Nuit De Pleine Lune (SuJin) Omegaverse

36. Hermanos.

El bajo murmullo de su dolor le calaba hasta los huesos, su león ronroneaba para su alfa, pero él no reaccionaba a su voz. 

Sus mejillas ardían y no sabía si era por sus propias lágrimas o porque tal vez sus ojos sangraban a cada sollozo que soltaba. 

Su alfa aún respiraba pero no estaba seguro si su lastimado cuerpo podría sobrevivir.

SeokJin se acurrucó contra el sudorso cuerpo de su alfa, acariciando con pequeños temblores su gélida piel, entre bajos llantos que le suplicaban abrir los ojos y volver a él. 

Su alfa débil reaccionó a su toque y solo una pequeña chispa de esperanza sacudió a SeokJin.

Hoseok intentó acercarse a ellos y hacerse cargo de su hermano, abrazarle para alejar sus lágrimas y permitir que se llevasen a Yoongi para sanar. Así que alejándose de golpe de las manos que le detenían por los brazos y hombros, se acercó a su hermano. Llamandole bajo, diciendo su nombre con doloroso temor. 

Pero el dolor acrecentó dentro de su pecho al escuchar a su hermano gruñir en su dirección. 

— Jin… — Le llamó con cautela, sorprendido por la reacción de su hermano. Dolido por no ser reconocido.

Y acercándose todo lo que pudo a los cuerpos ensangrentados en el suelo, lentamente se inclinó hacia él para susurrar su nombre. 

Sin embargo, el omega no le escuchó. 

SeokJin gruñó amenazante hacia él y se acercó más al cuerpo de su alfa, buscando protegerlo con su propio cuerpo ante cualquier peligro que todos los de su alrededor representarán para ambos. 

Su león le repetía una y otra vez el mantenerse alerta, porque todos solo querían atacar a su alfa para acabar con él. Atacarlo en su débil estado porque no podría defenderse.

Pero SeokJin estaba dispuesto a pelear fieramente por él.

Así que sintiendo la amenaza cerca, separó sus rojos y lastimados labios y nuevamente le gruñó al alfa que se acercaba a los dos.

Su instinto le gritaba que él era un peligro, que debía proteger ante todo a su alfa, sin importar quién fuera él.

SeokJin sólo podía pensar en Yoongi y en nadie más.

El rostro entero de Hoseok tembló cuando SeokJin enseñó sus colmillos y amenazante le miró. 

Porque había fuego vivo en sus ojos azules. Ambos cristales brillaban completamente enloquecidos y no había rastro de humanidad en él. Sus blancos cabellos adornaban cuál halo de luz su rostro salvaje y sucio. Su alborotada melena se encontraba totalmente revuelta, con líneas de sangre y trozos de corteza entre cada hebra que se arremolinó sobre él.

Su rostro entero gritaba dolor y desgracia. Sus pestañas húmedas por el llanto le daban un aspecto aún más salvaje a toda su postura arrancada de humanidad. Y Hoseok no lo podía soportar.

Los restos de tierra sobre su piel, las manchas de lodo y la sangre de su alfa combinadas con sus lágrimas desgarraban el pecho de Hoseok con la misma intensidad en que su hermano lloraba sobre Min.

Su firme agarre en el alfa y las feromonas de peligro que desprendía Jin le hacían ver algo que estuvo frente a él y aún así quiso mantenerse ciego. Una verdad oculta, que ahora más que obvia y absurda brillaba de la peor manera frente a él.

Hoseok quería arrancar su propio dolor y lanzarse sobre Jin para arrullarlo hasta que dejase de sufrir. 

— J-Jinnie… Soy yo… — Intentó Hoseok de nuevo.