La Bruja Y El Guerrero De Hielo (Terminada)

capítulo 24

Perdón por mi bloqueo de escritora,  esto lo escribo con el mismo bloqueo y sólo para ustedes y espero que me comprendan.  He luchado para que retiren mis libros de Facebook y demás páginas y sólo algunas lo hicieron,  pero otras se burlaron.  He entendido que me extrañan y que he pausado todo esto,  pero en verdad he tomado muchas veces el borrador y he pensado en qué escribir,  pero no me llega nada.  Con ese mismo pesar lo estoy haciendo ahora.  Espero que me animen y los leeré a todos porque sin ustedes esto no sería posible. 

Gracias por esperarme. 

...

Nerón

En cuanto ella cae sobre mis brazos mis piernas se tambalean y caigo junto con ella,  pero sin dejar que su cuerpo sienta el roce de la tierra.  Está pálida,  fría,  como si su alma hubiese abandonado su cuerpo.  Sus labios abandonaron el tono rosa para palidecer entre la penumbre noche de este bosque. 

Jadeo tocando su cabello,  respirando más agotado que antes,  perdiendo la razón por un segundo y recobrandola en cuanto me doy cuenta que no podemos perder tiempo.  Ya no hay peligro,  o eso creo,  debo despertarla y lograr que ella tome el libro. 

—Aisha,  despierta por favor,  es necesario que vuelvas y recuperes el libro —susurro,  quito cada mechón de cabello que la brisa sacude sobre su hermoso rostro.  Es hermoso...  Ella es perfecta.  Ella...  —. Aisha —repito por última vez sacudiendo parte de su cuerpo,  dejando que su cuello y cabeza se mantengan en mi brazo. 
Me responde con un quejido,  como si todo le doliera.  Abre sus ojos lentamente y me mira confundida,  se aleja y toca su cabeza mientras mira por doquier. 

—¿Qué me pasó?  —pregunta con todas sus dudas plasmada en sus facciones. 

—Te has desmayado, ahora no hay tiempo que perder,  debemos recuperar el libro —la animo ayudando a levantarla y se queda pensativa. 

"Todo lo que hago por ti maldito guerrero para que al final me quieras dejar"

Puedo escuchar ese pensamiento con claridad y frunzo el ceño.  Sé que ella no lo va a entender  pero yo necesito respuestas y no hay tiempo para explicárselo.  Por tal razón me hago el desentendido,  como quién no entiende una mierda de sus pensamientos y la suelto; ella se aleja y recupera su compostura,  mirándome con desagrado. 

«Nunca te he dicho cuanto odio esa mirada,  esa que me dice que me odia y que a  la vez me ama. »

....

Aisha

Aún siento que todo me da vuelta,  pero he despertado con más rencor que nunca,  siento que exploto de rabia y tristeza,  ya que estuve a punto de morir en manos de esos demonios,  sacrificando mi vida por un ser como Nerón,  que no tiene una pizca de remordimiento hacía mí,  hacia todo lo que pasamos juntos.  

Sigo el camino hacía la cueva,  dejando todo el miedo atrás,  todo el dolor y cada mareo que invadió mi cuerpo hace unos segundos.  La cueva está totalmente oscura, hasta que una luz destella desde dentro,  una luz que guía hacía donde debo ir. 

El frío,  la noche y el nublado gris que se forma en el cielo nos arropa, y siento la presencia de Nerón cerca de mi.  Sin importancia avanzo hasta que su mano me detiene y lo miro confundida,  sin entender porque me ha detenido.

—No hables —me susurra colocando un dedo en mis labios.  Luego mira alrededor y saca su espada. 

«¿Qué haces estúpido?  Debemos irnos» le hablo en sus pensamientos y me empuja,  logrando que caiga en el suelo.  En cuanto me giro lo veo luchando con un demonio más grande,  con alas oscuras,  puntiagudas.  Un demonio de tres cabeza dispuesto a matarlo.