Un amor inesperado [CLEXA AU]

11. La contratista

No podía creerlo, Wallace estaba aquí ¿Nos estará siguiendo?

Vi que me hacía señas para que fuera, miré atenta por los alrededores de la tienda para ver si Lexa se encontraba por ahí pero al parecer no. Me acerqué a un perchero donde había prendas lujosas e hice como si las estuviese viendo.

—¿Qué hace aquí Wallace? ¿Me está siguiendo? —lo interrogué.

—Vaya, pero dejo de verte por casi un mes y ¿así me saludas? —me cuestionó.

—Déjate de tonterías y dime qué haces aquí.

—Cuidado con ese tonito nena, recuerda que solo mantengo contacto contigo por una sola cosa. ¿Cómo va ese trabajito que te encargué?

Cierto, los documentos. Se me habían olvidado por un momento.

—Para tu suerte ya tengo lo suficiente, solo que no los traigo conmigo —dije nerviosa, no sabía en qué momento Lexa podría volver.

—Sí que eres rápida, haremos una cosa rubia. Mañana mandaré a alguien a casa de Lexa, se hará pasar por un contratista, y cuando Lexa no esté cerca, se los entregas y todo estará hecho.

—De acuerdo... ¿qué pasará con mi madre después de esto? —pregunté intrigada.

—Lo que acordamos, rubia —dicho esto no pudimos seguir hablando porque Lexa regresó.

—Hey, te estaba buscando. Ya está hecho, el vestido es todo tuyo —dijo sonriente.

Lexa's Pov

No sabía qué demonios me estaba pasando, primero me preocupaba por Clarke, después la invito de shopping y le compro un vestido, que por cierto le queda de puta madre. Me sorprende de mí misma ser así, hacer mucho tiempo que dejé de ser de esta manera.

—Clarke quiero ir a un lugar pero no sé si estés de acuerdo... —dije encendiendo el auto para emprender rumbo.

—A donde tú quieras ir yo estoy de acuerdo —dijo sonriente. «Esa maldita sonrisa me vuelve loca».

—Ya, pero este lugar depende de ti...

—¿De mí? —frunció el ceño.

—Quiero llevarte a ver a tu madre —solté sin más preámbulos. Me quedó viendo fijamente sin ninguna expresión en su rostro.

—¿Me lo dices en serio, Lexa? —dijo incrédula.

—De verdad, ¿hace cuánto que no la ves en persona?

—Desde que... ya sabes —dijo desviando su mirada hacia al frente. 

—Si no quieres, está bien Clarke, tampoco quiero que te sientas obligada a...

—Llévame por favor, necesito verla —dijo en modo de súplica y dicho esto fui hacia el hospital donde se encontraba de acuerdo las indicaciones de Clarke.

—Hola buenas tardes ¿en qué les puedo ayudar? —dijo la recepcionista del lugar muy amablemente.

—Hola, me gustaría hacer una visita a... Abby Griffin —oí como decía el nombre de su madre con un tono triste y con angustia.

—Claro, ¿usted qué es para ella?

—Soy su hija.

—De acuerdo, solo llene este pequeño formulario y la dejaré pasar.

Vi como lo llenaba con rapidez y acto seguido la recepcionista nos dejó pasar diciéndonos en qué habitación se encontraba. Una vez frente la puerta, pude ver que Clarke estaba nerviosa, le temblaban las manos con tan solo tocar el pomo de la puerta.