Capitulo 24 El vestido rojo

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Daniel comenzó a besar mi cuello y a tocarme los senos.

- Ven- Daniel me atrajo más hacia el y comenzó a desnudarme.

Pero oí que tocaron la puerta.

-¡Joder!- exclamó Dani.

-¿Quien es?- dije.

- Hija soy yo, tu abuela quiere que bajes y nos cuentes mejor eso del embarazo-

- Esta bien mamá, bajo en un momento-

- No tardes mucho princesa- dice Daniel besándome otra vez.

- Intentaré volver rápido, tu descansa -

Me vestí adecuadamente y salí de la habitación hasta llegar a la sala de estar, para mí sorpresa todos siguen aquí, incluso Anthonio.

- Sabrina eso es cierto, ¿estás embarazada?- pregunta mi abuela.

- Si abuela, dos semanas-

- Ohh felicidades-

Todos se fueron hacercando para abrazarme y felicitarme.

- Esto amerita una fiesta- dijo Madison.

- No Madison, no traerás extraños y harás esas megas fiestas que sabes hacer solo por el embarazo, además a la abuela no le conviene esas emociones- dijo Mary.

- No nada de eso, esta familia ya es bastante grande como para traer más gente, solo llamaremos a los padres de Daniel y a nuestros novios, ordenaremos pizza  para los jóvenes y los demás que cocinen algo para ellos, ¿que tal?-

- Me parece bien querida, pero nada de alcohol- dijo la abuela.

Todos asentimos y coordinamos la pequeña "fiesta" para la noche.
Luego nos quedamos un rato más hablando, hasta que llegó la hora de ir a prepararnos.

Subí las escaleras, y llegué hasta mi habitación, abrí la puerta y me encontré a Daniel sentado en la cama.

¡Rayos! Olvidé que le dije que subiría de una vez.

- Amor lo siento, es que después de hablar lo de mi embarazo las chicas planearon una fiesta para celebrarlo e invitaron a tus padres y pues tarde mucho lo siento-

- Tranquila no te estaba esperando, me dormí un minuto después de que saliste -

Sonreí.

- Eres como un panda, comes y duermes mucho-

- Este panda quiere pedirte un favor -

- Dime que es lo que desea mi amado esposo-

- De casualidad trajiste ese sexy vestido rojo que te pusiste cuando fuimos a cenar en París -

- Si porque-

- Quisieras ponértelo para la dichosa fiesta de hoy -

- Uy quieres que este sexy y elegante para ti bebé-

- No, quiero que estés sexy para Anthonio-

-¿Para Anthonio?-

- Si, para que se muera de envidia, eso sí, no te alejaras de mi ni un segundo-

- Eso es un plan macabro, pero me gusta-

Ambos nos reímos y Daniel se fue a bañar primero, mientras que yo busco el vestido.



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Daniel y yo estamos a punto de salir, el vestido es realmente sexy pero como no es tan corto tiene un toque elegante y fino, me hice una cola para dejar al descubierto mi cuello y verme más sexy, me maquillé y pinté mis labios de un rojo permanente y unos zapatos bajos color negro, en cuanto a Daniel se puso una camisa blanca y un pantalón negro fino, no se molestó en peinarse el cabello, pues solo lo hace cuando va a trabajar.

- Nos vamos- dijo Dani.

Nos tomamos de la mano mientras bajamos las escaleras, todos ya estaban allí, incluso los padres de Daniel, solo faltabamos nosotros.

- Buenas noches familia- dijo Daniel y comenzó a saludar a todos y de paso a disculparse, en cambio yo comencé con el plan que hicimos Dani y yo en la habitación, darte celos a Anthonio, lo que más me emociona es el gran final que Daniel pensó para hacerlo explotar.

Saludé a mis suegros y caminé hacia mis primas y sus novios.

- Hola chicos - los saludé de la mano mientras que trataba de darle la espalda a Anthonio, (el vestido tiene la espalda descubierta).

- ¡Muchachos!- gritó Dani.

- ¡Llegó el Dani!, ¡llegó el Dani!, ¡llegó el Dani!- comenzaron a cantar los chicos, (siempre hacen eso cuando se ven).

La fiesta comenzó y todos comenzaron a bailar o comer, hasta la abuela movió los hombros un poco en señal de que la estaba pasando bien.

Los padres de Daniel se sorprendieron un poco con lo de el embarazo pero todos lo aceptaron de maravilla, incluso su madre se fue en llanto unos minutos de lo feliz que está.

- Mi amor, bailamos -

- Claro -

Daniel me llevo hasta donde todos bailaban y cuando creí que era una canción movida que bailariamos comienza a sonar un suave vals que me hizo sonreír.

Daniel se acercó a mí y me tomó de la cintura para que comenzáramos a bailar.

Que feliz soy en este momento.

El Novio PrometidoWhere stories live. Discover now