06

1.2K 181 29
                                    

John se apresura a llegar a la ventana de Paul, y la golpea con insistencia para captar su atención lo más pronto posible, porque se está muriendo de frío y se ha olvidado su chaqueta en casa.

Cuando Paul deja que entre, le ofrece una prenda abrigada de un color verde un poco extraño, pero John la acepta de todos modos y aprovecha para sugerirle al pelinegro que se abrigue también si no quiere pescar un resfriado.

En esta ocasión no hablan tanto, sino que se dedican más a comer de la bolsa de golosinas que habían encontrado en un cajón. Y John se fija por primera vez en lo bonitos que resultan los ojos de Paul, mientras Paul se da cuenta de que John tiene la costumbre de morderse levemente la lengua cuando dice alguna tontería para hacerle reír.

Ninguno lo dice, pero los dos sienten que el apego que se tienen es cada vez más fuerte.

Esa noche John no hace nada, pero recibe una caricia en el brazo por parte da Paul antes de marcharse, y ambos fingen que no se han puesto un poco nerviosos.

En tu ventana >>McLennon<<Donde viven las historias. Descúbrelo ahora