¡No Soy un Chico!©

~Capitulo #149~

No podía creer que estaba escuchando esas palabras.

–¿Qué dijiste?-Pregunte esperando que volviese a repetirlo.

–No esperes que lo repita Anett.-Dijo mientras me tomaba de la mano.

Acerco mi cuerpo al suyo, tomo mi rostro con su mano derecha, nos miramos fijamente y nuestros labios se juntaron para así besarnos muy apasionadamente.

–T-Te amo.-Dije entre sus labios.

–Yo más.-Dijo y me cargo en sus brazos.

Subimos hasta la habitación.

Aún continuaban los besos apasionados.

Sus manos se fueron hasta los botones del vestido de novia, los desabrocho, me lo quité para quedar en ropa interior, me miro y mordió su labio.

Él se quitó el traje, mire su cuerpo, me recosté en la cama.

Él se puso entre mis piernas.

–Hazme tuya.-Dije entre jadeos.

–Ya eres mía.

Sentía que era mi primera vez... mi primera vez haciendo el amor.

(...)

A la mañana siguiente desperté y lo observé recostado a un lado de mi, toque su rostro ya que pensaba que todo era un sueño, pero no... todo era realidad.

Me levante para hacer el desayuno.

Estaba tan feliz.

Termine de hacer el desayuno.

–Anett mi amor.-Escuche su voz bajando las escaleras.

–¿Que sucede?

–Lo siento mucho, no use protección anoche–reí–¿que es lo gracioso?

–Hans, no tiene nada de malo, estamos casados, no te imaginas que tengamos un bebé, un hermoso bebé de los dos.-Dije acercándome a él.

Él me abrazo.

–Si, que tenga tus ojos.-Dijo.

–No, mejor que tenga tus ojos, esos hermosos ojos que me encantan.

–Si, pero siento que aún no es el momento de tener hijos Anett.

–¿Por qué no?

–Estamos recién casados, yo estoy teniendo mucho trabajo, con lo de la fábrica de juguetes, entre otras cosas.

–¿Que otras cosas?

–Otros negocios, no me preguntes más, por favor.

–Está bien, tienes razón, aún nos queda mucho por conocer uno del otro y sabes...

–Dime.

–Me encantaría visitar la fábrica de juguetes.-Dije y sonreí.

–¿En serio?

–Si.

–Mañana te llevare.

–Está bien.

–Y otra cosa, contraté a una mujer y a un hombre para que ayuden con las cosas de aquí de la casa, no puedes hacerlo todo tú sola.

–Perfecto.

–Bueno, saldré a hacer unas cosas, no me esperes para comer, tal vez llegue tarde.-Dijo y se fue a la habitación.

Se escuchó el timbre de la casa.

Fui a abrir.

–Hola, buenos días.- Dije.

–Buen día señorita, usted debe ser la esposa del señor Hans Daer Gray.-Preguntó la señora que se encontraba en la puerta.

–Así es, mi nombre es Anett... Anett Wishaw Jansen.-Dije y estreche su mano.

–Mucho gusto, yo soy Alexa Defeo...