Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
~•~
Salgo del hotel con todas mis pertenencias en manos, llamé a mamá sin decirle la situación actual solamente le dije que Roger y yo “no estábamos en condiciones ” y me quedaré con ella un par de días en su casa que tiene aquí en la ciudad, afortunadamente en su empleo le dieron vacaciones y estará aquí por un par de días más. Siento que me quedé sin lágrimas de tanto lloriquear, tal vez sea falta de hidratación o simplemente ya no tengo fuerzas para seguir haciendo aunque al igual tampoco ganaba nada con seguir haciéndolo, solamente me seguía afectando a mí pues desafortunadamente ya no se encuentran terceras personas involucradas en está horrible situación
Después de casi media hora de viaje llegue a casa de mamá y pasamos un rato agradable charlando, no estaba muy cómoda y quería mostrarme lo más normal posible y así no notará lo deprimida que estoy
– he pensado mudarme a la casa que la abuela me dejó, ¿qué te parece la idea? – le digo
– es genial, será un buen lugar para criar a mi nieto ¿no crees?, ¿ya hablaste de ello con Roger? – y eso fue suficiente para que pusiera una gran cara larga
– ehh… no, de hecho planeaba mudarme yo sola, sin nadie más
– aquí está sucediendo algo – deja su taza de café en la mesa y me mira con seriedad y los brazos cruzados
– mamá, todo está mal – evitó su mirada y así me contenga más el llanto – Roger me engañó evidentemente fue con otra chica – miro al techo para que las lágrimas acumuladas no caigan
– oh, dios mío – hace una enorme cara de decepción – nunca lo creí de él
– si lo hubieras conocido desde antes no estuvieras tan sorprendida
– ¿lo dejaste ya?
– relativamente lo hice y no solo fue eso, Rose mi propia hermana fue cómplice de eso
– Rose... – cubre su rostro levemente – entre familia no debemos hacernos daño
– ella no será mi familia, nunca más desde siempre me a odiado lo he notado no soy tan estúpida como lo cree
– ¿hablaste con ella?
– no pienso hacerlo. Aunque sea mi media hermana no creó poder perdonar algo así
– lo entiendo es tu decisión y debe ser respetada, fue un acto muy horrible de su parte
– hay otra cosa más que debes saber – tomo un ligero respiro antes de darle la noticia más trágica de todas – ya no estoy embarazada, perdí al bebé
– ¿qué?, ¿cómo? – se levanta y se sienta a mi lado – no puede ser posible, todo estaba en buena condición
– eso creímos pero no fue así, desde hace tiempo había sentido molestias y no había querido ir al médico – comienzo a llorar y mamá también lo hace
– cariño, lo siento muchísimo de verdad me entusiasmaba tanto la idea de que me dieras un nieto – hace que coloqué mi cabeza en su pecho, como cuando era niña, a eso me recuerda
– lo sé, a mi también me entusiasmaba la idea de ser madre.
~•~
No he podido dormir de nuevo y opte por bajar a la planta baja de la casa y perder el tiempo dando vueltas y pensando en todo lo sucedido, no creo poder superarlo tan rápidamente como creí, toda esta situación es muy perturbante y triste será algo que permanecerá en mi memoria por cientos de años y vidas más.
Sin estar muy segura me siento en el sofá y tomo el teléfono. Es hora de marcarle a Taylor.
– ¿Hola? – responde, espero unos segundos hasta poder hablar, no me salen las palabras suficientes pata explicarlo – ¿Hola? – insiste
– Roger... – hablo con vos apenas audible
– ¿Camille?, ¿eres tú? – de alguna forma siento un gran alivio en él, me trasmitió aquella sensación de tranquilidad y despreocupación – ¿en dónde estás? Necesito hablar contigo, por favor dime en donde te encuentras
– yo... – aclaro mi garganta – fue algo estúpido haberte hablado – me hago el cabello hacía atrás con desesperación sí fue algo estúpido haberlo hecho, me siento patética
– era lo que más necesitaba, creeme
– no quiero escuchar tus patéticas y absurdas disculpas ¿okey? Solamente llamo para darte una noticia – tomo un respiro – ya no estoy embarazada.
– ¿a qué te refieres?
– dios, razona un poco no quiero decirlo – ruedo los ojos – Roger, perdí al bebé eso sucedió
Se torna un frío y largo silencio de su parte, se límita a responder e incluso puedo jurar que lo notó totalmente pasmado, en shock, congelado y con el corazón roto tal y como me sucedió a mí.
– ¿es una broma, no es así?
– no lo es, quisiera que lo fuera pero no es así
– dios mío, ¿cómo lo pudiste permitir?
– ¿estás loco?, obviamente yo tampoco quería que sucediera
– ¡no! fuimos ambos, ambos tuvimos la culpa por la maldita pelea que tuvimos
– no fue eso, el bebé ya venía mal
– creo que será mejor vernos y hablar de esto, estoy ocupado
– hice suficiente con informarte.
“¿con quién estás hablando?”
Escucho una voz femenina mientras espero la respuesta del rubio, y obviamente sé de quién se trata. Qué repugnancia, ¿cómo se atrevió a meterla a nuestro antiguo hogar después de lo sucedido? Roger no tiene prudencia alguna, ahora me queda más claro todo estaba esperando el momento exacto para deshacerse de mí.
– no quiero dejarte sola en éste momento tan difícil, ¿comprendes?
– ¿para qué?, si al parecer tienes una muy buena compañía
– por favor... eso es lo de menos ahora
– no quiero iniciar una estúpida discusión por teléfono. Nos vemos mañana a las nueva en la cafetería.
Sin esperar su respuesta cuelgo el teléfono y me siento en el sofá con ambas manos cubriendo mi rostro, comienzo a llorar con la imagen en no cabeza de Elisa estando en mi antiguo hogar usando todas las cosas que ambos habíamos construido para nuestra estancia ahí, sin contar las fotos y recuerdos que habíamos recolectado con el paso de los años; puede que ahora mismo los éste destruyendo sin piedad alguna mientras Roger está sentado en el sofá con una cerveza y viendo el televisor sin importarle nada más, teniendo aquella ignorancia que suele caracterizarlo. Ambos son muy estúpidos
