Capitulo 16

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Narrador.
Me escuchaste?— dijo Carla.
Samuel seguía besándola con intensidad, cada vez más y Carla no lograba comprenderlo. Cuando Samuel insinuó a sacarle el vestido que llevaba puesto, ella lo freno y se paro de la cama.
—Samuel.. por favor, estoy tratando de tener una conversación contigo.— dijo Carla.
De la parte de Samuel no hubo respuesta, se sentó en el borde de la cama. Estaba desilusionado.
—Vale, como quieras. Ya tuve una noche difícil como para que se ponga peor. Mejor me voy a mi casa.— dijo Carla que cogio sus cosas y se dirigió hacia la salida. Espero unos segundos antes de salir pensando que quizás Samuel la persiguiera, pero no fue así. Salió enojada del edificio y si bien su auto la estaba esperando fuera, decidió dar una vuelta caminando, para pensar un poco y respirar aire, aun que quizás, no era el mejor barrio para hacerlo, y mucho menos a esas horas.

Narra Carla.
No me esperaba esa reaccion de parte de Samuel, no se que esperaba. Quizas hice mal en decirselo, lo que menos queria era lastimarlo, pero creo que ya lo he hecho. Siempre lo hago.
Camino, cada vez mas. No tengo ni puta idea donde estoy. En la siguiente cuadra hay un grupo de chicos, no tienen buena pinta así que doy la vuelta para volver al auto.
—Eyy, tú. Rubia.— uno de los chicos me estaba llamando. Sin darme vuelta sigo caminando, cada vez mas rápido.
—Eres sorda o que? Ven con nosotros, te divertirás .— dijo otro de los chicos que comenzó a acercarse hacia mi.
Me doy media vuelta pero sin parar de caminar —No. Tengo otro lugar al que ir.— respondí y me di vuelta.
El chico me había alcanzado. Se paro frente a mi.
—Te dije que vengas con nosotros. No te hare daño, lo prometo.— dijo el chico.
—Y yo te dije que no. — respondí enojada.
—Epaa, como te llamas princesa? Por la pinta claramente no eres de por aquí.— dijo el chico.
—Si te lo digo me dejaras ir?— respondí .
—Claro. Mi nombre es Ariel.— dijo
—Carla, me llamo Carla y me tengo que ir.— dije con intención de irme, pero Ariel me tomo fuerte de los brazos y me dejaba mover.
—Quédate un rato, estoy seguro que tu y yo la pasaremos bien.— dijo insinuándose hacia mi.
—Me estas lastimando. Y dudo mucho que estes a mi altura.— respondí, tratando de ocultar mi miedo.
—Me estas poniendo a prueba? Pues en ese caso..— Ariel me tomo aun mas fuerte y me llevo hacia un callejón que había a unos metros. Trate de resistirme, pero no podia contra el. Era demasiado fuerte y estaba claramente drogado. Comencé a gritar con todas mis fuerzas. Nadie aparecía.

Narra Samuel.
Había escuchado a Carla, claro que lo había hecho. Pero lo que escuche no me gusto nada. Se que no lo hizo con intención de lastimarme, tuvo que hacerlo, pero igual me lastimo. Hasta cuando seguiríamos así? Quiero decirle al mundo que la amo, que es mía y yo soy suyo.
Soy un idiota por dejarla ir así. Unos minutos después de que se fuera, salí a la calle esperando encontrarla allí. Su auto estaba estacionado, pero ella no estaba dentro. Su chofer me avisa que salió a dar una vuelta. En ese instante comencé a correr, este barrio es peligroso para andar a estas horas solo, y mas para Carla. Mi corazón se acelera, me quedo sin aliento.
A lo lejos escucho gritos, corro todavía mas fuerte. Al final de la calle hay un grupo de chicos, pero no veo a Carla. Todos me ven, y me señalan una calle. Ahi estaba Carla, la veo.
—Carla!!!!! — grito con todas mis fuerzas. Un tío estaba molestándola, no la soltaba. Veo la cara de Carla, estaba pálida .

Narrador.
Samuel llegó justo a tiempo. Si no la encontraba, quien sabe que podría haber hecho ese tío con Carla. Agarro al chico, y lo tumbo contra el piso. Lo golpeo con todas sus fuerzas.
—Hijo de puta, te voy a matar.— gritaba Samuel.
—Samuel basta, lo vas a matar. Por favor.— decía Carla intentando frenarlo.
Samuel no paraba, Carla lo agarro y lo freno. El chico salió corriendo.
—Carla.. estas bien? Ese tío..— decía Samuel que no podia recuperar el aliento.
—Estoy bien, gracias a ti.— dijo Carla con lagrimas en los ojos.
Los dos se fundieron en un abrazo eterno.
—Cuando tu chofer me dijo que saliste a caminar, tuve tanto miedo. Creo que nunca corrí tanto.— dijo Samuel.
—Estaba abrumada, necesitaba respirar. Se me olvido donde estábamos.— dijo Carla.
—No importa, lo importante es que ya estas bien, aquí conmigo. Perdón por como reaccione antes. No estoy enojado contigo, entiendo que lo hiciste por una buena causa, es solo que me molesta no poder mostrarme contigo, yo debería haber estado contigo en esa fiesta.— dijo Samuel.
—Esta bien. Yo también quiero estar contigo frente a todos. Pero estamos camino a ello, el plan cada vez va tomando mas forma. — dijo Carla.
Samuel comenzó a besarla, muy suavemente. Sabia que Carla seguía alterada.
—Vamos? Por favor ven a dormir conmigo.— dijo Samuel.
—Esta bien. Pero primero quiero hacerlo aquí.— dijo Carla.
—Aquí? Estas segura que estas bien?—dijo Samuel preocupado.
—Estoy bien. Fue solo un susto, ya paso. Ahora vamos a lo nuestro.— dijo Carla riendo.
Samuel admira lo fuerte que es, tan valiente. Y claro le encanta  lo espontánea que es.
—Si señora. Lo que usted diga.— dijo Samuel riendo.
Y así, tacharon un lugar mas en la lista de lugares extraños para tener sexo.
Cuando habían terminado, caminaron hasta lo de Samuel. Antes de ingresar al edificio, el chofer de Carla la llamo.
—Señorita, su padre quiere que vuelva a su casa ya mismo.— dijo
—Que pesadilla. Albert, no le dijiste donde estoy no? Ni con quien?— dijo Carla, que por un minuto se olvido que nadie podia saber que estaban juntos.
—Claro que no. Se lo que su padre piensa de esto, pero si no volvemos ya se enterara y no por mi boca.— dijo Albert.
Carla se despidió se Samuel con un beso y se subió al coche.
—Gracias Albert por cubrirme, se que mi padre les paga no solo para llevarme, sino para informarle si ven algo sospechoso.— dijo Carla.
—Señorita, perdón que me entrometa, pero últimamente esta mucho con ese muchacho, esta usted enamorada?— pregunto Albert. La llevaba a Carla hacia años, pero sin embargo nunca hablaban mucho, Carla le tenia aprecio y Albert también a ella, sabia que era una chica con mucho sufrimiento.
—Muy enamorada.— dijo Carla.
—Pues me alegro, se ma ve contenta. Y hace mucho que no la veía así. Quédese tranquila, no dire ni una palabra. Puede confiar en mi.— dijo Albert.
Quizás esa noche Carla se había ganado un aliado, y de mas esta decir que lo necesitaba.

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Bueno buenoo, aquí os dejo otro capítulo. Dos en un día para darles un poco del amor de Carmuel y por demorarme tanto en escribir el capitulo anterior!!
Les gusta el nuevo aliado de Carla?

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