El planeta de Eiden

Tierra

Maratón 3/3

EIDEN

— Te odio Rennan—

— Te odio Eiden—

Esas palabras seguían vagando en mi mente. Habían pasado exactamente 5 días pero no podía olvidarme de ellas. Podía estar en la escuela; pero en la pizarra inconsientemente se formaba esa palabra. Podía degustar de mi cena pero la sopa de letras fórmulaba la oración.
Incluso podía pasar por esos momentos malos donde todo era como meteoritos pero la voz de Rennan Cooper se mantenía.

Cuando me apartaron de mi amigo de gorro rojo fue una etapa difícil. Todo se volvía en constantes ataques hacia mi planeta donde lo único que podía hacer era refugiarme dentro de mi aro de hula llorando por aquel chico.

Con el paso del tiempo dejé de mostrar mis sentimientos. Me dolía que la gente pudiese herirme y me perdí en mi planeta. Deje de decir "te quiero", deje de decir "me agradas", dejé de dar los buenos días. Simplemente dejé todo atrás.

Lloré muchas veces extrañando a Rennan Cooper; solía mirar el techo de mi habitación donde colgaban planetas imaginando que él suyo estaba conmigo.
Sollozé noches enteras lamentando mi vida y añorando estar con él. Desde entonces me prometí no volver a hacerlo.

Al volver; quería encontrarlo. Mi corazón latía rápidamente con la esperanza de al menos observarlo a lo lejos. Cuando entré a ese salón de clases fue fácil reconocerlo. Sólo Rennan Cooper llevaría un gorro rojo sin necesidad de que sea invierno y a su vez, le acompaña ese planeta de dos colores que carga en los ojos.

Él estaba perdido en su mundo; no me notó en primer instante. Al verlo me pregunté una y otra vez si él sería la persona; una vez me buscó supe que aún mostraba interés en mi. Me es una lástima no poder revelar la razón de mi repentina partida.

Pero no fue hasta varios intentos fallidos de su parte que me convencí es el indicado. El único chico merecedor de entrar a mi planeta.
Puedo decir que no me importa la gente de la tierra; quizá el detrás de esa oración es que no me importa dañarles.

Pero Rennan; él tiene que entrar a mi planeta por que ahí jamás le haré daño. Después de tanto sufrimiento y las palabras que regaló hace 5 días para mí es que me convence más de acercarlo.
Podré decirle que le odio; pero sólo él comprende lo que en realidad quiero decir.

Me gustaría decirle que es importante en mi vida. Y que es una pieza fundamental; que le extrañé demasiado o que me gustaría tocar su lindo y rizado cabello. Pero no puedo; la vida a sido tan mierda conmigo que apenas y puedo permitirme un diálogo con él.

¿Es posible querer a una persona cerca y lejos a la vez?

Sé que tiene dudas con respecto a mí; sé que a veces no sabe como tratarme o que le confunden mis estados de ánimo. Sé que tiene mil preguntas y puede estarse viviendo loco tratando de saber lo que hay conmigo. Pero no puedo; no puede saberlo, no estoy listo.

Aún así; sé es la única persona que se preocupa por mí y también la única a la cual hace años le regalé mi primer "Te amo".

— ¿Qué ocurre Eiddie?— mi mirada volvió al niño de gorro rojo.

— Siento algo—me sentía confundido. No sabía por que mi corazón latía rápido justo ahora que mi mano se mantiene sobre la de Rennan — me gusta estar contigo Reno

— A-a mi ta-también —

— Rennan; ¿Cómo los adultos saben cuando quieren ser novios? — me seguía pareciendo confuso como era todo eso relacionado al amor.