Mi Luna

Capitulo 33

Hace 4 años.

Abro abruptamente mis ojos, agitada. Me incorporo, con una extraña sensación en mi pecho.

Mi ceño se frunce, al tener mi cabeza en blanco. No se donde estoy, ni que paso, ni porque estoy atada a una cama.

Ni quien soy.

Escucho una puerta abrirse, miro hacia ahi.

— ¿Donde estoy?, ¿quién eres?— El hombre levanta sus cejas, perplejo. Se acerca

— No, no, no.— Alejo mi cabeza, mientras su rostro se torna triste. Mira detrás de él, noto a otro hombre, apoyado en el umbral, con una sonrisa— Se supone que esto no iba a pasar.

— Efectos secundarios, Esteban.— Se encoje de hombros, se acerca

¿Efectos secundarios?, ¿de qué habla?

— ¿De que esta hablando?— Me remuevo

— Tranquila.— El que estaba a mi lado toca suavemente mi hombro y cierro fuerte mis ojos al sentir un dolor de cabeza

Una pequeña niña rubia riendo aparece, mientras una mujer de cabello castaño lee un libro.

— ¡Para!— Tomo una bocanada de aire y abro los ojos. El hombre aleja su mano

— ¿Acaba de..?— Mira al hombre— ¿Lucian?

No entiendo absolutamente nada. ¿qué fueron esas imágenes?, ¿fue mi familia?, ¿y porque ambos me miran de una manera extraña?

— Te explicaré todo, querida. Pero primero y principal, estamos en una guerra, y tu eres mi guerrera.— Sus manos desatan las mías

— ¿Guerrera?— Frunzo el ceño— No, yo no se nada y..

— Te volveremos a entrenar.— Miro mis muñecas,  lastimadas

— ¿Porque estaba atada y porque no recuerdo nada?— Suspira

— No te mentire.— Le hace una seña a un hombre en la puerta y este asiente. Siento una vibración en mi pecho,  aprieto las sábanas en mis manos

Dos hombres entran, entre los dos cargan algo rojo, algo muy grande. Lo colocan frente mío, dejándome verlo mejor. Logro ver la cobertura sucia de vidrio y adentro una gran luz roja, que se remueve.

Asomo más mi cabeza y jadeo, cuando empieza a vibrar, impulsandose en mi dirección. La luz roja golpea y golpea el vidrio, como si tuviera vida propia.

— Es suficiente.— Ordena el hombre, se alejan

Parpadeo, mientras resoplo. ¿Que era eso, y porque quiero verlo de vuelta?

— Te responderé la pregunta que tienes en la cabeza.— Miro al hombre— Eso era tuyo, es por eso que se impulsa hacia ti. Porque te llamaba y técnicamente, su lugar es estar dentro de ti.— Frunzo el ceño— Pero te lo arrebate.