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Min sabe que está en el puto paraíso cuando las paredes internas de su omega lo aprisionan  y el tan esperado nudo hace su aparición encajándolo como dos piezas perfectas de un juego de llaves

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Min sabe que está en el puto paraíso cuando las paredes internas de su omega lo aprisionan y el tan esperado nudo hace su aparición encajándolo como dos piezas perfectas de un juego de llaves. Y mientras el omega llega a su tan ansiado orgasmo y su nombre sale de aquellos provocativos labios color cereza, sabe perfectamente que el destino y la madre luna no se habían equivocado.

Min Jimin era su complemento perfecto, su otra mitad y el mejor omega que le pudiera haber tocado. Lo sabe desde el primer momento en que lo vio y lo sostendrá hasta el último de sus suspiros, mientras la marca es nuevamente renovada y aquel lazo que formaron tres años atrás se fortalecía nuevamente, YoonGi comprende que la felicidad no está condicionada por el dinero o el poder, que la felicidad está completamente condicionada por la persona que amas, te ama y en el bienestar mutuo.

Jimin siempre sería su mundo entero, Jimin y aquel cachorrito que estaban esperando con todo el cariño y amor que le fuera posible dar. Frunciendo el ceño notoriamente ante su omega, el alfa preguntó. — Jimin-ah, ¿acaso podíamos hacer esto?

— ¿Quién dice que no? — Jugueteó el menor mientras que con sus piernas alrededor de la cintura del alfa, impedía cualquier movimiento de éste. — Es completamente normal, de hecho... Leí en una revista que... — El omega fue interrumpido por el sonido del teléfono del alfa. YoonGi se encogió de hombros restándole importancia. — No atiendas. — Le recriminó. Min asintió.

— Solo ignóralo, le dije a Suran-noona que estaría completamente ocupado. — Jimin frunció el ceño abultando sus labios en un pucherito que el alfa moría por besar. — ¿Ahora que pasa esponjosito? — Preguntó al término de la melodía. Jimin puchereó.

— Suran-noona estuvo contigo cuando te llegó el celo. — Se quejó celando infantilmente al alfa. — Solo yo puedo saber cuándo es tu celo.  ¿Si eres consciente de que hay relaciones alfa-beta? — Siguió cuestionando con el ceño completamente fruncido. — ¿Había alfas alrededor? También están las relaciones alfa-alfa, ¡no quiero que seas delta! — Exclamó exageradamente mientras veía a su alfa con ojitos de perrito.

— Ya te dije que Suran es mi mejor amiga y no me interesa ser delta, MinMin-ah. — Medio rió por el tierno color carmesí en los cachetes de su omega, Jimin era una cosita adorable que no se daba cuenta de las cosas que provocaba, un lento vaivén se hizo presente nuevamente entre ellos mientras ambos se concentraban completamente en dar y recibir amor, sin embargo, como no todo es felicidad, esta vez fue el teléfono del omega que sonó, YoonGi no se permitió decirle a Jimin que ignorara el teléfono porque sabía que su omega lo dejaría de lado, pero grande fue su sorpresa cuando el rubio omega había tomado el teléfono, con un gruñido de molestia demandó la atención del omega bajo él.

— Es el tono de Jin-hyung. —Susurró bajito mientras trataba de calmarse y no avergonzar a ambos cuando contestara el teléfono. — Mierda, solo quédate quieto. — Min iba a replicar pero la voz de un ansioso Nam se escuchó por el altavoz.

Mi bebé ya nació. — Y solo bastaron esas palabras para que Jimin casi lanzara al alfa al piso, YoonGi utilizó todo su peso para inmovilizar al menor en la cama y este solo gimió al ser víctima del roce del miembro del alfa contra su punto sensible. — Oh Jimin-ah, lamento interrumpir. — Jimin casi muere de la pena mientras YoonGi reía libremente enterrado en la curvatura del cuello del menor. — Los veo luego.

— Yah, Min YoonGi-ah. — Se quejó el omega abochornado mientras sentía la burla transmitirse por su lazo. — Nam-hyung pensará que somos unos calenturientos.

— Lo somos. — Reconoció el alfa. — Llevamos toda la noche de ayer y mañana de hoy encerrados en este cuarto. — El omega ronroneó gustoso cuando sintió a su alfa recorrer su cuello con algunos besos traviesos. — Nunca pensé que la canción de frozen te pondría ansioso. —Comentó divertido moviendo las cejas de arriba abajo.

— Cielos, solo cállate, nunca podré ver la película de igual forma cuando Ana cante otra vez. — Se quejó mientras esta vez le pedía a su alfa un permiso. — Vamos al hospital, el hijo de Jin-hyung ya nació. — Susurró con una tierna sonrisita. Min frunció el ceño.

— ¿Eso no era un tumor? — Y Jimin negó entre risas mientras su alfa lo arrullaba nuevamente entre sus brazos y lo distraía completamente de lo que tenía que hacer.

Min YoonGi solo quería estar todo el día entre los brazos de su omega, ni más ni menos.

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¡Hola!

Pensaba poner lemon pero luego recordé que esta historia es fluff, no drama, no smut, así que solo hice la mención de este.

Si quieren leer algo de esto, tengo otras historias, está Hunter, que es caliente como el sol de verano y con más misterios que el secreto de la cangreburger, y está Chico Heterosexual, aunque en esa no han llegado a nada todavía.

*Publicidad descarada sí que sí*

Muchísimas gracias por leer, la verdad no saben cuánto me alegra el amor que le dan a esta historia. We're pregnant! Es mi segundo bebé YoonMin (El primero es Hunter, lean, es en serio) y me gusta mucho saber que es aceptada por ustedes.

Tengo dos ideas para dos omegaverse nuevos pero realmente no sé cuál desarrollar todavía.

¡Muchas gracias por sus votos y comentarios!

¡Nos leemos pronto! Quienes me siguen saben el orden en el cual actualizo mis historias, sino me estás siguiendo aun ¿qué esperas? No le temas al éxito.

Goodbye.

—MarinaLightweight.  

We're pregnant! » Omegaverse YM.Where stories live. Discover now