Ceci Est Notre Début [Adrinette - MLB]

Capítulo IV

- Dime papá, ¿sobre que es lo que querías hablar conmigo?

- ¿Recuerdas lo que te comenté unos días antes de tu boda? - le preguntó el ex rubio mirando fijamente a su hijo.

- Hablas... ¿de la asociación que planeas hacer con la empresa de telas en la localidad de Hong Kong? - cuestionó Adrien, a lo que el diseñador de modas asentía con la cabeza mientras colocaba ambos brazos sobre el escritorio y cruzaba sus dedos - Claro que me acuerdo, hablaste de la gran inversión que eso conllevaría - Gabriel volvió a asentí - ¿Qué pasa con eso?

- Al ser un viaje importante, y teniendo en cuenta que a partir de mañana serás mi mano derecha y el nuevo sub director de la companía... necesitaré que vengas conmigo - sentenció con seriedad, dejando a su hijo helado.

- Papá... yo... entiendo que requieras de mi ayuda, pero acabo de llegar de mi luna de miel, ¿y me estas pidiendo que me valla de nuevo? - se levantó de donde estaba sentado - Con Marinette tenemos muchos planes pendientes. Tenemos que continuar con el proyecto de la casa, la cual, ahora que llegamos, debemos estar yendo cada cierto tiempo para supervisar y terminar de elegir los detalles para cada habitación. Además, en dos semanas es Navidad y teníamos pensado pasar ese tiempo de calidad juntos... ya que después las cosas en la empresa se descontrolan, y lo más seguro es que tengamos que centrarnos cada uno en nuestras áreas correspondientes.

- Entiendo perfectamente tu posición hijo, pero necesito que vengas... lo siento.

- ¿Me llevarás como tu traductor personal? - preguntó el rubio en un tono burlón, y Gabriel negó con la cabeza.

- A parte de eso - ambos rieron - Es importante que tu estés presente en esas juntas. Ellos deben conocerte y saber que tu tomarás las riendas del negocio algún día.

Adrien rodó los ojos.

《Debí haberlo imaginado... siempre pensando primero por el bien de la empresa antes que en los demás》

- Se lo que estás pensando y no, no es así. Te estoy pidiendo que vengas conmigo no solo por el futuro de la companía... sino que también por el tuyo.

- ¿A qué te refieres? - preguntó él sin entender.

- ¿Cuál fue la última junta de negocios a la que asististe luego de que te graduaras de la Universidad? - cuestionó Gabriel, viendo a su primogénito volver a rodar los ojos.

A consecuencia de aquella reacción, el diseñador suspiró con resignación y con un poco de culpa a la vez.

- Escucha hijo, sé que no te agradó la idea de tener que cambiar de carrera a último momento, pero ahora que serás el vice presidente necesito que te mantengas a mi lado y me apoyes en las furas decisiones de la marca - Adrien negó con la cabeza deteniéndolo.

- Papá, no... Sabes porque lo hice, mamá te necesitaba a su lado en ese momento complicado en las primeras semanas - frotó sus manos algo angustiado al rememorar esos sucesos en su cabeza - Pero debo ser sincero, la parte de asistir a las juntas me esta costando más de lo que pensaba - aceptó el rubio 

 - Lo entiendo Adrien, pero necesito que estés más a disposición de la empresa, que concurras a las reuniones y te integres más al equipo de gestión - pidió el diseñador - Ahora eres mi mano derecha, pero en un futuro serás tú el que dirija la empresa y marque el rumbo de esta ya que no voy a estar aquí siempre - le sonrió le medio lado para luego continuar - Por supuesto que tendrás a Marinette a tu lado ayudándote, pero al final quien tendrá la última palabra en lo que respecta temas de relacionamiento con otras compañías e instituciones eres tú... - el hombre se levantó de su lugar y caminó hacia su hijo, dejando descansar su mano derecha sobre el hombro de éste - ¿Comprendes?