Crush || Hyunin

27

ㅡListo Markie, ¿adónde iremos? ㅡpreguntó Jeongin poniéndose la mochila y mirándolo.

ㅡIremos, a un lugar especial ㅡcontestó el otro con una sonrisa, tomándolo de la mano.

Ambos escucharon el sonido del timbre para salir y comenzaron a caminar hacia la salida.

ㅡ¿Y qué vamos a hacer? ㅡinquirió el menor cuando ya estaban en la calle.

ㅡOh, es una sorpresa, amor. Ya lo verás ㅡrespondió Mark.

Jeongin estaba especialmente de humor ese día, pues su novio le había dicho que lo amaba más que a nadie y que siempre estaría con él, lo cuál hizo que su corazón latiera más rápido.

Mientras caminaban, el menor se puso a pensar en cómo habían llegado a todo eso. Es decir, hasta hacía poco más de un mes, Mark ni siquiera lo miraba, y ahora era su novio. Su crush de hace tanto tiempo, estaba caminando junto a él, tomándole la mano.

Se sentía extremadamente feliz... bueno, así debería sentirse. Pero había algo que faltaba, había algo que debía ocupar ese espacio vacío en su corazón. Nada encajaba en ese lugar, sólo un persona: Hyunjin. Lo extrañaba muchísimo, y cada día pensaba en lo último que habían hablado, más bien en lo que le había dicho. Que estaba enamorado de él. Su mejor amigo estaba enamorado de él... bueno, ya no era su amigo... ¿o sí?

Claro que lo era, al menos para Jeongin, Hyunjin siempre sería su mejor amigo, aunque dijera que ya no eran amigos. Jamás se olvidaría de una persona tan importante y especial como él.

A veces, mientras más pensaba en ello, se sentía torpe por no haberse dado cuenta de los sentimientos de su hyung... de las señales. Y siempre recordaba cuando se habían besado.

>>Hyunjin se acuerda de que me besó<< pensó un día >>Qué vergüenza... y ese fue mi segundo beso. ¿Le habrá gustado?... ¡Ush! ¡¿Qué estoy pensando?! Eso no me interesa. Él es... o al menos era mi mejor amigo. No puedo pensar así de él, aunque esté enamorado de mí. Además yo tengo a Mark, él es mi novio<<.

Había momentos en los que comparaba las reacciones de Mark con las de Hyunjin. Por ejemplo, cuando una vez tenía sueño en clase porque no había dormido bien, su novio le había aconsejado que durmiera en ese momento y que la profesora no se iba a dar cuenta. Entonces Jeongin pensó que Hyunjin le hubiera preguntado la razón de su mal sueño y lo hubiera regañado por haberse quedado hasta tarde jugando videojuegos, también le hubiera dicho que no se durmiera en clase porque lo podrían castigar, pero que si no podía evitarlo lo hiciera y él lo cubriría luego. Eran pequeños detalles que marcaban la diferencia y que hacían que a veces Jeongin dudara de si estaba con la persona correcta.

En muchas ocasiones, se había puesto a recordar las veces en las que Hyunjin había sido atento, detallista y protector con él, y se daba cuenta todas las veces que lo había mirado con un afecto especial, haciéndolo cuestionarse de su ignorancia estúpida al no caer en la cuenta de que su mejor amigo sentía algo por él.

ㅡ¿Aquí es? ㅡpreguntó extrañado, interrumpiendo sus pensamientos al darse cuenta de que habían llegado a un callejón.

ㅡClaro ㅡsonrió el mayor soltándole la mano.

Jeongin se sintió un poco raro cuando vio que varios de los amigos de Mark habían llegado.

ㅡY... ¿cuál es la sorpresa? ㅡpreguntó ansioso, tratando de ignorar a los demás.

ㅡBueno... ㅡsu novio hizo una pausa y simuló pensar mirando al cieloㅡ ¿Recuerdas que hoy te dije que te amaba y que siempre estaría contigo?

ㅡSí, claro que lo recuerdo ㅡno pudo evitar sonreír.

ㅡPues, hum... ¿qué opinan mis amigos? ¿Creen que yo sería capaz de decirle eso a un... enfermito? ㅡlos miró y al ver que éstos soltaban carcajadas, volvió a mirar al menor y le sonrió con suficienciaㅡ Pues claro que no, porque era mentira.

Jeongin fue borrando su sonrisa y lo observó confundido, deseando que fuera un chiste.

ㅡ¿Q-Qué dices?

ㅡJeongin, era mentira, yo no te amo, nunca te amé, y jamás lo haré. Todo lo contrario: me repugnas. Esa es la sorpresa, ¿te gusta?

ㅡ¿Q-Qué? ㅡel menor lo miró dolido mientras sentía que sus ojos se cristalizabanㅡ Pero... pero tú dijiste que me amabas, tú me besaste en la fiesta, dijiste que te gustaba, me invitaste a salir y me pediste ser tu novio... ¿cómo eso puede ser mentira?

ㅡEra una farsa. Todo eso fue una farsa. Diría que soy buen actor, pero tú eres el estúpido y enfermito que se lo creyó ㅡrespondió el contrario, burlón.

ㅡMark... por favor... no puede ser... dime que es una broma, por favor ㅡJeongin luchaba por no tener los ojos llorosos.

ㅡEs una broma, pequeño ㅡle sonrió, y el otro comenzó a aliviarse aunque seguía confundidoㅡ. ¿Creíste que diría eso, uh? ¿Querías que en serio te dijera "es una broma"? Pues, no, Jeongin, no es una tierna broma. Lo que sí es una broma, es nuestro amor. ¿En serio crees que alguien como yo puede amarte?

El menor tragó saliva, sintiendo aún más dolor. ¿Era aquello real? ¿En serio Mark le estaba diciendo todo aquello?

Deseaba que fuera sólo una pesadilla de la cuál despertara y estuviera en el salón de clases, siendo abrazado por su novio, su Markie.

ㅡNo... no lo entiendo ㅡlas lágrimas comenzaron a salir, luego se dio cuenta de que los demás chicos estaban sonriendo burlones mientras los filmaban.

ㅡ¡¿A caso eres tan idiota?! ㅡgritó Mark, empujándoloㅡ ¡¿Cómo es que no entiendes algo tan simple?! Yo no te amo, nunca lo hice, ni lo haré. Nada de lo nuestro fue real para mí. Todo fue una farsa, me repugnas. Sólo estaba jugando contigo y usándote, vengándome. Aunque también tenía ganas de que sufrieras.

ㅡ¿P-Por qué lo hiciste? ¡¿Por qué querías verme sufrir?! ¿A caso te he hecho algo malo? ㅡinquirió dolido por haber escuchado palabras tan duras.

ㅡ¡Porque te enamoraste de mí! Mi tonta prima era la única enferma que conocía, hasta que me di cuenta de que me mirabas todo el tiempo y te ponías nervioso cuando pasaba junto a ti. No podías ni siquiera disimular un poco... me daba asco si quiera pensar en la idea de que un chico piense en mí de esa forma. Asco y repugnancia. Odié tanto cuando me dí cuenta de que le gustaba a un marica desviado como tú ㅡlo volvió a empujar, haciendo que se golpeara contra la pared. Después le dio una bofetadaㅡ. Debías pagar las consecuencias. Por eso quise hacerte sufrir. Romperte el puto corazón para que aprendas que enamorarte de un chico está mal, para que pagues por darme tanto asco. Los enfermitos como tú necesitan una buena lección.

Jeongin ya no podía hablar de tanto llorar. Se sentía tan herido y traicionado. Se sentía estúpido, enfermo, se sentía un error.

Nunca había pensado que la idea de amar a un chico estuviera mal sólo por el hecho de ser también un chico. Bueno, al principio, cuando había descubierto su orientación se había sentido preocupado y quería cambiar sus sentimientos. Pero sus amigos le habían enseñado que estaba bien. En especial Hyunjin.

¡Oh! ¡Hyunjin! Si hubera confiado en él, si le hubiera hecho caso, si no hubiera sido tan tonto como para cegarse por el amor. Su mejor amigo había tenido la razón siempre al no confiar en Mark. Y él lo había dejado de lado por ese maldito.

Ahora sentía otra vez que estaba mal, que estaba enfermo. Quería otra vez cambiar sus sentimientos.

Pero no podía pensar con todo el dolor que sentía. Y Mark seguía golpeándolo. Él no podía defenderse. No sabía pelear, y era mucho más débil. Lo único que podía hacer era cerrar los ojos. Ni siquiera tenía fuerzas para cubrirse.

De pronto, sintió cómo los golpes cesaban repentinamente.

Abrió los ojos y observó con sorpresa que Hyunjin estaba allí, peleándose a golpes con Mark.