La Caída De Absalón Station ©

❂ CAPÍTULO I ❂ El discurso

En la constelación de Ofiuco, existía un sistema planetario denominado Diáspora, donde se hallaba el planeta Bhrythed mayormente compuesto de agua y pocas superficies sólidas, dicho planeta albergaba un reino denominado WaterWing muy amplio con edificaciones destacaban por organizarse de una complejidad técnica cubierta de cerámica, mosaicos o azulejos, piedras esculpidas y mármoles tallados con cúpulas bulbiformes. La ciudad estaba construida sobre un archipiélago de ciento cuarenta islas unidas entre sí por quinientos puentes. El clima era bastante tropical en WaterWing, pero la brisa del mar y los ríos que convergían en la ciudad contrarrestaban el calor. En el interior de la ciudad no hay tráfico rodado, siendo, a excepción de la navegación por los canales que separan a las islas, una ciudad totalmente peatonal.

Los habitantes de la ciudad eran muy diferentes. Los Yorx eran una raza noble de sangre dorada dotada de habilidades como la fuerza sobrehumana y la creación de barreras protectoras. Los Kyef son la raza de sangre verde, ellos se encargan de la gastronomía y agricultura, su conocimiento y habilidades les permite encargarse de la alimentación de todo el reino. Los Beiy eran de sangre azul, su capacidad de supervivencia, fuerza y osadía, los convertía en los guerreros capaces de defender la nación. Los Zerg eran los últimos en la jerarquía, con su sangre morada dependían de su lógica y gran fuerza que era mucho menor a la de los Beiy. Además de ello, todos convivían con algunos animales domésticos, que destacaban por su rareza; como tortugas de piel azulada con caparazones que iluminaban en la oscuridad y felinos de orejas puntiagudas amarillas con aletas de tiburón.

Ese día, al mediodía cuando el sol estaba en su punto más alto, todos rodeaban el palacio real observando hacia el balcón donde había un estrado azul turquesa, allí estaba el rey Zhaon un hombre de piel blanca que estaba en sus doscientos cuarenta años con la apariencia de un hombre de cuarenta años, el viento movía su maraña de cabello rojo lleno de ondas pronunciadas mientras dictaba un discurso sobre la paz que tenían con los planetas vecinos. Todos los habitantes tenían el conocimiento de la alianza y el beneficio, pero en lo que estaban verdaderamente interesados era en el anuncio del heredero o heredera que reemplazaría al rey.

—Mi amado pueblo, es éste el día escogido para darles un anuncio importante, para nadie es un secreto que estoy padeciendo una enfermedad degenerativa, que poco a poco va destruyéndome, no quiero fallaros por eso debo elegir a mi heredero. Vuestra opinión ha sido escuchada por mí y he determinado que de mis veinticinco hijos, será la princesa Valeska Leblanc la siguiente en asumir el trono de WaterWing, una vez que yo fallezca —exclamó el rey volviéndose hacia la fila de sus veinticinco hijos detrás de él y extendió la mano hacia la princesa más joven de todos sus hijos, para que diera un paso al estrado turquesa junto a su padre.

Valeska de veintiún años de edad, era una joven de tez blanca, su cabello rojizo caía a lo largo de su columna vertebral hasta el inicio de su abdomen. De todos los hijos e hijas del rey Zhaon, la más diplomática y de corazón noble. La princesa estaba totalmente sorprendida, fue inesperado para ella ser elegida como heredera, sus hermanos y hermanas la observaban tratando de motivarla a que diera un paso junto al rey. Ella se dirigió hacia su padre con pasos vacilantes.

Debido al sol los ojos de Valeska estaban de un color dorado, una cualidad de todos los Blyuzkirn que son una raza que tienen la sangre de color platino y poseen dones de magia de algún elemento en particular, su vista diurna toma el color dorado y esto permite que los rayos del sol no los ciegue, cuando la noche cae sus ojos adoptan el color púrpura obteniendo una mejor visión en la oscuridad. Normalmente ésta raza es considerada la realeza de todo reino.

Cuando Valeska llegó al estrado, observó a su padre alzando ligeramente la vista, porque él era diez centímetros más alto de los ciento setenta centímetros que ella medía y luego observó al pueblo debajo de ella. Zhaon se hizo a un lado para que ella diera un discurso y le ofreció una sonrisa dándole confianza. Eso no había mejorado nada ni disminuido sus nervios, Valeska no había preparado ningún discurso porque jamás se imaginó ser la heredera del reino WaterWing, pensaba que lo sería alguno de sus hermanos mayores debido a la doctrina que seguían de los Xhyrt, los de sangre blanca que se encargaban de impartir las normas para vivir en una nación próspera y pacífica. Ella apoyó sus manos en el estrado aspirando aire y trató de improvisar lo mejor que pudo.