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—Es un idiota—pensé. Ahora sí, molesto. Nunca quise espantar a nadie, solo quería evitar que Calum saliera lastimado.

—¿Estás saliendo con Cal y con este chico?—le pregunté en tono amenazante a Telly — En ese entonces novia de Calum— La respuesta era más que obvia, ya que me la había encontrado fuera del centro comercial intercambiando saliva con un chico que no era precisamente mi amigo.

—Yo...eh...—se trababa al hablar, claramente nerviosa—Luke...

—Eres una basura—dije con asco—Calum te quiere de una manera que no tienes idea y tú le haces esto.

—Callate, eres el menos indicado para hablar—atacó—. Muchas cosas se dicen sobre ti—dijo. Contuve mis ganas de acercarme y arrancarle el cabello. Solo por ser una chica—. Muchos dicen haberte visto pasar por su cama.

—Escucha y habla lo que quieras, pero si te atreves a acercarte a Calum, espero que sea para contarle lo que estabas haciendo con este idiota—dije mientras apuntaba al chico con la cabeza—. Si no, yo mismo me encargaré de ti—la mire fijamente—, y sabes que no juego.

Me es un dolor de cabeza recordar esa situación. Yo solo quería protegerlo.

«Yo no soy el que está tirando quince años de amistad a la basura» pensé seguro mientras me dirigía nuevamente al baño.

Al salir de la ducha amarre una toalla a mi cintura mientras me secaba el cabello con otra. Quizás me lo dejaría crecer para que se notarán un poco más mis rulos.

Me dirigí al closet para poder sacar mi pijama, pero dirigí la mirada hacia el reloj. Aún faltaban veinte minutos para que comenzará el partido.
«No necesito a Calum ni a nadie» pensé orgulloso volviendo mi vista al closet, pero para esta vez, sacar mi camiseta del equipo. Era de un lindo color azul marino con un par de líneas blancas y en la espalda se podía ver un gran 17 'K. Green'
«Creo que no podré usarla más» dije en mi cabeza mientras dejaba la camiseta en el piso. Decidí mejor usar un lindo sweater color cielo, skinny jeans y una linda diadema de flores blancas.

Ya listo, guarde mi celular en el bolsillo trasero del pantalón y tome las llaves del auto.

Camine hacia este y me encontré con Calum recargado en su auto con su mirada fija en el piso.
Decidí ignorar su presencia y seguir mi camino.

—Lo siento—escuche detrás de mi mientras abría la puerta del auto—, no quise decir eso.

Mi estómago se estrujo al escucharlo decir eso. Calum era la persona que más apreciaba en el mundo, era quien me hacía sentir querido y que le importaba a alguien. Que él me hablara de ese modo me había lastimado mucho.

—Pero lo hiciste—volteé a verlo—. Sabes lo importante que eres para mí y lo mucho que me duele que tú me digas algo así.

—Enserio, Luke, lo siento, pero es que él de verdad me importa.

—Y ya te lo dije, despreocúpate que yo en tu vida nunca más me meto—dije y subí al auto para poder irme.

Nunca me había molestado tanto con él. Cómo todos los amigos, habíamos tenido discusiones antes, pero nunca al grado de hacerme llorar.

Cuando llegue al estacionamiento del campus, moví un poco el retrovisor para poder verme. Tenía los ojos un poco rojos y restos de lágrimas en mis mejillas. Las aparte con mi mano y trate de tranquilizarme para que el color rojizo de mis ojos se calmara. Cuando ya casi ni se notaba lo sucedido, baje del auto soltando un suspiro.

Camine hacia la entrada y la fuerte música lleno mis oídos. Entre y estaba todo repleto. Seguro ya estaba por comenzar.

Mire hacia las gradas para lograr encontrar algún lugar, hasta que ví a un montón de chicos gritando y haciéndome señas. Los amigos de Calum.
Reí y subí más escaleras para llegar hacia donde estaban.

Because Bad Boys are Broken Boys - mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora