ampliamente mis piernas y mi diestra va a mi pene que sin pudor alguno, la masturbo mirando sin sigilo y lujuriosamente al hombre adinerado con quien me voy a acostar.
«Sí, después de la cita no programada. Al salir de la cafetería vinimos a este hotel, La Fondue. Donde el Sr. Kim Taehyung reservó entradas para un evento de apertura. No contentos con el calor que emanaba nuestros cuerpos por los bailes sugestivos, decidimos reservar una habitación y convertir esta cita y noche en algo único, magnífico e inolvidable. Cócteles finos, diversión y mucha lascivia se respira en este majestuoso lugar. Por mi lado, al diablo acostarme con otro por más amor que sienta a mi novio. Al final Hoseok no va a cubrir lo que a mí me hace falta».
Siento un palpitar en mi vientre bajo que de lleno quiere desfogar las endorfinas que hace tiempo no las libero— soy un mitómano profesional— pero debo aguantar, no quiero parecer un niño precoz.
— Mierda lindura, que linda entrada rosadita tienes.
Kim Taehyung, pasa su lengua por su labio inferior y las pupilas de sus ojos, están que expulsan lujuria y dilatación. Mientras él está en plan de retorcerse por querer tocarme, yo sigo masturbándome sin parar. Mis manos habilidosas— por la constante práctica con Hoseok— suben y bajan desde el centro de mi pene hasta mi prepucio. Todo en una situación tan morbosa pero con un detonante de inocencia.
Hastiado de aquello y reteniendo un orgasmo, detengo el movimiento y me volteo, dando la cara hacia las almohadas blancas y mi trasero mirando sin sonrojo alguno el rostro del castaño, que estoy seguro, ya se incendió la antorcha.
Un dígito se introduce en mi entrada y suavemente dibuja un raspado circular. Muevo mi cintura y cadera alzando en sobremanera mi culo, para que el tipo se embellezca con la gran vista y coyuntura. En la misma posición simulo un montaje. Es lento como el futuro y es rápido como una bala. Es placentero como el vino y es crimen por lo prohibido.
De pronto siento una respiración pesada en mi nuca y unas grandes manos se apoderan de mi cintura.
— No Kim... Aún no... déjame jugar.
Aparto las manos del hombre castaño dorado y sonrío coquetamente. Él me mira expectante y ansioso de lo que voy a realizar. Me paro en la cama e inicio moviendo mi cuerpo sensualmente. Mi mano pasa sutilmente por mi cintura y mi cabeza va hacia atrás suavemente.
Mis manos serpentean por toda mi piel y va marcando ligeramente los movimientos eróticos. En un momento me posiciono en el respaldar de la cama y una pierna la levanto sensualmente, dejando a la vista mi entrada e induciendo todo lo que se avecina en la noche.
La luna brilla en la oscuridad, aquel fulgor que brinda calidez y recuerdos. Tanto como Jungkook anhela...
