Siempre Fui Un Monstruo ||Naruto Shippuden Y Tokyo Ghoul|| [Editado]

Mensaje

¿Donde estaba?

No podía ver más que oscuridad, pero podía escuchar claramente voces hablandole, aún sin abrir los ojos sentía su estómago revolviéndose y su garganta ardía. Ojalá pudiera tener un sueño eterno, y no tener que enfrentarse a la realidad, pero no quedaba de otra que afrontarla, eso se le enseño su madre, debía hacerlo por más que duela.

Hizo otro intento, pero sus párpados pesaban seguramente porque parte de su organismo si consumió la "comida".

—¿Sakura-chan? –esa era la voz de Naruto.

En otro intento de abrir los ojos, la luz los cegaba, aclarando más la vista, nota que está en cama, a un lado estaba el rubio y sentados en unas sillas, Kakashi y Sasuke.

—¿D-donde e-stoy? –la debilidad que tenía era grande que se le dificultaba hablar.

—No te esfuerces Sakura –dice el peli-plata.

—¿Donde estoy? –pregunta nuevamente, le desespera no saber su ubicación.

Pero Sakura encontró su respuesta al ver a entrar a un hombre, de cabello negro rapado de a un lado, y ojos negros en su rostro mantenía, sus labios estaban levemente hacia arriba, como si estuviera sonriendo. De todas las personas en ese mundo, ¿Por qué tuvo que ser él quien la salvara..?

—Uta.. –susurra.

Los demás hombres se sorprendieron, habían escuchado del otro que se conocían sin embargo, no creía mucho, el era un desconocido que apareció de la nada.

—¿Como te sientes, Sakura?

—Siento que como si me hubieran pisado. –se acomoda mejor en la cama, sus fuerzas no estaban de regreso del todo.

—¿Ustedes se conocen? –pregunta el rubio.

—Somos viejos amigos, ¿No Sakura? –le sonríe el azabache al rubio. La peli-rosa lo mira seria. —No quisiera arruinar su encuentro, pero les pediré que salgan un momento Sakura aún debe descansar.

—Tiene razón, ¿Estarás bien Sakura? –pregunta el peli-plata, que recibe como respuesta un asentimiento. —Sasuke, Naruto.

—Descansa –dice Sasuke.

—Vendremos a verte más tarde Sakura-chan. –se despide el rubio, abandonando la habitación.

Cuando estuvieron solos, Sakura soltó un suspiro, no es que no quisiera ver a Uta, solo que aveces su humor podría traerle ciertos problemas, que prefiere mejor evitar. El azabache había traído consigo una bandeja, por el olor Sakura dedujo que era lo que necesitaba.

—Ellos son de quiénes nos hablaste alguna vez? –acerca una  bandeja.

—Si –contesta en voz baja.

—Ya veo, ellos son como describiste. Todos ellos se comportaron como tú familia, en el camino,y te protegieron pensando que era una amenaza para ti. –ante dicha revelación, Sakura desvía la mirada.

—No quisiera preguntarte porque lo hiciste, solo mejorate hay algo que necesitas saber, come un poco y duerme vendré a verte más tarde, no te preocupes por la misión que tienes, el tal Kakashi dijo que el señorío, no le importaba retrasar el viaje. –dijo mientras se iba.

Dejando a Sakura sola, estando sola levanta la tapa que cubre la bandeja, notando que había pedazos de carne picados. No le sorprendía ver eso, Uta en algún momento siempre había sido sádico, le dio un mordisco, eso era un néctar bastante exquisito. Cuando se dio cuenta la bandeja estaba vacía,  a su lado tenía una taza de café que no dudó en beberlo.