popular boy||KTH&____||+18||

🔥: ᴊᴇᴀʟᴏᴜsʟʏ

Cerre mis ojos y gire mi cabeza de lado para respirar mejor y deje mi vista sobre la televisión, buscando que hacer con todo lo que pasaba en mi cabeza.

Estaba enojada, triste, frustrada y me sentía una idiota. ¿Que es lo peor de esto? Que a pesar de esto, sabiendo como soy, lo olvidaré o simplemente lo dejaré pasar, Taehyung me puede más que yo misma, creó.

Escuche mi celular vibrar sobre mi saco y me senté, sacando mi móvil para así ver que Kim me estaba llamando. Rechace la llamada pero a los segundos me llego otra de él.

La acepte.

— ¿Que pasa? —pregunte sin muchas ganas.

— Ven a mi casa, ahora mismo. —dijo para simplemente luego de eso cortarme y dejame con las palabras en toda la punta de mi lengua.

Deje mi celular en el bolsillo del saco que traía puesto y gruñi levantándome del sofá, con pocas ganas de ir a la puerta e ir donde estaba Taehyung, ¿y si no le hago caso?

No, no quiero ser castigada, o que me reproche, pero es qué, ¿Es ridículo si digo que quiero ir? Si creo que si es ridículo.

Camine por todo el pasillo y me puse mis zapatillas para así salir de mi casa, recordando lo lejos que está la gran mansión de Taehyung de donde yo estoy.

— ¿Aún tengo mi bicicleta? —me cuestione y camine por el pasillo que me llevaba al patio trasero, donde estaba una pequeña casilla de madera.

Abri los cerrojos y ahí vi mi bicicleta, para mi suerte, no estaba pinchada y estaba en un buen estado. Suspire y me subí a esta, sin antes cerrar la puerta de la casilla.

Anduve en ella hasta llegar al pasillo delantero y gracias a que deje el portón abierto, pude salir sin necesidad de bajarme.

[...]

Baje de la bicicleta una vez que llegue a la casa de Taehyung y la deje en el suelo sin importarme mucho haberla dañado al dejarla caer al mismo.

Camine hasta la puerta y está fue abierta por el chico que ocupaba el lugar principal en mis sueños húmedos, esos que me despertaban y me hacían sentir extraña.

Taehyung sujeto mi mano y me llevo dentro de su gran casa para así cerrar la puerta y dejarme pegada a esta. Mi corazón se aceleró por cuarta vez en él día.