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2. Estrechando lazos

Estaba paseando por los largos pasillos del castillo, ya que ahora sería mi nuevo hogar. Me topé con la puerta de la biblioteca, cuando vine a verla con Frigga me pareció maravillosa, un lugar en el que pasar un buen rato y distraerte.

Recorro las grandes y numerosas estanterías acariciando las tapas de los libros. Por curiosidad, busco algo sobre las criaturas que suelen atacarnos : trolls, enanos, huargos, minotauros, quimeras...

por si hubiera algun hechizo que pudiera acabar con ellas.

Estoy tan centrada en mi lectura que no me doy cuenta de que Loki me está llamando, solo lo escucho cuando pone su mano en mi hombro, dándome un susto de muerte.

- ¡ Por las llamas de Surt, que es mi padre, Loki !No vuelvas a hacer eso. - Digo con las manos en mi pecho.

- Lo siento, no quería asustarte, pero llevo un buen rato llamándote - me sonríe - ¿ que lees ?- coge mi libro - vaya " Criaturas de los 9 reinos " , interesante, ¿ por que te interesa ?

- Por que quiero saber si aquí dice algo para acabar con esas terribles criaturas, pero no dice nada que no sepa ya - suspiro - y tú, ¿ que lees ? - cogo su libro - "Midgard : el mundo de los hombres ", ¿ por que te interesa este libro ?

- Porque...- parece ponerse un poco nervioso - me gustaría conocer los nueve reinos - se rasca la cabeza.

- Puedes engañar a cualquiera menos a mí, Loki, han pasado años, pero sé bien cuando me mientes - le sonrío - dime, quiero la verdad - se sienta a mi lado.

- Planeo hacer algo en contra de Odín - le miro con espanto - él me apartó de mi auténtica familia.

- ¿ Preferirías ser como tu familia ? Unos montruos, y no lo digo por su aspecto físico, que soy la menos indicada para hablar, ya que cuando uso mis poderes tambiñen me transformo por completo, sino porque matan y torturan a todo aquel que osa contradecirles, o se cruza en su camino, perdona que te lo diga, Loki, pero a tu familia no debiste de importarle mucho - intento decir esto último con algo tacto.

- ¿ Por que dices eso ?

- Te abandonaron en el castillo, ¿ que clase de persona abandona a un bebé a su suerte ?

- Entonces, ¿ que quieres que haga ? ¿ Que me quede aquí, donde a nadie le importo ?

- Te equivocas, a mi sí me importas - agarro su mano - no te vayas, no hagas ninguna estupidez.

- Aquí no tengo nada- susurra.

- Vuelves a equivocarte, tienes a tu madre, tu hermano, ellos te aman, no les importa que tengas otra sangre, en los días que llevo aquí, te siguen tratando como uno más. Tú eres el que les trata de diferente manera. - Pongo una mano en su mejilla - eres tú quien los aleja. No te vayas - le suplico.

- Está bien, lo pensaré - me sonríe, nos quedamos mirándonos a los ojos y siento que los sentimientos que tenía por Loki, despiertan. Cuando era más joven estaba perdidamente enamorada de él, siempre era el centro del mundo para mí. Nos acercanos, estamos a punto de besarnos...

- Lady Edelwaiss - Sif entra en la biblioteca, Loki y yo nos separamos de golpe - ¿ Interrumpo algo ? - nos mira seria.

- No, Lady Sif, ¿ que deseas ?

-La reina desea hablar con vos, ahora - me mira con severidad, seguramente imaginando lo que iba a pasar.

- Voy enseguida - ella se va - Lo que iba a pasar aquí... No está bien, Loki - suspiro - voy a casarme con tu hermano.

- ¿ No me digas que no sientes lo mismo que yo ? Tú tampco has sabido mentirme nunca - me sonríe, se levanta de la silla y se acerca a mi. Pone su mano en mi mejilla, estoy paralizada, ¿ acaso va a intentar besarme de nuevo ? Mi pregunta se responde sola. Sus labios se posan suavemente sobre los míos. Su mano acaricia mi pelo, mientras que la otra la baja a mi cintura. Nos separamos por falta de aire.

- Debo... Debo irme - logro decir, aunque en un simple susurro.

- Ve, no hagas esperar a la reina - me sonríe.

Salgo de allí a paso rápido, no puedo hacer esto. Voy a casarme y lo que menos necesito ahora es tener un lío en la cabeza, por lo que siento por Loki y por el deber que tengo con Thor.

Cuando logro encontrar a la reina, está en los jardines de palacio.

- Oh, Edel, al fin llegas - me sonríe.

- Lo siento majestad, me he entretenido en la biblioteca. - asiente.

- Edel, llámame Frigga, nada de formalidades. Toma - me da una rosa azul. - Loki me dijo que son tus favoritas, a pesar de los años, sigue acordándose de tus gustos. Ven sentémonos, tenemos algo que hablar.

- De acuerdo, ¿ que ocurre ?

- El rey quiere celebrar un baile para hacer oficial el compromiso con Thor - asiento - sé que tu y Thor no estais enamorados, yo tampoco lo estaba cuando me casé.

- ¿ Como consiguió enamoraros el rey ?

- Por los detalles del día a día... Puede que nunca te enamores de Thor, o puede que te enamores mañana mismo, pero al menos sé que os tenéis cariño el uno al otro. Tu madre estaría orgullosa de ver en la mujer en la que te has convertido - le sonrío.

- Gracias Frigga - la abrazo - tu eres lo más parecido que tengo a una madre ya que ella no está.

- Está aquí - señala mi pecho - siempre la llevaremos ahí.

- ¿ Qué he de hacer para el baile ?

- Nada, solo te informaba, por si quieres un traje especial o algo.

- No, lo que tú eligas estará bien - asiente.

-Madre, Edel, ¿ como estáis ? - Thor se acerca a nosotras.

- ¡ Oh Thor ! Estamos bien, le decía a Edel que pronto celebraremos un baile para anunciar vuestro compromiso - Thor asiente - os dejaré a solas.

- ¿ Como te encuentras ? - se sienta a mi lado y deja el Mjölnir en el suelo.

- Estoy bien y tú, ¿ como lo llevas ?

- Bien, mejor casarme con alguien a quien conozco y sé que es buena persona a casarme con quien sabe... Una elfa de la luz o alguna de las guerreras de Vanaheim - me sonríe.

- Sí, supongo que es mejor así - le correspondo la sonrisa - ¿ recuerdas cuando éramos pequeños y solíamos pasar el día corriendo con nuestras espadas de madera ?

- ¡ Oh, por supuesto que lo recuerdo ! - se rie - siempre defendías a Loki cuando me metía con él, por preferir los libros y no las armas ! - me río.

- Cierto, siempre lo hacías rabiar.

- Y tú, siempre lo defendías de todo. Ahora ya no necesita protección. Tiene la magia y también sabe defenderse - sonríe orgulloso

- Ahora yo soy la damisela en apuros - pongo mi mano en el pecho haciendo un gesto exagerado de pena, haciendo que Thor explote a carcajadas.

- Me gustaría ver al necio que se atreve a meterse contigo - hace un gesto de dolor - recuérdame que nunca vuelva a meterme contigo.

- Oh vamos, Thor, solo fue una vez, además fue culpa tuya, no parabas de meterte conmigo - se ríe.

-Tienes razón, lo admito, levanta las manos en gesto de rendición - solo quería ver tus poderes, nunca había visto a un gigante de fuego transformado, y tú nunca querías mostrármelo, tenía que hacer algo para verlo.

- Si, claro, y la mejor idea era mojarme de arriba a abajo, ¿ no?

- Era lo más sencillo - se ríe.

- Eran buenos tiempos...

- Y volverán a serlo, acabaremos con esto, ya lo verás - me abraza.