Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
~•~
– ¡Feliz cumpleaños a tí, feliz cumpleaños querida Annie, feliz cumpleaños a tí! – cantamos todos al unísono viendo a mi amiga apagar las velas de su pastel, todos le aplaudimos y esperamos a que lo sirva. Ha pasado al menos un mes más y estoy mucho mejor ya, me rodeo de las personas que verdaderamente me quieren y me dispuse a mí misma a terminar una pequeña carrera como empresaria en menos de cuatro años la cúal lograré con ayuda de Robert y mis ahorros.
Todos festejamos la fiesta de cumpleaños de Annie en mi casa, muchas personas se dispusieron a venir y supongo qué el día de mañana habrá muchas cosas por recoger y ordenar (esa es la peor parte).
– Camille, ¿puedes creerlo? – se acerca Noah – ¿éste hombre no puede creer que soy el más chico en edad de todos nosotros?
– ¿qué?, ¡eso no es verdad! – sonrió – no debes creerle, Charlie
Y obviamente él y yo nos hicimos muy buenos amigos.
– ¿podrías mentir al menos una vez? no quiero que piensen qué soy el mayor de todos y aún no logro casarme ni tener hijos
– estamos igual, Noah – ruedo los ojos
– al igual también lo estoy – concuerda Charlie alzando un poco su mano
– ¿sobre qué hablan? – se une a la charla la chica del cumpleaños
– de nuestra vida fracasada sin hijos ni casados
– ¿perdón? yo estuve por casarme y por tener un bebé – les recuerdo sin llegar a más detalles melancólicos.
– eso es verdad, yo fui testigo de eso – dice Charlie posicionándose a mi lado rodeando mis hombros con uno de sus brazos, entre ambas ya hay confianza suficiente como para hacer eso. No hay el mínimo problema
– sí, bueno supongo qué tendré que buscar pareja pronto
– yo me casaré contigo – le dice Annie y todos soltamos una carcajada – ¿qué? lo digo de verdad
– ni siquiera estoy enamorado de tí
– ¡eso fue muy grosero! – le reprendo
– ¿de qué me perdí? – llega Alice a nuestra plática
– prácticamente Annie le acaba de pedir matrimonio a Noah – responde Charlie.
– no malinterpreten las cosas – aclara poniendo alto a nuestras risas – solamente fue una sugerencia, es obvio que ni siquiera está enamorado de mí tampoco yo lo estoy de él. Pero, sin en cambio es una buena idea
– no lo creo – comenta Noah dándole un trago a su bebida
– te propongo algo, sí en menos de dos años no conocemos a alguien tú y yo nos casaremos ¿qué te parece?
– bien, trato hecho. Pero estoy seguro de qué eso no pasará – ambos estrechan sus manos
– eso ya lo veremos – le guiña un ojo.
– vaya, es el trato más extraño que haya presenciado en mi vida – admito.
– estoy de acuerdo.
– yo también.
~•~
Me aparto de toda la multitud por un momento y con cansancio entro a la casa y subo hasta los largos pasillos para tirarme en uno de ellos a descansar, a decir verdad me encuentro algo ebria y eso no es una buena señal, la última vez que lo estuve Roger y yo terminamos teniendo sexo en la parte trasera de un bar y ahora no quiero tener eso con alguien.
– ¿la fiesta ya terminó para tí? – llega Annie sentándose a mi lado
– solamente vine a descansar
– te comprendo, al igual estoy agotada
– ¿de dónde conoces a tantas personas? literalmente mi casa está repleta de desconocidos
– son amigos del trabajo ó amigos de mis amigos ¿buena táctica para colarse en una fiesta?, ¿eh?
– eso lo hicimos durante nuestra época de adolescencia y no resultaba nada bien
– es verdad, al final solían sacarnos de las fiestas por no ser parte de la familia – ambas reímos al recordar aquellos momentos de nuestra adolescencia.
– por lo menos tú no los corres.
– nunca haría eso.
– ya hablando seriamente, ¿de verdad piensas casarte con Noah?
– no, solamente quería molestar y espantarlo un poco; siente qué se le está yendo el tren al no estar comprometido aún
– eres mala, muy mala
– y ahora dime, ¿hay algo entre tú y aquel guapo doctor?
– ¿quién?, ¿Charlie?
– ajá – me mira con picardía
– somos amigos
– eso decías de ya sabes quién... – ríe con nerviosismo
– bueno, en éste caso estoy diciendo la verdad.
– al menos para tí lo es – se levanta
– ¿qué quieres decir?
– eres muy ingenua, es obvio que te quiere más que una amiga; es muy lindo contigo
– yo lo veo como algo natural, no seas ingenua tú.
– si así quieres verlo
– y así lo veo.
– deberías darle una oportunidad.
Al decir lo último da la vuelta y se va caminando por el extendido pasillo, nunca he notado alguna intensión fuera de lugar en Charlie aunque sí lo admito, desde lo sucedido en aquel hospital se comenzó a comportar de los más atento y lindo conmigo; no lo veo más que como un buen amigo, es atractivo y tiene todas las cualidades que una mujer busca en un hombre, es totalmente un caballero y muy buena persona, pensándolo bien no sería mala idea que tuviéramos algo en común pero hay algo que aún ronda por mí mente y ése algo es, Roger Taylor.
~•~
Okey, a partir de aquí ya quedan poco menos de ocho capítulos para terminar.
