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Al bajarme del auto lo primero que veo es un camión de mudanza estacionado fuera de casa con algunos hombres subiendo y bajando muebles de él, sería un milagro que Rose por fin allá decidido mudarse, desde hace tiempo lleva diciéndolo pero no lo hace.
Al entrar a casa veo desordenados la mayoría de los muebles y no tengo la menor idea de qué es lo pasa, necesito averiguarlo
Emprendo mi camino hacia el estudio de papá, él debe darme una respuesta a todo esto
– Hola papá – digo debajo del marco de la puerta
– Hola cariño, espero no te moleste todo este desorden
– De hecho, vengo a preguntarte sobre esto ¿quién se muda?, ¿Rose se va?
– Para nada, Olivia se mudará con nosotros
– Oh... Olivia, bueno pues es una noticia sorpresiva pero algo agradable, ambos se comprometieron y esto debe ser un gran paso en su relación
– Estás en lo correcto, ¿esto te molesta?
– No, para nada bueno solo un poco pero supongo qué es normal suele pasar comúnmente cuando los padres llegan a tener alguna otra pareja sentimental ¿no crees?
– De nuevo estás en lo correcto, te agradezco mucho tú comprensión significa mucho para mí
– Por favor no hables papá, tengo que decirte algo muy importante – ya está es ahora o nunca.
– ¿Qué pasó ahora? No me digas que estás embarazada, creeme ya recibí una noticia así y no me gustaría llevarme otra de parte tuya
– Espera un segundo, ¿quién está embarazada? - lo volteo a ver bastante confundida - ¿Es Olivia?
– No para nada, mejor dime ¿qué es lo que pasa esta vez? – no responde mi pregunta pero sin en cambio está decidido a escucharme se lo diré ahora, después tendré tiempo para descubrir quién es la embarazada. Está bien, yo... deje la carrera hace un par de días
– ¿Es una broma?
– No lo es, yo en verdad lo siento demasiado; no me sentía cómoda llevando esa carrera y las cosas se me complicaban demasiado... Lo siento muchísimo papá, en verdad – su rostro no muestra expresión alguna
– Ya lo sabía
– ¿Qué?
– Llamaron hace dos días de la escuela, ellos me lo dijeron, toma asiento por favor – me indica la silla frente a su escritorio, y enseguida me siento
–¿Te encuentras molesto? – con calma al igual se sienta
– Por supuesto, me encuentro molesto desde hace dos días, para haber tomado esa decisión primero debiste consultarme las cosas no se hacen sin pensar dime, ¿acaso ya pensaste en qué harás después de haber dejado la carrera? – niego – Lo supuse.
